22

288 14 1
                                    


ANUNCIÓ IMPORTANTE AL FINAL DEL CAPITULO

No puedo dejar de mirarle a los ojos, ni tampoco puedo dejar de besar sus labios.

—Para, que puede venir mi hermano.

Aún seguimos en la fiesta y a juzgar por la gente todavía no terminó.
Estamos con Joseph alejados, pero aún podemos observar la multitud. Queríamos un momento a solas. Un momento junto a y felices.

—¿Y qué si nos ve Demi? —Me dice mirándome pensativo.

—Y que no quiero Joseph. —Le digo firme. Tomando de su mano. —No quiero que nadie se entere todavía. Quiero mantener esto que tenemos —Y hago un movimiento con mis manos, señalándonos. —Para nosotros.

—¿Dices de, ocultarlo? —Parece dolido al decir esas palabras. Y me sorprende, es que no pretendía ir y hacer como si nada hubiese pasado, sobre todo en mi casa, que aún está en la mira de todos, y por todos me refiero a mi papá.

—Si —Le digo intentando hacerle entender. —¿Qué tú creías que ibas a ir a mi casa y hacer como si nada hubiese ocurrido Joseph?

Toma mi mano, sus ojos parecen cansados, triste. Es que que iba a saber yo, joder, que le iba a doler.

—T.Tienes razón Demi. —Acepta acariciando mi mejilla. Un nudo en mi estómago se forma, haciéndome sentir la peor del mundo.

Nos quedamos en silencio observando el lago, y el anochecer. Había una mínima posibilidad en mi mente que volviéramos a estar juntos con Joseph. Pero no iba a creer que me iba a animar a lograrlo. A aceptarlo olvidando en pasado y sus mierdas.

Mi teléfono suena indicándome que tengo un nuevo mensaje, lo abro bajo la atenta mirada de Joseph.

De: Drew 👻
¿Dónde estás?     

Estoy buscándote por todos los malditos lados y no te encuentro Demi.

Maldita sea.

—Vamos. —Toma mi mano Joseph y salimos, nos ponemos de acuerdo en ir por lados diferentes. No sin antes darnos un beso, de esos que dejan tus piernas temblar. Segundos después nos separamos.
Y a unos metros encuentro a Drew con su teléfono, debe esperar una respuesta mía.

—Aquí estoy loco. —Sonrió diciéndole. El abre sus ojos y suspira. Como si se tratase de una persecución. Exagerado.

—No me mates del susto la próxima por favor. —Ruega y yo me rio. —Ahora debemos encontrar a Joseph. —Mira a todos lados, y dice: —¿Lo viste?

Si, estuvimos besándonos segundos atrás, y me quede con ganas de más.

—No. —Digo fingiendo buscarlo también—¿Donde se habrá metido?

Merezco un Oscar, lo anhelo.

Y un poco después vemos a Joseph aparecer con una lata de cerveza en su mano y ¿labial? En su mejilla.

—¡Joder Hermano!—Habla. —¿porque tanto apuro por irnos?

No dejo de mirarle esa marca de lápiz labial en su mejilla.
Yo tengo brillo en los labios, no ese color.
Un fuego recorre por mi cuerpo y lo identifico al instante. Celos.

¿Quien le hizo esa jodida marca en su mejilla?

—Y se puede saber porque tú no te querías ir eh bro —Dice riendo mi hermano, Joseph me mira y noto diversión en sus ojos. ¿Cree que es un juego? ¿Se habrá tomado mal lo que le dije de no decirle a nadie? Quizás pensó que cuando decía eso, también me refería a exclusividad. A qué no quería decirlo porque quería estar con otros chicos. ¡Maldita sea! Mi cabeza da vueltas como una montaña rusa. Me siento mareada y triste. Mi plan diversión-Celos a Joseph se me está yendo por el grifo.

Mi Esposo, Padre Celoso (HARRY STYLES)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora