Capítulo 24: Gemidos embotellados

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Mini maratón extra.

Bebés, ustedes son unxs pervertidxs, uno tan santo y ustedes tan calientes 😂🤞así no se puede 😂😂

Poché sonrió, y empujó con cuidado a la chica una vez más a la cama –Todavía no terminó – sonrió de lado.

Prosiguió donde se había quedado, bajando hasta el centro de la chica, depositando besos encima de los pantalones cortos. Uso sus dedos para tomar los estremos de estos, bajandolo mientras iba dejando besos en la pies que se exponía. Se detuvo una vez la feminidad de la chica vino a su campo de vista.

Su detenimiento causo que la peli-gris se pusiera nerviosa, consiente de cómo se encontraba – N-No m-me mi-mires así – Está tartamudeo, sintiendo su feminidad pulsar, causando que su cuerpo se estremeciera, y un calentamiento la invadiera.

– Es imposible no hacerlo – Poché balbuceo, sintiendo como su boca se hacía agua, trago hondo, audible para la peli-gris, antes de inclinarse un poco soplando a la chica.

Está se estremeció más al sentir el cálido aire directo en ella, arqueando su espalda un poco, antes de respirar pesadamente, sintiendo como se mojaba más.

– Poché, en serio no juegues así – Calle Gruño, no aguantando más el juego agonizante de la chica.

La mencionada solo sonrió, y asintió, bajando y quitando la última pieza de ropa. Besando los pies de la chica, suebiendo por las piernas y deteniéndose en el muslo de la chica, dejando entre besos y mordidas, chupetones en estos.

– Hueles tan rico – La chica balbuceo una vez más, dando un último vistazo a la entrepierna, y subir.

Capturó los besas de la peli-gris colocando una pierna en la entrepierna de la chica, y presionando, cuadrando que dejara escapar un gemido alto, al no esperar ese repentino movimiento.

– Shh, Sebas y Laura pueden escuchar – Poché le susurró al oído mientras, movía su pierna, y la volvía a presionar en estas.

Calle asintió, mordiendo su labio inferior, al intentar retener aquel sonido placentero en su interior.

– Así no amor – Poché comentó – yo soy la única que puede morderte los labios – finalizó con picardía, tomando los labios de Calle en los suyos, besandola una vez más, antes de morder el labio inferior, causando un gemido ahogado en la chica, jalandolo con ella un poco, para luego soltarlo.

Llevo su mano al seno izquierdo de la chica, comenzando un masaje lento y determinado, rozando el pezón con la yema de su dedo pulgar, antes de pincharlo.

– ~Ahh ~Poché – Está gimió, un poco alto, no aguantandose las ganas.

– ¿Que te dije? – Poché comentó con un tono ronco, bajando hacia el otro pezón. «¡Joder! Se escucha tan sexy»

Sacó su lengua, pasándola alrededor de este, para luego introducirlo en su boca, chupando y moriendolo mientras el masaje del otro aún no paraba.

– ~Mierda, ~joder.... ~Po... –  los gemidos de Calle, eran cada vez más difíciles de aguantar, a lo que a Poché ya no le importaba si escuchaban o no.

– Te escuchas tan jodidamente caliente – Poché gruño, atrapando los labios de la chica, con más pasión que al principio.

Su mano dejó el trabajo que tenía, bajando y recorriendo el abdomen de la chica, quien había empezado a temblar de anticipación. Llegando a la entre pierna de esta, Poché decidió jugar un poco con la chica, pasando sus dedos por la partidura de esta, sintiendo lo mojada que estaba.

– Con solo unos besos – Poché comentó en un solo, levantando su mano hacia la chica, y dejando ver el líquido en estos, separando los, dejaron unas finas líneas entremedio las cuales se rompieron al instante.

Seguido de esto llevo sus dedos a sus labios, dejando recorrer su lengua en estos, mientras su mirada no se apartaba de los ojos de Calle.

– Que vergüenza – Calle musitó tímida, tapándose la boca.

– Wow, no me esperaba que supieras tan delicioso – Poché comentó desviando la mirada hacia abajo, pasando una vez más sus dedos.

Esta vez presionó, deslizando un dedo dentro de la chica, sintiendo como éste se envolvía de calor y se lubricantes solo, entrando con facilidad.

Calle sintió el movimiento dentro de ella, aguantando los gemidos que querían salir, su intento fue en vano cuando sintió el segundo entrar en ella, dejando que su respiración se pusiera más agitada, y agarrará las sábanas con fuerzas.

– Estás tan caliente allí abajo, que siento que me voy a derretir en ti – Poché comentó besando los labios de la chica, dejando que está hiciera en el  beso.

Poché aumento la velocidad, de sus dedos, junto con la profundidad, encontrando el punto g de la chica. Quien sólo pudo soportar de cuatro a cinco golpes más en este, antes de arquear la espalda hacia atrás, dejando salir un fuerte gemido, al llegar a su límite.

Luego de unos segundos está se desplomó en la cama nuevamente, intentando de tranquilizar su respiración, y sintiendo las gotas de sudor recorrer su cuerpo. Poché negó con la cabeza dejándole saber que aún no terminaba, mientras bajaba besando el torso de la chica, hasta llegar a la entrepierna de la chica, dejando su lengua limpiar cualquier resto que había de lo sucedido. Aproposito presionando su lengua en la apertura, viendo como está temblaba.

– ¿Aún no estás satisfecha? –  la peli-rosado preguntó mirando a la chica a los ojos, quien desvío la vista hacia el lado, mordiendo el labio inferior una vez más.

«No» pensó pero lo que salió de su boca fue lo contrario – Si – a lo apenada que se sentía

Poché la miró unos minutos, pensativa – Mira me a los ojos y contestame – está comentó con una tono autoritario.

Calle respiro hondo, su rostro color carmesí, mientras desviaba la vista una vez más hacia la chica, abrió la boca y la volvió a cerrar.

– Dime que no quieres esto – Poché comentó, y acto seguido paso su lengua, introducciendola en la chica antes de retirarse – Dime que me detenga –

Calle cerro los ojos y negó con la cabeza – ¡No joder! ¡No quiero que te detengas! – Está grito frustrada.

Poché sonrió victoriosa, y prosiguió con su trabajó, introducciendo su lengua, causando gemidos y gruñidos de la chica, dejándola llegar a su punto de éxtasis.

Holis Bebés.

Se que les llegó una notificación de que había subido este capítulo, pero eso fue un error, una de mis amigas me envió un mensaje y al estar tan distraída meti el dedo donde no era y la publique sin querer a mitad de procesó.

Pero nada, ya está aquí y completo, esperó que sea lo que tanto hayan esperado, y que les guste. Hace tiempo no escribo +18, lo cual puede que esté un poquito mal, pero bueno. Nada, que lo disfruten.

El destino de Cupido - Segundo Libro - [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora