MIN DADDY; yoontae

19

Su primer día de clases transcurrió con normalidad, conoció a nuevas personas he hizo un nuevo amigo, aunque extrañaba un poco a Jungkook y suponía que él lo extrañaba, por lo que le pediría permiso a su padre para verlo después de la comida...

Su padre, su papi...

Olvidó por completo  lo que hizo horas antes y ahora sentía mucha vergüenza de la reacción que tendría al verlo después, tenía miedo también que lo rechazara como hace años, por qué entonces si todo se iría a la mierda.

Su móvil sonó anunciando un mensaje entrante, lo abrió enseguida al notar que se trataba de su tío Jin.

"Pequeño, espera por mi unos minutos más, la zona donde estoy hay demasiado tráfico, ponte tu abrigo, te amo".

Suspiro guardando el aparato en sus pantalones, la mayoría de los estudiantes ya se habían marchado y sus compañeros con los que podría conversar se agotaron, quedando completamente solo en la acera, observando a todos lados mientras el sol comenzaba a ser cubierto por nubes grises y un frío viento comenzaba a hacerse presente, ahora entendía porque su tío le dijo aquello. Se sacó la mochila de los hombros la puso en el piso agachándose igual para sacar su suéter rojo.

De a poco las gotas de lluvia comenzaron a caer y ya con el suéter puesto un escalofrío recorrió todo su cuerpo, se abrazó a si mismo dando un vistazo a toda la calle, encontrando un auto blanco estacionado metros lejos de él, no sabía el por qué pero se sintió aterrado dando unos pasos atrás cuando el auto se puso en movimiento. Su espalda chocó con la pared de piedra de la institución, volvió a mirar a todos lados esperando ver el auto de su tío pero nada, completamente desierto, parecía una muy buena y elaborada broma...

No iba a arriesgarse así que camino calle abajo, con la lluvia callendo sobre él, aunque en ese momento era lo de menos. Podía escuchar como el auto le seguía  y rápidamente sin importarle que su móvil podría dejar de funcionar marcando el número de Seokjin lo coloco de inmediato en su oído caminando más de prisa

—Dame unos minutos, ya estoy por llegar, entra a una tienda o algo la llu...

—T-tio... Por favor ven rápido— su voz sonó demasiado asustada, alarmando enseguida al pelinegro

—¿Que sucede?— aceleró más a fondo

—Creo qu-que un auto está siguien... ¡Hyung!— el sonido de un auto frenando de golpe y como si el aparato cayera al piso hizo que el corazón de Seokjin latir desbocado

—¡Taehyung! ¡Que sucede! ¡Taehyung!

—Hey, D ¿Recuerdas al señor Harell?— una voz desconocida para Seokjin se escuchó del otro lado, alterando aún más

—¿¡Dónde está mi hijo!?— grito furioso, con lágrimas en los ojos

—Sabes dónde encontrarlo, no tardes mucho, no creo que soporte los juegos del jefe— el hombre cortó la llamada después de una risa burlona, el pelinegro tiro el móvil a un lado en el asiento del copiloto, acelerando a fondo hasta llegar a la calle de la preparatoria.

Pero ya no había rastro de nadie.

Salió del auto sin importar lo fuerte que la lluvia caía, corrió de una acera a otra gritando el nombre del menor, observando cada detalle que le diese alguna pista, tropezó con algo en la acera, resultando ser la mochila de Taehyung, está estaba rota y con sus útiles ya mojados...

Las lágrimas no podían ser visibles debido a la lluvia pero su rostro reflejaba perfecto la angustia y el dolor. Corrió de vuelta al auto con la mochila en una mano, entro tomando su teléfono y con manos temblorosa marco el número de Min

Pero este sonó antes de llamar, su ceño se frunció pero aún así contesto

—Jin, dime por favor que Jungkook está contigo y Tae

Quien menos deseas que sufra, a veces, es el primero en recibir el daño.