Los Hermanos Queen

34. Bienvenido principe Zack

Al día siguiente me desperté por que el bebé no paraba de moverse y de repente la sentí la primera maldita contracción grite logrando despertar a Jared.

Jared- ¿qué pasa amor?-

Aisha- e...el bebé ya viene- se levantó corrió al armario y sacó mi maleta después me cargó en sus brazos derribo la puerta de una patada y corrimos encontradonos con mis padres.

Charlotte- ¡voy a ser abuela!-

Gregor- amor celebras en otro momento hay que llevarla al hospital-

Charlotte- o si, si lo siento me emocione demasiado-

Mis padres corrieron a traer la camioneta, salimos del castillo mis padres ya nos esperaban con la camioneta lista.

Jared me sentó en los asientos de atrás y él se sentó a mi lado yo iba agarrando su mano y la apretaba con cada contracción que eran cada vez más fuertes.

Jared- amor me vas a romper la mano-

Aisha- perdón- llegamos al hospital y de inmediato me llevaron a la sala de partos.

Jared fue a otro cuarto a ponerse una bata un gorro extraño y un cubre bocas, las contracciones cada vez eran más fuertes y yo gritaba de dolor.

- muy bien veamos cómo viene el bebé- comenzó a hacer la prueba del taco Jared gruñía bajo pues el doctor era humano yo no podía ni hablar por el dolor que sentía es peor que la primera transformación.

Jared- bueno ya estuvo bien ¿no?-

- por favor señor White cálmese, el bebé afortunadamente viene en la posición correcta y estamos listos para comenzar- Jared me tomó de la mano - a la cuenta de 3 señorita Queen quiero que puje 1...2...3-

Comencé a pujar con todas mis fuerzas y así por no sé cuánto tiempo hasta que escuché el primer llanto de mi príncipe.

-felicidades es un niño bastante sano- me lo pasó para que pudiera verlo después se lo llevaron para limpiarlo, medirlo y pesarlo.

Me trasladaron a una habitación privada en el piso de arriba, Jared ya tenía su ropa normal estábamos esperando a que nos trajeran a nuestro pequeño

Zack White Queen al fin nos lo trajeron ya limpio, vestido y envuelto en una cobija color beige la enfermera salió no sin antes dirigirle una mirada descarada a Jared, pero no le bastó con eso si no que se quedó observándolo desde la puerta.

Aisha- puedo acabar de dar a luz pero aún te puedo sacar la columna vertebral- me levantó entregándole el bebé a Jared quien solo suspira sabiendo lo que va a pasar.

En menos de un parpadeo ya estoy frente a la enfermera la agarro del cuello enterrando mis garras en este cierro la puerta con seguro.

Y sin pensarlo mucho le dejo el control a Marina nuestros ojos se vuelven rojos y la enfermera grita pero nadie la va a escuchar.

Marina- aprenderás a no mirar lo que es mío- Marina rasguña su rostro y después rompe su cuello.

Jared- ¿qué haremos con el cuerpo ahora Marina?-

Marina- me lo llevaré y lo esconderé en el bosque, ¿Zack sigue dormido?-

Jared- si tranquila yo lo cuido mientras tú vas- asentí, salí por la ventana con el cuerpo en el hombro me transformé en loba y con mis colmillos tomé el cuello de la enfermera salte.

Aterrice y corrí por suerte el hospital está cerca del bosque corrí a mi máxima velocidad y llegando al centro del bosque comencé a cavar un hoyo un poco más profundo que 3 metros.