Christian.
Al mediodía almorcé con varios ejecutivos en una de los salones de mi empresa. Discutimos ciertos aspectos importantes sobre la extensión de mi corporación a nivel internacional e intercambiamos tarifas y costos. En plena reunión sonó mi celular. No hubiese contestado de no ver de quién se trataba
-Grey.
-Señor –dijo Taylor al otro lado de la línea– Tengo su encargo.
-Excelente –le respondí- Pasa por mí en una hora.
-De acuerdo señor –volteé y mi secretaria entró a la sala de reuniones para entregarme un portafolio para continuar con la discusión.
Muchos de los presentes son empresarios y abogados que están dispuestos a formalizar y concretar todo para el próximo proyecto.
-Continúen –comenté hacia los presentes.
-Como verán tenemos todo previamente calculado –dijo uno de mis abogados– El proyecto solo necesita de ciertas firmas para comenzar.
-Señores –dije ante todos– ¿Hay alguna fecha estipulada? –todos fijando su atención en mi.
-Creemos necesario comenzar cuanto antes –expuso uno de mis socios.
-En eso concuerdo –agregué sin más.
-Para inicio del año que viene, Grey Holdings Inc. se trasladará a las oficinas principales de Madrid, Múnich, Londres, Beijing y París. –Concretó uno de los asistentes señalando unas graficas frente a la pantalla gigante.
-Excelente. Quiero el gráfico de las estadísticas y un informe detallado para el lunes a primera hora en mi correo. –sentencié levantándome de mi asiento al frente de la mesa de reuniones.
-Así será, señor –respondió mi segundo asistente.
-Daremos por terminada la reunión, señores –me despedí con un asentimiento de cabeza y me retiré de la habitación. Mi secretaria me entregó un café y seguí mi camino a mi oficina. Al llegar, coloqué el portafolio y los informes sobre mi escritorio. Apagué mi portátil y llamé a Taylor.
-¿Listo?
-Lo espero abajo, señor.
-Voy en camino. –colgué la llamada y revisé la hora. Son cerca de las 2 de la tarde. Me despedí de mi secretaria hasta el lunes y bajé por el ascensor hacia el vestíbulo principal y luego afuera a la calle. Taylor me esperaba frente a la puerta trasera del SUV que mantuvo abierta para mí, subí al vehículo y partimos sin más.
Andrea.
Llevaba trabajando cuatro horas seguidas en el mural. No me quejo, pintar siempre me ha relajado y es lo que amo hacer. Hasta ahora solo tengo el paisaje hecho a mano alzada, con bosquejos de como lucirá una vez aplicada la pintura al óleo. La señora Grace está contenta con el bosquejo. Dice que se ve de maravilla lo cual me inspira a continuar elaborando trazos a mano alzada. Al ser un paisaje tan real, debo tener cuidado con los detalles y trabajar el realismo como si fuese mi mejor amiga. Hablando de mejor amiga, eso me recuerda que debo enviarle un mensaje a Ari para avisarle que sí asistiré tanto a la obra como a la fiesta. Eso le encantará. Me encontraba sumida en mis pensamientos. Esto es lo que me pasa cuando pinto.
-¿Flor de lis? –pregunto una voz detrás de mí, ese tono de voz grave que reconocí al instante. Al voltearme pude verlo con atención. Christian. Luciendo un impecable traje negro, su camisa de lino blanca se encuentra sin corbata y desabrochada de los primeros dos botones. Que vista tan increíble. –Interesante elección, señorita Cooper.
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Cincuenta Sombras Renovadas
RomantikChristian Grey ha dejado su pasado atrás. Ha cambiado el rumbo de su vida desde que su relación con Anastasia Steele llegara a su fin. Devastado, Christian se ha dedicado a su trabajo, su familia y sus dos hijos de una relación fallida... Pero todo...