• Capítulo XII •

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[Escuchen la canción luego (o antes o mientras) lean, asi se ambientan 😮]

El teléfono seguía sonando por cuarta vez, mientras YoonGi comía tranquilo, sin preocuparse siquiera de ver quien era.

— Está colmándome la poca paciencia que me queda, deberías atender— dijo ella, apretándose el puente de la nariz al ya saberse casi de memoria el tono de llamada,  un rap que al parecer era suyo, ya que lo cantaba con soltura y la voz era similar.

El paró su rap y la miró arqueando una ceja, tomando el teléfono y finalmente atendiéndolo. Del otro lado una voz bastante preocupada chillaba y lo regañaba, a lo que YoonGi fingía no importarle, pero realmente estaba bastante avergonzado. Por eso ni siquiera quería responder.

Ella comenzó a caminar al balcón para darle su espacio, pero el rápidamente le tomó la muñeca y la atrajo a el, negando y pidiendo con los ojos que se quedara. ¿Que clase de cosa extraña era este chico? Impredecible, extraño y... quebrado.

— Hyung, ya. Lo siento, ¿si? Sabe que ya no hago eso, no luego de lo qué pasó la última vez— soltó un bufido al igual que la voz al otro lado, la cual finalmente pudo deducir que era Jin. Éste habló unos segundos más y cortó el teléfono, haciendo que el peliazul lo guarde al suyo.

— Nunca estuve aquí, Frey. Lo único que pido es que no le digas a nadie que estuve contigo.— pidió mirándola a los ojos con la misma mirada sentida de siempre. El claramente tenía la necesidad de contarle todo, pero simplemente no podía hacerle frente a eso.

La chica frunció el ceño, tragando saliva. ¿En qué estaba metido?
— YoonGi, si esperas confidencialidad, debes decirme qué está pasando— dijo mirándolo bastante acusadora.

— Eres insoportable— dijo el rodando los ojos, tomando una porción y caminando al sofá. — Anoche no me fui con los chicos. Yo... volví a casa y de repente tuve que volver a salir. No sé como explicarlo, pero... no estoy sintiéndome de lo mejor últimamente, solo...— se quedó callado. Miró la hora y comió rápidamente la porción, encendiendo un cigarrillo y poniendose su chaqueta.
— Debo irme, Haneul seguro está esperándome— dijo suspirando.

No tenía sentido buscar respuestas con YoonGi, para Frey el era una incógnita caminante. ¿Porque vino a su apartamento? ¿Porqué seguía con esa chica? ¿Porque debía mentirle a todos los chicos acerca de donde estaba?

— Te odio Min YoonGi— susurró abriendo la puerta, viendo una pequeña sonrisa ladeada en el rostro del chico.
— Lo se, yo también me odio a veces— dijo entrando al elevador y esperando que ella hiciera lo mismo.

[...]

Había pasado varias horas y ella estaba en el sofá, mirando hacia la tv pero sin prestar atención a lo que estaba pasando.

Su mente estaba por todos lados, pensando a qué se refería YoonGi con cada palabra que había dicho ese mediodía. Y de nuevo, no tenía su maldito número para siquiera preguntarle cómo estaba. De pronto el sueño le ganó, al sentir que no tenía sentido nada de lo que pasaba, y se acostó en su cama, con el aroma de cigarrillos y perfume de hombre que había dejado él en las sábanas.

Pasó una semana y media desde ese encuentro con el chico, y Frey no se había animado a volver al bosque. Sabía que lo iba a encontrar ahi, y cada día que pasaba solo ahondaba las sensaciones de confusión y... quizás cariño, y ella no estaba lista para eso.

Se levantó ese día como todos los otros, desayunando y bajando a la calle para comenzar la caminata a la universidad. Se puso los auriculares, escuchando "Skinny love" de Birdie, y se paró en la esquina esperando a cruzar la calle.

Al levantar la mirada, sintió como si la ahorcaran, faltándole el aire.
Ahi estaba, el chico que se había perdido todo este tiempo. Vestía un jean roto, borcegos negros, un poleron rayado blanco y negro y una chaqueta de cuero. Incluso parecía que su cabello era más azul que antes.
Estaba fumando y gracias a quien sabe que, no la había notado.

El verde para los peatones se había encendido y ella comenzó a caminar bajando la cabeza, hasta que sintió que le tironearon sus auriculares, y al verlo, notó una sonrisa burlona. Al parecer si la había visto, pero al parpadear, se había vuelto a perder en la gente.

El sonido de un claxon la sacó de sus pensamientos y siguió caminando a la universidad, con el corazón en la boca y sintiendo un manojo de emociones que no sabía controlar. Sentía haber visto un fantasma, con escalofríos en su espalda y todo incluido.

Al llegar a clases, suspiró y miró a Jessa, quien la miraba extrañada.
— ¿Tengo algo en la cara?— Preguntó un poco hastiada.

Ella negó e infló las mejillas, ladeando la cabeza.
— Te ves triste— dijo suspirando y tocando su mejilla tratando de hacerla sonreír.

Frey no sabía si contarle o no, y para cuando se llenó de valentía, sintió cómo las lágrimas comenzaban a caer por sus mejillas.
— C-Creo... que estoy enamorada— dijo limpiándoselas.

~•~
HOLAAAAA! Espero que les vaya gustando. Capitulo medio sad pero salió asi...

Lxs amo!

— Harleen ♥️

Y O U T H .- || M.Y.GDonde viven las historias. Descúbrelo ahora