16. De cacería

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A la mañana siguiente desperté y descubrí que mis heridas ya habían sanado, ese imbecil de Franco me las pagara.

Pero primero lo primero tengo que encontrar a esos rougues así que me voy de cacería, me levanté revise mi celular aún era temprano, eran las 5:40 am.

Me bañe rápidamente y al salir del baño fui directamente a mi armario, me puse un pantalón negro, una playera igualmente negra en fin me vestí completamente de negro.

Fui a donde tengo guardado todo mi arsenal, tomé a las consentidas que estaban cargadas y listas, granadas con plata líquida, navajas y más pistolas cargadas.

Lo puse todo en una bolsa de lona negra, me la colgué al hombro y caminé hasta salir de mi habitación.

Camine sigilosamente por que sé que James tiene el mejor sentido del oído que cualquier otro vampiro, pero al final me descubrió.

James- ¿a donde vas tan temprano?- dijo desde la puerta de su habitación.

Aisha- iré a la ciudad humana, si me tardo en llegar es por que estoy con Dimitri- tenia que mentir, por que en realidad tengo la necesidad de matar a esos rougues que quedaron vivos.

James- ¿que llevas en esa bolsa?-

Aisha- ropa, estoy pensando en mudarme con Dimitri ya que él es mi novio y mi aliado así que necesita protección-

James- hagamos como que te creo-

Aisha- James simplemente vuelve a tu habitación, yo estaré bien- asintió y se metió a su habitación, yo corrí y salí por la puerta trasera.

Me adentré en el bosque después que pasar por el jardín, oculte mi olor, olfateé el aire en busca del olor de esos lobos y unas pocas horas después di con su olor.

Que me llevó al corazón del bosque, ahí había toda una manada de rougues, había niños, adolescentes, hombres y mujeres al igual que algunos ancianos.

A lo lejos pude ver una gran casa y la única así que esa debe ser la casa de la manada, vi a los 2 lobos que me huyeron ayer transformarse en humanos y correr hacia dos chicas.

Una con un pequeño niño de no más de 2 años y la otra con una bebe en brazos, sonreí, preparé la primera arma y dispare a la cabeza de niño dando en el blanco.

- ¡cazadores!- rugió uno de los chicos, la chica junto a él se arrodilló junto al cadaver de su hijo.

Me moví de posición y seguí disparando hasta acabar con los dos lobos cobardes, muchos se transformaron en lobos, quite el seguro de dos granadas y las lancé, poco a poco fueron cayendo muertos.

Sin poder huir ya que el espacio era muy reducido y no podían huir ya que me movía muy rápido, desde los niños hasta los ancianos todos murieron.

Yo simplemente no podía parar de asesinar, se sentía tan bien que no podía y no quería detenerme, un lobo, de pelaje blanco y ojos rojos más alto que los demás incluso más alto que el Beta de ayer se paró frente a mi, ya solo quedaba el Alfa ósea este lobito.

Aisha- miren que tenemos aquí, un Alfa que se esconde hasta que ya toda su manada fue masacrada- reí el lobo me gruño yo prepare a las consentidas y le apunté, dejé de ocultar mi olor de loba.

- ¿por que?- él se transformó en humano y la verdad es guapo, lastima que no puedo dejar cabos sueltos y por suerte nadie pudo ver quien los atacaba.

Aisha- tendrás que ser más específico con tu pregunta Alfa mediocre-

- ¿por que asesinaste a todos en mi manada-

Los Hermanos Queen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora