"-Todo lo que hice fue para que te enamoraras de mi. Para que veas que yo tenía razón. -Sus ojos completamente aguados se reflejaban en los míos mientras terminaba de romper su corazón, mi corazón. - Solo eres eso, Christopher. Solo eres uno más."
S...
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- ¿Ya estas mejor? – Asentí aun en sus brazos. No quería soltarlo. Tenía la sensación de que si dejaba de abrazarme tan fuerte iba a romperme de nuevo.
No fue necesario decirle que no quería hablar del tema, al parecer él lo había comprendido con mi mirada ya que no pregunto nada y se lo agradecía. No podía ir por la vida contando mi historia con el profesor de literatura ni lo que había pasado hace algunos minutos, no solo podía costarme la matricula si no que a él el trabajo.
Nos quedamos así hasta que el timbre sonó. Me ayudo a pararme y me acompaño hasta el baño para que me lavase la cara. Al parecer también había llamado a Holland porque la pelirroja apareció minutos después y sin decir nada me abrazo. La deje hacerlo porque necesitaba un poco de apoyo y no quería aprovecharme de la bondad de mi amigo Luke. Era un buen chico y habíamos compartido muchas noches graciosas juntos desde que estaba aquí pero no quería sobrecargarlo con mis problemas.
- ¿Quieres que vayamos a tomar algo y nos saltamos el entrenamiento?
- Suena muy tentador, créeme, pero llego a faltar una vez mas y van a expulsarme. – Ella soltó una pequeña risa contagiándome. Maldito sea el día en el que me inscribí en el equipo. – ¿Tienes Rímel? Me veo terriblemente mal.
- No seas exagerada. Ojala yo me viera así de bien después de llorar tan intensamente. – Fruncí el seño al escucharla. – Te estábamos buscando con los chicos cuando te vimos en el piso con Luke aunque nadie quiso interrumpir.
- Genial, ahora todo el mundo me vio llorando como idiota.
- Esta bien quebrarse a veces, Sophie. No sé qué es lo que está pasando en tu vida últimamente pero no tiene nada de malo estar mal. Sabes que siempre puedes contar conmigo, también... Solo digo.
Sonrió como si fuese una niña pequeña y no pude evitar pensar en lo agradecida que estaba de tenerla como amiga en este lugar. Tenía que contarle la verdad pero no sabía cómo, era su primo de la persona que estábamos hablando.
- Gracias, Holl. No sabes lo feliz que estoy de tenerte.
- Y yo a ti. Es bastante complicado estar en este colegio sin tener amigos.
- Ahora me tienes a mí, así que dame ese Rimel que tenemos que ir a clases y después aguantarnos a la insoportable de Alison.
- Ni me lo digas – Revoleo los ojos antes de entregarme su set de maquillajes y se volteo a mirarme todavía sonriendo – No es que quiera insinuarte nada pero el que estaba como loco cuando te vio fue Stone. ¿Qué está pasando entre ustedes?
- Nada. Solo somos compañeros. – Respondí cortante y ella lo entendió al segundo ya que su sonrisa desapareció.
- Esta bien. Si tú dices. ¿Vamos?
Asentí y nos dirigimos juntas a la próxima clase que teníamos. Luke nos estaba esperando en el pasillo apoyado en la pared de enfrente así que se nos sumo abrazándome de costado y asintiéndome con la cabeza con la pregunta de si estaba bien escondida. Le respondí que si y me sonrió como solo el sabia hacerlo. Amable pero juguetón.
