ACOSADOR ʚ KookMin

•capítulo 30•

Maratón 2/3

La sonrisa de su pequeño novio no podía estar más amplia porque sus gruesos labios no lo permitían pero el que muestre lo feliz que estaba hacia por ende que el se sienta igual de feliz, no podía creer que hiba a hacer eso solo por su novio... Es decir... No era que le aterraba la idea de venir a una universidad y ya... Solo... Solo jamás había ido siendo Jungkook por lo que lo hacia sentir raro. Seria la primera vez que lo vieran. O al menos eso pensaba.

-Jungkookie, te sentaras a mi lado, asi ocuparas el lugar de alice- dijo señalando a su lado-

-¿Amor, que le dijiste al director para que aceptara?- pregunto mirando a su novio con curiosidad-

-cositas bebé, cositas- dijo guiñándole un ojo, lo que a jungkook le pareció muy tierno, gracioso y sexy a la vez, ¿Jimin sabia que no se podía diferenciar si de verdad guiñaba el ojo o no?-

Pero ni bien se sentaron jungkook podía sentir como las miradas lo carcomían como si fuera algún tipo de comida o algo asi por lo que hizo que se sintiese incómodo, sin embargo no le tomó tanta atención a eso, debido a que de todas maneras debía atender a la clase, después de todo el aprender esta y las demás clases eran para beneficio únicamente propio.

-Oye... ¿me prestas borrador?- una voz femenina lo interrumpió haciendo por ende que las dos personas le tomaran atención, pero claro una mirada era de confusión y la otra solo quería asesinarla-

-Dejame ver si ten...-

-No tiene, ahora puedes irte- se adelanto Jimin mientras la miraba con cierto desprecio-

Al parecer la chica entendió perfectamente la indirecta por lo que tan solo se marchó sin decir nada más, Jimin se acomodo de nuevo a su lugar atendiendo a la clase.

Seria un día muy largo.

~•♥•~

-Oye bebé... ¿estas enojado?- preguntó jungkook a lo que rápido Jimin negó comiendo su pan de mala manera-

Si lo estaba.

-¿Porque estas enojado?, Ahora que hice-

-Pues nada amor, solo nacer tan perfecto, tener un cuerpo como los dioses y ser tan guapo, nada más- dijo fingiendo una dulce sonrisa-

-Oh vamos Jiminie... No puedes enojarte conmigo por eso, no es mi culpa además... Si te refieres a las miradas, me vale los mil pepinos existentes del mundo, con solo tu mirada me siento completo, amor... Deberias saberlo, a parte fue tu idea traerme-

-¿Estas diciendo que es mi culpa?-

Jungkook no pudo evitar soltar una pequeña risita mientras se acercaba a su novio y lo abrazaba fuertemente pegándolo a su cuerpo.

-Eres lo único que me importa en la jodida vida Park Jimin- susurro en su oído-

Jimin sonrió débilmente dejando su enojo tonto a un lado y creyendo perfectamente, completamente en sus palabras, se sentía tan especial y bien a su lado que no podía ver lo negativo de nada... ¿habria algo negativo en jungkook? Por que si habría el juraba que no podría encontrarlo, y por más que le asustaba un poco aun la idea de amar tanto a una persona solo se quería dejar llevar... Dejar hacer y deshacer por todo lo que estaba sintiendo ahora... Jungkook era lo más bonito que le había pasado y estaba seguro de que no le haría daño... Confiaba en su novio.

-Jungkookie... También eres lo que más me importa en la vida, te amo mucho conejito mío-

El más alto solo atinó a sonreír mientras se debatía dentro de si mismo como debía decirle a Jimin sobre su secreto, sabia que no quería malograrla por más tiempo, porque era obvio que eso pasaría si sus mentiras crecían cada vez más... Debía tomar el valor de poder creer en su novio y decirle la verdad... Debía hacerlo... Porque Jungkook confiaba en Jimin, confiaba en que lo comprendería al final de todo... Confiaba en que... Sus te amo y sus por siempre no cesarían después de ello.

-Amor... ¿Quieres salir hoy?- preguntó jungkook viendo la oportunidad de hacerlo-

-¿Hoy?- preguntó jimin haciendo un puchero- Hoy tenemos tarea de historia bebé, ¿no estabas atendiendo a clase?-

Y lo cierto era que no, en toda la clase no podía pensar en otra cosa que no fuera lo perfecto que era Jimin, su rostro tenia la obra de arte más preciosa de todo el jodido mundo entero, sus pequeños ojitos acaramelados que apenas se veían, sus labios que parecían dos deliciosos bombones suaves, su piel tan tersa... No había nada más hermoso que el, definitivamente un ángel era opacado al lado de Jimin.

-¿Eso es un no?, ¡Jungkookie porque demonios siempre te pierdes en la nada!-

-Pues eso es tu culpa, siempre me tiene estúpido con lo perfecto que eres, me tienes llendo al más allá a cada minuto por estar siempre en mi mente, porque joder ¡Park Jimin te amo!-

Jimin no pudo estar más sonrojado por aquello, que jodidos tenia en la cabeza para gritarlo a todos aunque no podía evitar sentirse la persona más afortunada del mundo teniendo un novio como Jeon Jungkook.

Su pequeño receso no duró mucho por lo que a regañadientes tuvieron que regresar a su salón de estudios respectivos, debido a que ambos no eran de carreras iguales (Alice y Jimin) tenían que separarse siendo asi que jungkook tome el lugar de alice, al despedirse Jimin dijo que se iría primero para acabar con la tarea rápido debido a que habían quedado de verse a las 6pm en la heladería de la esquina.

Las horas pasaron más rápido aún por lo que sin pensarlo mucho, Jimin voló hacia su casa, claro en sentido figurado, en todo el camino no pudo quitar la sonrisa de su rostro, cada vez Jungkook solo hacia que se enamore más de el, era tan hermoso, por dentro y por fuera, como un perfecto príncipe de cuento de hadas... Pero era solo su príncipe.

Al llegar a su casa su sonrisa se borro rápidamente al notar algo que lo había atormentado durante los días anteriores... La puerta estaba abierta por lo que solo significaba una cosa.

El sobre.