Adoptada por los Marshall.

Capitulo 39: Fiesta en la casa Marshall.

Capítulo 39: Fiesta en la casa Marshall. Parte 1.

Una semana se pasa demasiado rápido. Y más con la noticia que los Marshall se van de la ciudad en la universidad se expande como gripe, algunos están tristes otro no. Y a otros les importa una mierda.

Yo solamente estoy un poco desanimada ya que estaré lejos de Clara y Kenny.

— ¿Lo anunciamos ya? —preguntó Brayden.

Solo los Marshall estábamos en una mesa, no había amigos, no había chicas, no había aduladores. Solo ellos y yo.

— Podríamos esperar hasta el último día —opinó Marcus.

— No, debe ser ahora o nunca —ese fue Brayden.

— ¿Quien lo hace? —preguntó Nolan.

— Yo.

Note como todos me miraron, solté la mano de Travis y me puse de pie.

— ¡Oigan todos! —llame la atención de la cafetería. — Soy Annabelle Marshall y como la mayoría de ustedes saben, pronto mi familia y yo nos tendremos que mudar —escuche muchos quejidos de tristeza.— pero no sin antes dar una despedida como debe ser ¡ESTÁN INVITADOS A LA FIESTA EN LA CASA MARSHALL EL VIERNES POR LA NOCHE!

Muchos comenzaron a gritar.

Bese a Travis rápidamente y me senté.

— ¿Como lo hice? —les pregunte a todos.

— Inclusive admitiré que me ganaste —río Henry.

(...)

Cuando estaba en el orfanato siempre pensé que hacer maletas e irme de un lugar sería lo mejor y más feliz que me pasaría, pero ahora hacer maletas he irme de aquí me pone nostálgica, triste y con un pequeño nudo en la garganta.

— ¿Tu ropa y esta lista? Recuerda cariño que solo debe quédate ropa para estos días y tus cosas deben de estar en el camión de mudanza antes de la tarde —anuncio mamá, la mire con un Hoberol puesto mientras acarrea a los cargadores de un lado a otro.

Observe el cuadro que tenía alado de mi cama, La primer foto que me tome con mis hermanos, elegantes, sonriendo y lista para conocer a la que seria mi familia. Tomó ese cuadro entre mis manos y sin querer acarició ese cristal.

¿Quien se imaginaria que esa rubia y ese hombre elegante llegarían a ser mis padres? ¿O ese chico rubio, estirado y narcisista llegaría a ser un gran hermano? ¿El chico serio, apartado, rudo y estudioso llegaría a ser mi novio?

Jamás planeamos nada en la vida, y creo que así, sin planear salen cosas maravillosas.

Como conocer a los Marshall, como saber que Ken está más cerca de mi de lo que parece, como que mi pequeña hermanita es feliz con su familia adoptiva, como que la señora que me ayudó en un principio sería mí abuela.

El destino prepara muchas cosas para nosotros desde nuestro inicio en la tierra, y no sabemos qué una acción puede llevarnos a lo más triste, como perder a tus padres, terminar en un orfanato, o lo más feliz, terminar siendo adoptada por las personas más maravillosas del mundo. Me encanta mi vida, mi familia y las personas a mi alrededor.

Así que sin más, me levanto de mi cama, con la foto en mi mano y camino hacia una caja para meterlo.

— ¿Estas bien, nena? —pregunta Travis desde el marco de la puerta.

— Un poco sentimental —confieso.

— Lo estamos todos —entra.— pero es para nuestro bien, al menos no nos iremos a la casa de la abuela y viviremos en su sótano por un año.

— ¿Leíste Flores en el Ático? —pregunte riendo.

— Si, ¿también tu?

— No, solo vi la película —reí, el se acercó y me tomó por la cintura.— podemos verlo juntos un día.

— ¿Ver la película? —levantó las cejas.

— Joven Marshall, que insinúa —me acerque más a él.— ven aquí, guapo.

Me levante un poco de puntillas para acercarme a su boca y besarlo, el no pudo resistencia alguna.

Siguió con el beso, tierno hasta convertirse en uno lleno de deseo. Poco a poco fuimos caminando a mi cama, sin ver nos dejamos caer.

— Estamos —besó.— en —besó.— casa.

— No —besó.— me.— besó.— importa.

— Nos verán —eso lo hizo traer en razón. Acomodó su camisa y se sentó en la cama.

— Lo siento, nena —acomodo algo en su pantalón.

Oh...

— ¿Estas exitado? —pregunte riendo.

— Detente, Ann.

— Solo hice una pregunta —solté una risa.

— Annabelle —advirtió.

— Amor, solo-

— Me iré a dar un baño de agua fría, espero y el karma te llegue pronto —me dio un beso rápido. — y oye amor, no eres triste porque sé que volveremos a esta casa.

— ¿Estas seguro? —pregunte ilusionada.

— Muy seguro —salió por la puerta.

Me deje caer en la cama y suspiré sonriendo.

Yo también lo espero.

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¿Alguien es la única que no quiere terminar esta novela?

¿Segunda temporada?

Si llega a tener segunda temporada ¿cómo creen que se llame?