No me llames Omega | Kookmin × Taejin |

Capítulo 52

Tae tembló con miedo y correspondió a ese abrazo, no quería que Jin le abandonará, sabía que era tonto pensar en ello pero simplemente no podía sacarse esa idea de la cabeza.

— Te amo mucho! — Dijo Tae sobre su hombro abrazando ese cuerpo con fuerza pero sin llegar a ahogar a su pareja.

— También te amo... — Correspondió pero su voz se quebró y rompió en lágrimas.

— Por qué lloras? — Buscó la mirada contraria al sentir el cuerpo ajeno temblar y como esos sollozos escapaban de aquella garganta.

— No es nada... — Aclaró sin querer comentar la perdida de ese anillo que era perfecto y que había deseado tanto con dárselo a su amado Alfa. — Podrías sostenerme? — Preguntó mirándole con las mejillas sonrojadas y con esos brillantes ojos llenos de lágrimas.

— Tu cuerpo aún está débil... — Se negó por el bien de la salud de su Jin pero tan pronto como le rechazo esos labios se posaron sobre los propios, fue un beso lento y excitante, su cuerpo se entumeció solo por ese contacto y cerró los ojos dejándose llevar por esa dulzura transformada en un beso. — Jin... — Taehyung le llamó sobre sus labios cuando sus bocas se separaron quedando a escasos milímetros y entonces se encontró con la mirada suplicante del mayor.

— Quiero hacerlo... — Dijo Seok Jin en un suspiro caliente, su mente había estado llena de pensamientos egoístas y dolorosos y ahora lo único que quería era amar a ese chico, deseaba sentir esas manos acariciarle con pasión y lentitud mientras le tomaba con ternura o quizás hacer un desastre y dejar que ese Alfa de ojos azules le tomase con fuerza, besándole con desenfreno mientras le penetraban con violencia como la primera vez que sus cuerpos se unieron en uno, tan solo con imaginarlo sintió necesidad, estaba hambriento por ese hombre y sintió sus piernas temblar cuando su interior se retorció ansioso por recibir a su Alfa. — Tómame con violencia... Hazme gritar! —

— Jin... — Taehyung se sonrojo ante las palabras descaradas que escapaban de esos dulces labios, tan contradictorias a esa imagen de ese rostro tan angelical y hermoso.

— Por favor... — Le rogó aferrándose a las ropas del menor dejando que sus feromonas brotarán de su piel sin control alguno, un gruñido grave escapó de la garganta del Alfa ante esa invitación seductora y ya sin ser capaz de contenerse estampó a Jin contra la pared del corredor para devorar su cuello con insistencia. — Tae... — Un jadeo ahogado murió en su boca cuando sintió una mordida sobre su piel sensible y junto las piernas sintiendo sus interiores humedecidos, estaba lubricado como si se tratara de su celo pero era demasiado pronto para que esté se presentará. Taehyung había vuelto su cuerpo extraño, yo no importaba si estaba en celo o no perdía el control con demasiada facilidad.

Las robustas manos del menor se colaron bajo su ropa para acariciarle con insistencia, Jin gemía expectante dejándose acariciar y sintiendo como sus pezones eran retorcidos con los dedos de su amante, su cuerpo estaba sensible y V lo supo en cuanto sintió el temblor sobre su piel.

— Estás muy ansioso... — Dijo con la respiración ahogada, subiendo las ropas del mayor dejando esa tersa espalda al descubierto. Jin siempre le parecía tan sexy, su voz y su cuerpo se volvían tan lascivos que deseaba devorarle por completo, aunque muchas veces se sentía celoso de los que pudieron ver ese lado atrevido. — Por qué no me seduces? — Preguntó observando ese trasero apegado a su pelvis, viendo claramente como su propia erección descansaba entre esos glúteos que sabía debían estar hechos un desastre ya que aún con la ropa puesta al frotarse contra el podía sentir esa sensación viscosa y húmeda.

— Mmm... — Jin tembló y sintió el calor subirse a su rostro seguramente poniéndose más rojo de lo que por si ya estaba, sus ojos miraron el piso y luego de meditarlo un momento dirigió sus manos a sus pantalones, no entendía porque aún después de tanto tiempo se sentía tan avergonzado ante esa mirada azul profundo. Sin perder más tiempo coló sus dedos en el borde de sus pantalones e hizo presión para quitárselos con lentitud, Tae quien le sostenía con una mano sobre su cuello sosteniendo su camisa y chaqueta para ver claramente su espalda mordió su labio inferior al encontrarse con ese líquido escurriendo por las piernas del mayor, Jin deslizó una de sus manos hasta su trasero para separar sus glúteos y le miró por el hombro. — Es vergonzoso... — Dijo con su voz sonando excitada y se frotó contra los cómodos pantalones del alfa.