Mejores amigos.

Sollozos

—¿Cómo diablos estás aquí tanto tiempo? —Yuu miró al dueño de la voz ignorando a los chicos que estaban ahora mirándolo también. Habían olvidado lo que en conjunto veían.

—Vengo a salvar tus días, además tengo el pasé que Yutaka me consiguió para el club de... —sonrió y paso una mano por su propio cabello, se había despeinado para poder llegar rapidamente al instituto del pelinegro —ahora, ven conmigo

—No iré contigo, Suzuki —ambos chicos se miraron de pies a cabeza —no puedes venir por mí así como si nada, además el receso está por terminar y debo estar puntual en cada una de mis clases...

Suzuki suspiro pesadamente y caminó hacia el pelinegro. Lo miro fijamente, casi desafiandolo y poco le importo lo que dijo. Tomó al pelinegro del brazo y lo halo fuera del salón de clases.

Escuchó voces de protesta y no hizo caso, tenía que hablar con él lo más pronto posible, tenía que poner al tanto de la situación que había explotado. Y que quizá poco faltaba en el instituto de los chicos para que se expandiera.

Todo por su mejor amiga y por Kouyou.

***

Entraron al mismo salón en el que habían detenido a Takanori una primera vez, y al igual que ese día estaba Takanori en una banca sentado. Cuando los chicos entraron sonrió ligeramente, enseguida miró hacia otro lado.

—¿Qué pasa? ¿Qué hace aquí? —Yuu se sentía confundido —¿Y Yutaka? Akira, necesito una explicación

—Y la hay, primero... toma asiento —Akira abrió una mochila negra y sacó de ahí una laptop, encendió esta, tecleó rápidamente la contraseña y la puso en uno de las mesillas del salón —mira esto...

Yuu dudó un poco y miró fijamente al rubio teñido y a Takanori que no dejaba de mirar hacia otro lado.

Trato de negarse pero cuando reaccionó sus pies le llevaban hacia la silla frente a la computadora, se sentó y frente a él estaba el reproductor de vídeo totalmente negro, con el símbolo de play en el centro.

Akira conectó un par de audífonos y se los tendió al pelinegro. Este los tomó y colocó en sus oídos, el sonido se bloqueó un poco.

—Adelante, tengo que ir a ver cómo sigue Yutaka —Akira le regaló una diminuta sonrisa y salió del aula.

Yuu miró como la puerta se cerró detrás de él. Miró a Takanori y este le sonrió.

—¿Quieres ver conmigo? —preguntó y el menor negó.

—Yo ya lo ví... pero... —Takanori se puso de pie y con paso lento se acercó a Yuu sentándose a su lado.

Ambos chicos sonrieron. Yuu comenzó a reproducir el video.

La toma era simple, desde un ángulo simple pero mostrando ampliamente lo que deseaba. Se enfocaba una cama, la ropa de la misma era simple, lógicamente la de un chico. Las paredes estaban pintadas de un amarillo pálido, había ropas tiradas por el piso e incluso un dibujo al fondo pegado en la pared.

Pasó cerca de un minuto cuando dos personas aparecieron frente a la cámara. Un chico corpulento, claramente practicaba un deporte; la cara del chico estaba pixelada. Yuu fijo su atención en la chica; era delgada y de un cuerpo perfecto, la cabellera castaña le vino a su mente en muchos recuerdos.

Primero ambas personas se besaban, después la ropa de ambos fue cayendo. El chico terminó en boxers y la chica ahora solo tenía las bragas.

El vídeo continuó mostrando como ambos mantenían relaciones sexuales.