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Ambos se miraban intensamente y de vez en cuando se sonreían coquetamente, pequeñas chispas de excitación iluminaban sus ojos mientras los nervios y la adrenalina recorrían sus sistemas.

— Te toca — Susurró divertido mientras acomodaba su cabello.

— Está bien — Respondió riendo — Flor imperial — Mostró sus cartas dejándolas en la mesa con una sonrisa triunfal.

Él pálido quedo boquiabierto y después soltó una carcajada viendo la sonrisa ladina del chico frente a él. Se acercó hasta casi rozar sus narices y lo vio directo a los ojos.

— Tramposo~ — Susurró abalanzándose para besar sus labios.

Él chico cayó de espaldas sobre él sillón sonriendo en medio del beso, Yoongi acaricio el cuerpo ajeno a su antojo, colocó sus manos en las costillas contrarias y comenzó a mover sus dedos. El peligris comenzó a retorcerse y se separó de los labios ajenos comenzando a reír.

— ¡Basta! Jaja Yoongi~~ — Se quejó tratando de quitar las escurridizas manos de su torso.

Las lágrimas amenazaban con salir y sus carcajadas resonaban por toda la habitación.

— Tramposo... Eres un pequeño tramposo — Canturreo riendo al ver él rostro del menor que comenzaba a tornarse rojo.

— No, no — Se movía frenéticamente tratando, en vano, de alejar el ataque de cosquillas — El tramposo eres tú ... Sabés que soy débil con las cosquillas.

Él mayor lo miró victorioso y lo soltó, dejó que se acomodara en él sillón y le dedico un cálida sonrisa.

— ¿Cómo es que me ganaste sí antes perdías? — Preguntó riendo.

— Aprendí del mejor — Respondió acercándose oara robarle un beso.

— Me encantan tus labios — Susurró mirándolo.

El menor rió y volvió a besarlo, acarició dulcemente aquellos labios delgados y subió su mano a su nuca.

— Entonces te va a encantar lo que haré — Comentó dándole un casto beso — Después de todo yo gane.

Y era verdad. La apuesta que había en juego seguía en pie y esta decía claramente que él perdedor tenía que seguir las ordenes del ganador.

— ¿Lo disfrutaré? — Susurró coqueto mirando al menor.

— Bueno si y no — Respondió con el mismo tono — Necesito que vayas al cuarto y me esperes ahí — Pidió guiñándole un ojo.

Él pálido gruño y atacó por última vez aquellos labios carnosos y adictivos antes de marcharse hacia la habitación.

Él peli plata rió y espero un momento hasta ver desaparecer al mayor, entró a la cocina y tomó diversas cosas, agradecido que era él día de descanso de Jenni, tomó una bolsa y guardo todo ahí.

Una vez tuvo todo listo subió corriendo por las escaleras y se metió a la habitación, miro al mayor y una sonrisa traviesa se asomo por sus labios al ver que él mayor estaba desnudo del torso mirando hacia la ventana. Dejó la bolsa en el suelo y se acerco a el, lo abrazo por la espalda y le plantó un beso húmedo en su hombro.

— ¿Listo? — Susurró en su oído.

— Eso creó — Comentó el mayor con una sonrisa.

Jimin rió y recostó al mayor sobre la cama comenzó a besarlo bajando lentamente por su quijada, paso su lengua sobre la manzana de Adán y descendió hasta sus pezones donde mordió y ensalivó sintiendolos duros bajo su tacto.

× Sick Love ×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora