Mi Esposo, Padre Celoso (HARRY STYLES)

14. Bronx

Una vez me dijeron: tener algo y apreciarlo y valorarlo habla de cuan valioso es para ti. Y cómo actúas para protegerlo y cuidarlo.
Algo clave que diría sobre eso, es mis padres. Sé que pasaron por tantas cosas pero aún así su amor y la familia para ellos fue más importante y arribaron miles de obstáculos.
Es mi sueño llegar a eso algún día. Conseguir alguien como papá para ser mi compañero para siempre, o sentir la compañía y presencia. Serán sobre-protectores de más, pero todo tiene un porqué . Y creo entenderlo.

—No creo haya dicho eso. —Me interrumpe mis pensamientos y desvío la mirada de mis padres abrazados en el jardín, para ahora si observar a mi loca amiga.

—Literalmente Ariana dijo eso.

Ella da un mordisco a su sándwich y mirando las escaleras exclama:

—¿Están ahí?

Me contó que mi hermano no la llama hace más de una semana y ella dio por finalizada la relación. Solo recordar me dan ganas de clavarle un cuchillo en su cara.

—Sí creo. —Le contesto. —No bajaron porque yo estuve aquí desde que desperté. Y tampoco almorzaron.

—Raro. —Dice ella.

—¿El que?

—El hecho que sean ahora amiguitos que se dan alojamiento. Para mi algo trajo Joseph y Drew lo está ayudando bien. —Explica ella nerviosa, la verdad es que opino exactamente lo mismo, y está arruinando absolutamente todo. Me refiero de las relaciones con los que rodean. —Necesitamos averiguar que es lo que ocultan.

—O quizás Ariana nos estamos haciendo la cabeza de más y solo son unos idiotas.

—Puede ser. —Dice. —Pero no me creo que Drew me haya dejado así como así, algún indicio al menos tendría que haber habido. Pero nada. —Me explica bajando su cabeza. —Estábamos tan bien Demi... y Justo pasó lo de Joseph y ahí ¡BAM! Cambio todo. Cambio él...

La forma y la tristeza con la que dice esas palabras me indica cuán convencida está. Y tiene coherencia.

Terminamos nuestra merienda improvisada y decidimos subir a mi cuarto simplemente a ver alguna película acostadas. Y pasamos la tarde así. Siendo nosotras felices sin josephs o Drews que molesten.

Mamá nos avisa que irá a la casa del abuelo con James y papá. Pero nos dejó comida en el refrigerador.

—¿Le dijiste a Drew?—Le pregunto antes que salga de mi cuarto.

—Sí. —Responde. —Dijo que bajarían en un rato a cenar. ¿Algún problema con eso?

—No mamá. Ninguno.

Ella se retira sonriente como es normal de mi madre. Irradiar y transmitir amor. Entre mil otras cualidades.

—ojalá no bajen nunca. —Dice enojada mi amiga haciéndome reír. —¿Qué? No quiero verle la cara a tu hermano más.

—Ni me lo digas, que yo tampoco quiero.

Una hora después bajamos y nos damos con la grata sorpresa que están ambos sentados como idiotas. Gracias karma.

Ellos nos observan pero la cara de mi hermano es todo un poema al ver a Ariana, quien está quieta como estatua a mi lado. Yo reacciono con rapidez y hablo haciéndome la casual.

—¡No mientas Ari! ¿En serio te habló Cameron Dallas? —Miento haciéndole señas y que continúe con la mentira. ¡Me niego a que mi amiga quede llorando por él! Al menos mentiré para protegerla. Ella me observa como si tuviese dos cabezas. Yo ruedo los ojos y logro tocarle el hombro. Que parece captar mi plan.