Samuel:
Después de aquella platica con mis padres me dispuse a seguir buscando mis papeles entre las cajas que papá guardaba y en algunas de ellas encontré pequeñas fotografías Polaroid, de esas que salen en las cámaras instantáneas; algunas de ellas contenían imágenes de sitios o de personas y las que más me sacaban risas eran aquellas en donde se veía mi papá conmigo en brazos y una en particular llamó mi atención: era una fotografía de una prueba de embarazo y a su lado, había una de dos chicos besándose. Yo no sabía de quiénes eran y preferí dejarlas allí, y seguir con mi búsqueda con mis cosas.
Al día siguiente Emma me había mandando un mensaje avisándome que al parecer habría un nuevo profesor de historia, que el viejo profesor William se había retirado para tomarse un descanso definitivo y en su lugar vendría un maestro joven y con poco tiempo de haberse graduado. Eso de tener a los padres de tu mejor amiga como maestros de la escuela a veces era una buena técnica para enterarse de todo lo relacionado con los profesores.
— ¿Llevas los papeles?
— Sí
— ¿Almuerzo?
— Sí
— ¿Tareas?
— Sí
— Excelente, estamos listos para irnos-. Papá me sonrió y me llevó a la escuela, dejándome más temprano de lo usual ya que tendría que inscribirme al equipo de fútbol.
Unos minutos después llegó Emma a saludarme y dándome los pequeños chismes sobre el nuevo profesor.
— Entonces, ¿es joven?-. A pesar de no saber mucho sobre aquellas cosas, Emma y yo siempre queríamos actuar como adultos aunque sabíamos que la vida de un adulto, no era del todo buena.
— Sí y mi mamá dijo que era lindo-. Reí. Bien, su mamá siempre tenía problemas con los nuevos profesores y más los jóvenes. Ojalá le gustasen los hombres, podría meter a papá si es que Marlene se va.
A la hora del timbre entramos a nuestro salón con la sorpresa de ver al nuevo profesor y no era por decirle nada malo ni nada pero se parecía a... mí.
— Sam, el profesor se te está quedando viendo-. Emma me sacó de mis pensamientos y vi cuando el profesor decidió voltearse y escanear el salón con su mirada.
Todos nos sentamos y él empezó a escribir en el pizarrón, cuando dijo su nombre juré preguntarle a mi papá sobre todo.
— Buenos días chicos, yo soy Louis Tomlinson y seré su nuevo maestro de historia. Espero llévame bien con ustedes.
Louis Tomlinson.
Ese era el nombre que llevaba mi acta de nacimiento, el mismo nombre por el cuál mi papá se veía preocupado ayer y al parecer, él sabía algo ya que no podía alejar su mirada de mí, podía sentir sus ojos sobre mí durante toda la clase y los murmullos de los demás cuando se dieron cuenta del pequeño (gran) parentesco que había entre el profesor Tomlinson y yo.
— Vamos Sam, capaz y fue una coincidencia-. Emma seguía repitiéndome que me estaba volviendo loco, que realmente podía ser una tontería el hecho de que el nombre del profesor era el mismo.
— Y...yo... ¡Emma!-. Grité/murmuré para que el profesor no se diese cuenta-. Podría estar descubriendo algo asombroso y tú no me dejas terminar de descifrar todo.
- Realmente solo creo que es una coincidencia Sam, no creo que el mundo sea tan pequeño como para ponerte al mismo Louis Tomlinson que tiene tu acta.
- No lo sabemos...
- Ustedes dos de atrás, ¿tienen algo que aportar a la clase?-. El profesor nos había llamado la atención y nosotros solo nos pusimos rojos de la vergüenza.
- No, lo sentimos.
Louis:
Yo no podía creer quien era la persona que estaba en frente a mis ojos. Había deseado poder verlo ya grande, pero no creí que terminaría siendo su maestro y Niall que había dicho que Londres era tan grande que pudiese ser que no lo encontrase, gracias Horan.
Durante el transcurso de la clase podía ver como Samuel no dejaba de susurrar con su compañera de escritorio, pero llegó un momento en que sus voces empezaron a subir de tono y algunos de sus compañeros habían decidido prestarles más atención a ellos que a mí, así que al llamarles la atención pude ver como sus mejillas se coloreaban y bajaba la mirada. Era tan tierno a los ojos de los demás, aunque pude notar como algunos de sus compañeros se sorprendían al verme y al ver a Samuel. Sabía de ciencia cierta que teníamos un cierto parentesco, pero no creí que con el pasar del tiempo se volvería un mini yo. En su momento, había deseado que los ojos verdes no fuesen lo único que sacara de Harry y al parecer me había equivocado y el mundo había castigado al rizado de aquella manera.
Al finalizar la clase fui corriendo hasta la sala de maestros, sitio en donde se suponía que me encontraría a Niall para platicar sobre nuestra primera experiencia impartiendo clases, pero para mí, había un tema más importante que el contarle el cómo manejé a un grupo de adolescentes durante una hora.
— ¡Lou! Es bueno ver que sigues en pie, tuve un pequeño percance con un alumno pero todo en orden-. Su sonrisa radiante murió al ver que no expresaba nada-. ¿Tan mal estuvo tu primer día? Amigo, tu cara no me da una buena espina.
— Es porque no tuve realmente un mal día, es solo que estoy algo asustado y sorprendido de verlo-. Me senté en mi escritorio asignado, justo en frente de Niall-. ¿Recuerdas que dijiste que Londres era lo suficientemente grande como para no encontrarlo? Bueno, pues espero que para la otra digas que no vamos a ganar la lotería.
— Louis, no uses el sarcasmo conmigo, sabes que soy malo para entenderlo-. Golpeé mi cara con mi mano.
— ¡Que me encontré a Samuel y es mi alumno!-. Grité aquello, asustando a otra maestra que estaba a unas mesas de mí.
— ¿Samuel Styles? El chico es muy lindo y listo, excelente alumnos-. La mujer nos regaló una sonrisa y cuando Nialla entendió el nombre, su quijada cayó al suelo.
— ¿Sa-Samuel Styles? ¿Usted también le da clases?-. No sabía a donde quería llegar Niall, pero aquello era algo que me interesaba.
— Oh no, yo doy a jóvenes más grandes, pero aquí él es conocido tanto por su desempeño como por su padre, el señor Styles-. Suspiré. Bueno al parecer tendría que acostumbrarme a escuchar ese apellido después de años de no haberlo hecho.
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¿Soy de un vientre rentado? | Larry Stylinson
FanfictionYo no sabía que mi vida cambiaría de un día para otro, hace tan sólo un tiempo que me enteré que la persona que creía que era mi madre en realidad no lo era, aunque daba gracias a ello ya que mi relación con ella no era para nada buena y a causa de...