¿Ficción o Realidad? ©

9. ¿Un Luxen te mutó? ¡A quien le importa, mis novios literarios existen!

—Pero tranquila, hay pocas probabilidades de que, si eres un unicornio caga chocolate, no puedas volar y escupir caramelos. Aunque no puedo asegurar si serán caramelos de menta.

¿Cómo puede bromear en un momento como este?

—Si no soy humana... ¿Qué soy? —quise saber.

—¿No escuchas? No lo sé. ¿Ahora si lo captaste? No. Lo. Sé.

Resople. —Entonces no eres tan talentoso, señor engreído.

—¿No lo soy? —Él extendió su mano y con solo eso, un simple movimiento con su mano, el sillón que estaba en la sala, a unos cuatro o cinco metros de distancia, voló hasta donde él estaba, posicionándose justo detrás de él. Se sentó, estirando las piernas y cruzando los brazos—. No sabes de lo que soy capaz.

—Eres un Luxen, ¿no? —pregunté, haciendo caso omiso de su afirmación.

Los Luxen eran extraterrestres hechos de luz, si, suena raro, pero eran "seres de luz" Ellos podían tomar la forma humana que quisieran para habitar en la Tierra, debido a esto, se podían identificar debido a su extrema belleza, y sus ojos increíbles. Esto explicaría como Jake se puede ver así. Lo odio, es un idiota, pero debo reconocer que nunca había visto a alguien tan atractivo. Y sus ojos... bueno, ya saben como son. Imposible describirlos en palabras.

—Sé que piensas que mi belleza es tal que no puede ser de esta galaxia. Pero nop, no soy un Luxen... bueno, casi.

—Sera que tu idiotez es tal que no puede ser de esta galaxia —corregí—. Y... ¿cómo puedes ser casi Luxen?

Oh, espera. ¡Claro! Me doy una cachetada mental. ¿Cómo no lo pensé?

—Eres un hibrido.

Todo lo del libro vino a mí:

Los Luxen tenían habilidades de curación, podían sanar a las personas solo con sus manos. Pero esa sanación tenía efectos secundarios en los humanos, o más bien en su ADN. Si a un humano le sucede algo y se hiere hasta tal punto de estar al borde de la muerte, y un Luxen que realmente desee y quiera sanarlo -normalmente porque sea un gran amigo o tengan una relación amorosa- lo podía sanar completamente, pero cada hecho trae sus consecuencias. El ADN del humano se mezclaba con el ADN del alienígena, lo que ocasionaba que el humano mutara, obteniendo las habilidades que tienen los Luxen, tales como controlar la luz y energía, mover y detener o congelar objetos (Lo cual explica el jarrón volador) correr a la velocidad de la luz (que explica como desapareció de mi vista en la cancha en un parpadeo), no enfermar, entre otras cosas. Pero esta "mezcla de ADN" daba como resultado que el Luxen y el humano mutado desarrollaran un vínculo biológico, otro dato más es que, gracias a este vinculo, si fallece uno... también fallece el otro.

Su boca se curvo hacia arriba y asintió. —¿Supongo que ya lo sabes todo, y no tengo que perder tiempo de mi valiosa vida explicándote cómo mute y que es un hibrido?

—Sí, idiota, no tienes que perder tiempo de tu miserable existencia. Lo sé todo.

—Me gusta esto de que seas lectora.

Volvió a extender el brazo, con la palma abierta, y un libro viajó desde el librero hasta su mano, un segundo después reconocí cual era. Daemon Black, uno de mis novios literarios, estaba en la portada. Era Origin, el cuarto libro de Lux, amaba tanto el libro como la portada: La camisa de Daemon estaba un poco abierta mientras caminaba, con una mirada en esos hermosos e inhumanamente increíbles ojos verdes de gran determinación por salvar a Katy. La frase que se encontraba en la parte superior derecha lo confirmaba: "Él quemaría el mundo para salvarla...". Ojala existiera alguien así.