FORGIVE ME H.S {EN EDICIÓN}

CAPITULO|0011

Relamí mis labios.

— Al menos dime...dime la verdad.
— digo con voz temblorosa.

— ¿Que demonios quieres?.—dice en tono frío.

—¿Todo lo que escribiste en la carta era cierto o...

— ¿En serio te atreves a preguntarme esa estupidez?.— Pregunta apretando los dientes,mis lagrimas comienzan a salir.— Tienes el descaro de venir aquí y preguntarme esto. —
Este mira al suelo unos segundos y vuelve su mirada a mi,aún más fria.
— Pero quieres tu respuesta, ¿no es así?. Bien. Estaba ebrio,tal vez llame a más chicas como tú. Dijiste que te engañe, Un hombre como yo, jamás podría amar a nadie.— dice.— No soy para ti, ni tu para mi. Te dejaste llevar por mis mentiras, caíste como niña inmadura en mi juego.— No podía creer lo que me estaba diciendo. — Y ahora, se termino. Entiéndelo.

No es el Harry que conozco,este no es él...— Dime que hice mal, por lo menos..— Hago un sollozo mientras quito las lagrimas de mis mejillas,que no dejan de salir.— Por favor...

— ¿Eres tonta?.— Pregunta mirándome sin ninguna expresión.

— ¿Estas con alguien más?.—pregunto ignorando lo que acaba de decir.— ¿Es eso?.

Él suelta una risa con despecho. — Ya no te amo.— Susurra.

Un vacío doloroso se apoderó de mi pecho, casi caigo en el piso pero me mantuve de pie. Él me mira directamente a los ojos, con aquella mirada vacía.

— Eso no es cierto.— dije negando con la cabeza.— ¡Eso no es cierto,tu me amas!.— Grite.— ¿Porque me haces esto?.

— Escúchame.— dice irritado.— No tengo tiempo para estupideces, Danna. No vuelvas aquí,no quiero volver a verte,  no me busques más.— dice en tono frio. Sentí algo romperse dentro de mi, cerro la puerta en mi propia cara.

Mis llantos inundan todo el edificio,mientras me echo a caminar abajo. — ¿Porque me haces esto?.— murmure,bajando las escaleras mientras sollozos salen de mis labios.

Al salir del edificio,la brisa golpeó mi cara. Mire a todos lados,no paraba de llorar,no podía sostenerme en mi pies. Me sentía tan patética, mis pies ya no pueden sostenerme más y caigo al suelo.

No podía creer lo que había escuchado.— Señorita.— escuchó la voz femenina de alguien, alce la mirada y vi una mujer de algunos cuarenta años.— ¿Esta bien?.— dice mirándome angustiada. — ¿Necesitas ayuda?.

Negué con la cabeza, me eche a caminar unas cuadras para tomar un taxi.

(***)

No hable de lo sucedido con Melissa, mientras mi mente viajaba a la noche anterior. Ella hablaba y hablaba,pero yo no le prestaba atención. Me sentía perdida, me había vuelto a quedar despierta, aquello no dejó que durmiera. Sentía como si me habían apuñalado en el corazón.

— Danna.— Vuelvo la mirada a ella,quien me observa preocupada.— ¿Estás bien?,no has tocado tú desayuno.

— Hunhm, si. Estoy bien, deberías apurarte.— digo metiendo un poco del huevo revuelto a mi boca.

— Si, bueno, un beso, nos vemos más tarde. Vámonos, Dahiana.— Dahiana sale corriendo por la cocina, toma la mano de Melissa quien la extendía dos segundos antes, ella me dio un abrazo leve y luego salió a carrera por la puerta.

Unos toques en la puerta,llamaron mi atención. Camino hasta allá de forma distraída, sin rodeos giro la perrilla.
Él estaba allí,con sus manos en su chaqueta mientras me miraba dócil y triste, algo dentro de mi se apretó impidiéndome respirar con naturalidad, pero mantuve la calma.
Me aparte de la puerta,caminando al sofá mientras jugueteo nerviosamente con mis manos, quería preguntar como sabía dónde vivía pero no tenía fuerzas para hacerme la orgullosa. Debería gritarle,pero ni siquiera tenía tiempo para eso.

Me giré en mis talones, tragué saliva. Él camino rápidamente a mi, envolviéndome en sus brazos,no luche,no lo aleje, sino que lo envolví en mis brazos,aprestándolo ligeramente mientras que mis lágrimas bajan por mis mejillas. — Lo siento.— escuché su voz vibrar en su pecho, vuelvo la mirada a su rostro, sus ojos estaban rojizos, y en ellos aquella mirada dulce y dócil que solía poner cuando estábamos juntos, volvió nuevamente.— Jamás quise decirte esas cosas.— dice envolviéndome en sus brazos mientras me da un beso en la frente. Él limpia mis mejillas, vuelvo a sentir esta sensación de alivio, al sentirlo cerca de nuevo.

— Yo...yo nunca quise decirte que te odiaba,yo no te odio y jamás lo haría y....— este hace que lo mire a los ojos y pega su frente con la mía. Siento como mi mundo se detiene,al volver a mirar esos ojos llenos de ternura.

— Perdóname.— dice cerrando los ojos.— Todo es,mi culpa.

— No quiero que me alejes de ti,no más.

— No pasara de nuevo. —dice sin dejar de verme.— Joder,estoy tan embobado.— suelta una risa pequeña.— No puedo estar sin ti, no quiero estar sin ti.— dice volviendo a abrazarme.

— No vuelvas a decirme todas esas cosas.— dije volviendo a llorar.

—Oh, cariño,no.— me aprieta en sus brazos .— Te amo.

Escucho su corazón latir, su aroma inunda mis fosas nasales, no quería soltar su abrazo. Él me abraza ligeramente mientras apoya su mentón sobre mi cabeza.— Te amo mucho, Danna.— Susurra.

(***)

Me quede abrazada a él, mientras estábamos en el sofá. El silencio inundaba toda la sala, mientras él y yo estábamos abrazados. Quería abrazarlo, sólo eso. No quería hablar ahora o molestarme más de lo que estoy. Limpie las lágrimas de mis ojos.

— No llores más.— escucho que susurra, levantó mi cabeza y lo veo a los ojos. — Perdóname,¿si?.

— Hace mucho que lo hice.
— digo, él me dio un beso calido en la frente.

— Te amo.— susurra, mis mejillas se calientan.

— Te amo.— respondo. Este se acomoda en el mueble para quedar sentado, y yo hago lo mismo. Sus manos tocan las mías y las entrelazamos. — Estás más pálido.

— ¿Si?.— Asentí.— Creo que solo tengo mi color normal, si estoy cerca de ti.— reí ligeramente,él me regalo una sonrisa mostrándome sus hoyuelos.— Sólo no quiero que te lastimen, desde que te ocurrió aquello. No he podido dejar de culparme.— dice decepcionado.— Entonces no se, creí que la mejor manera de mantenerte a salvo era manteniéndote lejos. Cuando recuerdo aquel secuestro o la herida en tu pierna , siento el mismo pánico que sentí cuando fui a buscarte. — dice apretando su mandibula.

— No tienes que protegerme,porque puedo sola. Además no siempre estarás conmigo y...

— Pero mientras esté a tu lado quiero hacerlo.— interrumpe mirándome fijamente.—Siento,que es la único que hago bien.— Susurra. Le doy un beso a sus manos,a lo que él me regala una sonrisa.