Español || Fillie (EN EDICIÓN)

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Finn había estado recibiendo mensajes de su novia, una y otra vez, sin exagerar, estaba seguro que había más de 200 mensajes de ella. En ningún momento abrió su conversación, pues entonces sería aún más drama, el típico "¿Por qué me dejas en visto?" Aparecería una y otra vez, acompañado de millones de mensajes de ella enojada. Así que simplemente decido pasar de ella y sus mensajes.

Sabía que no estaba bien lo que hacía, ignorar a su novia solo porque estaba harto de ella, pero ¿que podía hacer? En esa semana había intentado terminar con ella más de un vez, pero la chica se hechaba a llorar o amenazaba con que le diría a su padre, así que al final terminaba diciendo "Es una broma."

El pelinegro jamás estuvo con Madison porque en verdad la amase, fue una orden de su padre. Maddie era de una familia con dinero y estaba locamente enamorada de Finn desde hace tiempo. El padre de el chico lo obligó a estar con ella y si este se negaba, se olvidaría de ir a la Universidad que siempre había soñado, esa era la única razón por la que había aceptado.

Quizás había pasado muy poco tiempo desde que conoció Millie, pero la chica desde el primer momento lo capturó, su español, a pesar de no entender le mucho, lo amo y si, quizás en una semana y media nadie podía enamorarse, pero el si lo hizo. Se enamoró.

Ahora mismo se encontraba sentado una silla de su escritorio y Millie estaba sentada en su cama. La castaña estaba concentrada leyendo un libro y el pelinegro no dejaba  de mirarla. La chicaa sintió la mirada de el chico sobre ella y levantó la vista de su libro, encontrándose con los ojos de Finn.

-¿Ocurre algo? -Pregunto la chica.

Finn rápidamente apartó su vista de ella y miro a otra parte nervioso.

-No no, ¿qué tal tu libro? -Pregunto cambiando de tema.

-Es interesante, pero ya me aburrí. -Dijo para después cerrar el libro.

El chico rió. -¿Quieres hacer algo? Siempre estamos aquí encerrados.

-Estamos aquí "encerrados" porque vengo a ayudarte con tu español. -Le recordó la chica. -Pero, supongo que ya hace falta un descanso.

-Eres la mejor.

Ambos salieron de la habitación de el chico y bajaron las escaleras.

-¿Quieres hacer algo aquí o prefieres salir? -Pregunto el chico sonriendo.

-Como tu quieras, ¿que podemos hacer aquí?

-¿No prefieres ir al cine?

-Lo mismo que haremos en el cine lo podemos hacer aquí.

Millie tenía una forma de pensar muy distinta a la de Finn. El pelinegro prefería salir y gastar dinero, mientras la castaña prefería quedarse en casa viendo una película. Quizás a la chica le gustaba ahorrar o simplemente no le sobraba dinero como para darse ese tipo de "lujos".

-Eres la primera chica que conozco que prefiere ver una película en casa. -Dice el chico sonriendo, para después tomar asiento en le sofá que estaba frente a la televisión.

La chica tomo asiento a su lado.

-¿Te gustan las películas de terror?

-Si, pero hace tiempo que no veo una, así que no seas desgraciado y pon una que no de tanto miedo.

Finn solo río, era gracioso cuando la chica lo insultaba en el español, pues ella lo hacía porque sabía que Finn no tenía ni idea de lo que el insulto significaba. El pelinegro pasó un minutos buscando una película, hasta que por fin encontró una.

Al principio, como algunas de las películas de este género, no era tan aterradora, esa parte llegó a mitad de la película. Millie creía que en algún momento iba a morir de miedo, incluso ya estaba utilizando un pequeño cojín para tapar sus ojos. No era nada comparado a la última película que ella había visto, de hecho comparada con esta, la otra película daba risa.

-¿Tienes miedo? -Pregunto el chico algo obvio.

-No, ¿como crees? Es que el estampado de este cojín es tan bello que me gusta mirar lo de cerca. -Dijo la chica con sarcasmo.

Finn entendió que la chica hablaba con sarcasmo, mas aparte, el cojín tenía un color liso, no tenía ningún estampado.

El pelinegro tomó la mano de la chica y la atrajo hasta el, pues la castaña se había quedado en una de las esquinas de el sofá.

-¿Qué haces? -Pregunto la chica un poco nerviosa.

-Nada. -El chico pasó su brazo por encima de los hombros de la castaña.

Ella al principio se quedó inmóvil, no le parecía correcto estar de esa forma con el chico, ¿que tal si sus padres llegaban y los veían así? O quizás Finn tenía novia.

<<Al carajo todo.>> Pensó la chica y dejó caer su cabeza en el hombro de Finn.

Durante el resto de la película, Finn tomaba la mano de la chica cuando ella se asustaba, de vez en cuando también acariciaba su cabello. La castaña sentia seguridad estando al lado de Finn, era la primera vez su Millie se sentia de esa forma. Y Finn, bueno, su sonrisa jamás se borró de sus labios, el solo deseaba que ese momento nunca se acabase.

Tienen que amarme, recién ayer publiqué un capítulo y ahora les doy otro, soy la mejor ¿No? No, ya lo sabía xd.

Si te gustó, te agradecería que me regalaras una estreshita :3.

Gracias por perder un poco de tiempo leyendo esto~ ♡