Capítulo 28

152 23 9
                                    

NARRA HETFIELD

Mi cabeza daba vueltas, tenía el estómago revuelto y una sensación de preocupación terrible. Corrí lo más rápido que pude al auto, entré e intenté encenderlo; me temblaban las manos y sudaba frío.

–¿Qué me está pasando? –dije para mí mismo.

Sentía cómo mi cuerpo dejaba de responder lentamente y al mismo tiempo, como en una película de terror, imágenes desagradables cruzaban mi cabeza como pequeños y rápidos flashbacks.

–¿Qué mierda... ? –puse mis manos en frente mío y noté cómo éstas temblaban incontrolablemente–. Esto no está bien –dije mientras abría la puerta de mi auto e intentaba bajar de él con la intención de pedir ayuda.

Apenas puse un pie en el piso, sentí mi conciencia desvanecerse como un apagón de luz.

–––––––––––————————

–"...sigue dormido..." –escuchaba una voz a lo lejos, como en un sueño.

Lentamente mi cuerpo y mi mente intentaban recobrar fuerzas para despertar, mientras la intriga por saber qué pasaba me apresuraba a hacerlo.

–Despertó –declaró la mujer que se encontraba parada al lado mío.

–¿Dónde estoy? –me senté precipitadamente.

– ¿Mi uniforme no te dice nada? –respondió la enfermera en tono de burla.

–¿Y por qué? ¿Qué pasó? -cuestioné aún aturdido.

–Tuviste un colapso nervioso –respondió indiferente, mirando las hojas que traía en la mano.

-¿Desde cuándo estoy aquí? -pregunté mirando mi muñeca izquierda que se encontraba perforada con una jeringa conectada a una bolsa con líquido.

-Desde hace apenas unas horas -contestó aún más seca que antes.

-¿Quién me trajo? -la interrogué, buscando su gris mirada.

-¿Por qué yo tendría que saber eso? -se burló, aún mirando el montón de hojas en sus manos.

–¿Me puedo largar ya? –pregunté harto.

–Tranquilo, amigo mío –arqueó las cejas–. En cuanto tengamos tu alta, te puedes largar. Hay cosas más importantes que un amargado con estrés –añadió mirándome por fin a los ojos y se fue.

Miré a mi alrededor intentando encontrar algo de utilidad para aunque sea, poder distraerme. Tenía asco, hambre, miedo, sentía un hueco en el estómago... Era como sí hubieran juntado todas las sensaciones desagradables existentes y las hubieran metido a la fuerza dentro de mi cuerpo.

Traté de tranquilizarme y no tuve más opción que mirar el blanco techo encima mío pero a medida que pasaba el tiempo, se agotaba mi paciencia; de pronto recordé lo que había pasado antes de estar aquí y la incertidumbre picaba en mi cerebro como una garrapata. Además, Nick debía estar esperándome...

–¡Nick! –reaccioné y me senté desesperado intentando quitar la aguja conectada a una de mis venas–, Nick debe estar esperándome.


Dicen que es mejor tarde que nunca, aunque nunca creí que tarde fuera más de dos años sin terminar esto jaja.
En fin, quiero agradecer a las personitas que me dieron un poquito de su valioso tiempo leyendo esto y también, disculparme con quienes esperaron a que actualizara y jamás lo hice. En verdad lo siento :(
Los quiero, gracias por leer 💖

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 18, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Killing Is My Business...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora