Adoro esta correa que me ata

872 102 10
                                    

Llorar es agotador. Sobre todo si es un llanto tan fuerte que hace temblar todo el cuerpo. Con lágrimas calientes, jadeos, y un fuerte dolor de cabeza. Del tipo que te deja entumecido y necesitado. Pero está bien. Es liberador. Y Jimin fue capaz de dormir tranquilamente entre los brazos de Yoongi cuando terminó de llorar. Yoongi tenía la cabeza de Jimin metida bajo la barbilla, su nariz enterrada en su pelo, y todavía seguía acariciando su espalda a pesar de que un ligero ronquido salía de su joven... ¿Amigo? ¿Todavía amigo? Algo más.

Olfateó a Jimin. Amaba el olor de Jimin. Era embriagador. En realidad Yoongi tenía un fantástico olfato. Incluso antes de ver a Jimin por la ventana una y otra vez durante semanas, pudo olerle. Era humano y particularmente delicioso. Dulce, pero no empalagoso. Cálido, pero no caliente. Tentador, y atrayente, y exactamente el tipo favorito de Yoongi en todas las formas posibles.

El Yoongi joven habría tomado a Jimin como su mascota, alimentándose de él y follándoselo hasta que se aburriera. Y un Yoongi aún más joven se habría alimentado de él para después convertirle en un compañero. Y un recién convertido Yoongi le habría dejado seco ahí mismo.

Pero ahora Yoongi era viejo.

–"No eres tan viejo. – Jin protestaría. –Todavía eres un bebé." – Pero él se sentía viejo. O más mayor. Un poco más sabio. Y Yoongi estaba feliz con tan solo olerle. Inhaló con fuerza y suspiró, cerrando los ojos. Su estómago rugió, y el interior de su boca empezó a picar. Eso era malo.

–Tu masoquismo es fascinante. – Dijo Hobi desde la puerta, apoyándose en el marco.

– ¿Por qué todo el puto mundo en esta casa acecha desde las puertas? ¿Podemos ser un poco más típicos? – Yoongi gruñó sin moverse ni un centímetro. Jimin se quejó suavemente en sueños, y Yoongi le acercó más.

–Buen cambio de tema. – Hoseok se miró las uñas. – ¿Cuál es tu plan, Yoongi? ¿Vas a convertirle? Ya sabes que me encanta que haya más vampiros en el mundo, pero a juzgar como salió tú último intento no creo—

–No tengo un plan. – Le interrumpió.

–Eso es obvio. – Hoseok se rio. Namjoon apareció en la puerta.

– ¿Sigue aquí? – Namjoon tenía la boca abierta. – ¿Por qué sigue aquí? –

Jin les empujó dentro. –Moveros. – Entonces se sentó a los pies de la cama y miró seriamente a Yoongi.

–No va a funcionar. – Jin le dijo suavemente. –Vivimos en dos mundos diferentes. ¿Cuánto tiempo puede durar esto? Quiero decir. Literalmente. Es cuestión de tiempo. –

– ¿Quieres estar con él como un humano? – Hoseok dejó escapar una pequeña y jadeante risa sarcástica.

–Hobi... – La voz de Yoongi era de disculpa.

–Wow. – Se tapó la cara y negó con la cabeza. –Wow. –

La atmósfera se tensó, pero Hoseok solo sonrió y pasó de ello.

–Echo de menos al viejo Yoongi. – Hoseok rio e hizo un puchero. Estiró los brazos hacia arriba y sonrió enseñando todos los dientes.

–Tengo hambre, voy a tomar un poco el aire y a conseguir algo para comer. – Todavía sonreía, pero sus ojos estaban brillantes. –Buena suerte, Yoongi-hyung. –

Cuando Hoseok se fue, Namjoon suspiró.

– ¿Has pensado si quiera en lo que estás haciendo? – Su voz sonaba irritada y miró a Yoongi. –Esto es una puta mierda, tío. –

–Namjoon. – Jin le llamó, intentando calmarle.

–En serio, eres mayor que yo, pero te comportas como un niño pequeño. –

~BLOOD WORK~ (YoonMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora