Todo pasaba bien, aunque sólo tenía 5 meses ya tenían todo listo en lo que sería la habitación del bebé, todo en colores pasteles y la ropa que habían comprado era de colores neutros ya que aún no sabrían que sería, aunque estaban seguros que fuese lo que fuese lo o la amarían más que nada en este mundo.
Y hoy, era el día, sabrían que sería su bebé.
Mikey, cálmate. Ríe bajo mirando a su pareja como ordenaba todo emocionado y nervioso.
Lo sé lo sé pero no puedo, hoy sabremos que es esta hermosa cosita. Dice acariciando su pancita que ya era bastante grande por lo que le comenzaba a dar malestares debido a su pequeño y delgado cuerpo. ¿Y tú por qué estás de pie? Ven, siéntate. Le dice tomando a su novio y lo sienta en la cama, digamos que estos últimos meses Michael se había vuelto un tanto sobre protector.
Hey, tampoco estoy inválido. Lo mira con un puchero que inmediatamente besa y este sonríe. Qué decir, contigo no me puedo enojar.
Noup, no puedes y si te enojas te quitaré el enojo a besos y cosquillas. Sonríe mirandolo y lo ayuda a levantarse cuándo tiene todo listo. Bien, vamos o si no llegaremos tarde y moriré de la emoción.
Vale vamos exagerado. Ríe suave y ambos toman la carpeta de los controles y bajan saliendo de casa, se suben al auto del mayor y comienza a conducir a la clínica donde llevaban el embarazo.
Llegan y esperan su turno en la ya conocida consulta de la dra Elisa que había llevado el embarazo todos estos meses. Ven a una pareja salir y la doctora sale detrás mirándolos con una sonrisa amable.
Buenos días chicos, ¿Cómo están?. Dice saludandolos y se sientan. ¿Alguna molestia? ¿Mareos?. Elisa los mira atenta.
No, sólo le duele un poco la espalda y sus antojos de las tres de la mañana. Explica Mike y Luke asiente ante la respuesta, Elisa anota y se levanta.
Muy bien, le daré unas pastillas para el dolor de espalda especiales para no dañar al bebé con químicos fuertes pero recomiendo sólo si el dolor es muy fuerte, si es suave un baño caliente y un masaje funcionarán bastante bien. Sonríe amable dándole la receta médica a Mike y este asiente guardandola en la carpeta. Ahora, a lo que han venido, Luke súbete a la camilla y levanta un poco tu camiseta por favor.
El rubio asiente y con ayuda del más grande se acuesta en la camilla levantando un poco su camiseta, la doctora hecha el gel en su vientre y comienza a pasar la máquina mirando la pantalla atenta mientras la pareja la mira expectante y un poco nerviosos.
¿Y bien?. Murmura Mike un tanto exasperado y la doctora les sonríe.
Bueno, ustedes tendrán una hermosa niña. Dice y ambos se miran asombrados y sonrien.
Tendremos una beba. Luke siente a su Omega chillar de emoción saltando en su pecho. Nuestra pequeña niña.
Nuestra bebé. Afirma Mike abrazándolo con cuidado y lo besa suave.
Cuando la emoción baja un poco la doctora le entrega papel absorbente al omega para que se limpiara el gel mientras imprime la ecografía y cuando ambos están listos se la da.
Bien, todo sigue perfectamente, sólo no abusen mucho de los antojos y seguirá todo normal, nos vemos el próximo mes. Explica la beta y ambos asienten.
Vale, muchas gracias doc. Mike la mira con una sonrisa amable, se despiden y salen de la consulta emocionados.
¡Tendremos una niña! Hay que comprar lo que falta. Luke parecía un niño emocionado por lo que el mayor sonríe enternecido mirándolo como bobo. ¿Qué? ¿Tengo algo?. Lo mira curioso y él niega acercándose para tomarlo por su cintura.
Me encanta verte emocionado, pareces un niño en su cumpleaños. Besa suavemente sus labios y este le sigue el beso rodeando su cuello. Te amo cariño. Besa su frente y sus rojas mejillas.
Y yo a ti. Sonríe abrazandolo cómo podía por su pancita prominente.
Ahora, vamos a comprar las cosas que faltan para esta preciosa. Se agacha besando su pancita y él asiente.
Vamos. Ambos salen de la clínica y se dirigen al estacionamiento, se suben al auto y se van al centro comercial.
El viaje pasa tranquilo entre los planes cuando naciera la bebé con una suave música de ambiente. Llegan al centro comercial y Michael estaciona para luego bajarse y rodear el auto abriéndole la puerta a su pareja ayudándolo a bajar, cierra bien el auto y ambos entran al cc comenzando a recorrer tiendas de ropa tanto para bebés como para Luke ya que necesitaba ropa mas ancha y no podía adueñarse del todo del armario de Mike.
Dos horas enteras se la pasaron comprando y comprando hasta que el estómago empezó a rugir y tuvieron que hacer una pausa en un restaurante italiano a petición del menor.
Mis pies me están matando. Se queja el de ojos de colores comiendo de su plato.
Tranquilo, terminamos y nos vamos a casa, ya fueron demasiadas compras por hoy, parezco un burro de carga. Bromea el oji verde haciéndolo soltar una suave risita.
La comida termina y después de pagar la cuenta se levantan tomando las bolsas que traían para salir del cc, llegan al auto y guardan algunas cosas en el maletero y otras en los asientos traseros debido a que no cabía todo, se suben y emprenden rumbo a casa ya de noche.
Cuando llegan estaban los chicos en la sala por lo que aprovechan de contarles de su sobrina y luego de muchas felicitaciones cada pareja sube a su habitación para alistarse a dormir.
Ven, te daré un masaje. Mike se sienta abriendo las piernas y Luke se sienta entremedio de estas y el alpha comienza a masajear su espalda relajándolo, termina con la espalda y se levanta acostandolo, se sienta y toma su pie derecho dándole masajes para continuar después con el izquierdo. ¿Qué tal ahora?
Muchísimo mejor, gracias. Sonríe adormilado y lo atrae a su pecho acurrucandolo y acaricia su pancita.
Descansa cariño. Besa su frente y ve como el menor se duerme, él esboza una sonrisa y se duerme pensando en su niña.