Touch Me ✿ Kookmin

24

Jimin estuvo demasiado desanimado toda una semana. Al final se acobardó y no pudo ni siquiera mirar a Jungkook. Tenía miedo de encontrar a Joy en su casa.

Sus compañeros lo notaron, más ninguno se animó a hablarle. Jimin se sentía demasiado solo.

Al terminar las clases Jimin esperó el autobús en la parada. Sentado en una banca, observó a varias personas caminar, entre ellas, una mano se alzó entre la multitud de estudiantes y se agitó.

Jimin siguió mirándolo pero esta vez con confusión y sin saber si el saludo iba dirigido a él, lo respondió.

Cuando la persona se acercó lo suficiente, a Jimin le pareció haberlo visto en alguna parte sin embargo no recordó quién era.

— Hola Jimin — saludo en cuanto llegó —, no te veía desde hace tiempo.

Jimin sonrió nervioso, el rostro del chico le parecía demasiado familiar.

— Hola ¿Nos c-conocem...

— Quería disculparme — le interrumpió —, no debí hablar la noche de mi fiesta, lamento si te hice sentir incómodo, no fue mi intención crear problemas entre Jungkook y tú.

— ¿Taehyung? — susurró —, oh no te preocupes, no sucedió nada.

— De igual manera quería disculparme, Jungkook casi me asesina al día siguiente.

Jimin rió y Taehyung le siguió, éste último tomó asiento al lado de Jimin.

— ¿Y qué haces aquí?, La universidad no está muy cerca.

— Vine por mi hermano, prometí llevarlo a un lugar.

Jimin asintió lentamente y siguió observando alrededor.

— ¿Puedo preguntarte algo? — Jimin giró a verlo. —, ¿Ha sucedido algo entre Jungkook y tú?

Jimin bajó la vista sin responder.

— Lo siento, fue muy atrevido de mi parte, pero Jungkook ha estado muy desanimado y distraído, siempre que le pregunto que sucede me ignora o responde otra cosa.

— Terminamos. — respondió.

Taehyung se sorprendió.

— Pensé que era un problema temporal, ya sabes, las parejas algunas veces discuten.

Jimin se encogió de hombros sin saber que decir.

— Debo irme. — avisó Jimin al ver que el autobús se acercaba.

Sin despedirse, se levantó y subió al autobús rápidamente.

— Adiós. — escuchó a Taehyung despedirse.

No lo volteó a ver aunque sentía que estaba siendo grosero, pero no quería que le viese lagrimear. En el trayecto hacia el hotel solo pensó en Jungkook.

• • •

— ¿Cómo está?

Taehyung se acomodó en el asiento y se colocó en cinturón mientras suspiraba.

— Igual que tú, no puedo creer que seas tan cobarde como para mandarme a mí a hablarle.

Jungkook suspiró frustrado y se encogió en su puesto.

— Dame un cigarrillo. — susurró hastiado.

Taehyung frunció el ceño y negó con firmeza.

— Joder Taehyung ¡Necesito un maldito cigarrillo! ¡Dámelo ya! — gritó enfurecido.