A la mañana siguiente cuando el siguiente grupo de las mujeres estaba por empezar. Una gran sorpresa se mostró a todos los participantes del torneo que vieron como de una día para otro la arena de combate se había convertido en una feria de diversiones.
El hombre de acero en persona miro a los participantes y con una sonrisa dijo "Es un torneo... pero eso no significa que siempre haya que pelear". Con esa declaración todos los jóvenes se dispusieron a ser pues... jóvenes.
Los titanes menos tres, ya que Logan, Reyes y Donna corrieron para disfrutar de las atracciones. Starfire miro a sus dos jóvenes aves y con una sonrisa en los labios dijo.
- Diversión obligatoria.
Las dos aves miraron a su líder asintiendo sin mayor entusiasmo. Ambos caminaron juntos como aquella vez de su primera visita al parque de diversiones que termino con la presentación del padre de la chica.
- Espero no arruinar esta ocasión como la vez anterior.
- Eso fue lo mas entretenido de la vez anterior.
La chica sonrió por el intento de confort de su compañero para con ella y sonrió aun mas cuando frente a su rostro apareció un cono con algodón de azúcar.
- Te debía una sustancia rosada hecha de azúcar... que aun no entiendo que encuentras de agradable.
- Gracias Damian.
Siguieron caminando hasta un puesto de dardos donde Arsenal, compañero de Flecha Verde, mostraba todo sus talentos de puntería. Mientras cortejaba a mas de una chica mientras lo hacia y todo esto siendo observado por su mentor y su pareja.
- Veo que a Roy se le han pegado tus malas costumbres.
- No seas así nena. El chico es joven y tu ya me tienes en tu jaula de pajaritos. Dejalo divertirse.
Damian observo el espectáculo pero mas le intereso ver los premios. Su mayordomo le había mencionado una que una buena obra siempre merece una retribución en especie y a sus ojos apareció un marcador de libros. De color negro y morado, perfecto para ella que es una lectora mantenga en orden su avances en sus lecturas.
Raven observo a su compañero dirigirse hacia el puesto de dardos y lo siguió. Escucho cuando preguntaba cuanto por el marcador de hojas y hay fue que también escucho al pelirrojo llamar la atención del muchacho.
- ¿Y que hace el nuevo chico maravilla por aquí?
- No molestes Harper. Puedo ver que estas bastante ocupado con tu séquito de admiradoras.
- Son solo humanas ¿que se le va a hacer?
El dueño del puesto dijo que debía acertar al centro del blanco mas lejano del puesto que estaba perpendicular al jugador. Roy miro a Damian y comenzó a reír cuando escucho el desafió.
- Ya dejalo muchacho. Es un tiro imposible. Ni siquiera yo puedo hacer eso.
- ¿Que dardos tienes?
Damian ignoro al arquero y el dueño mostró sus opciones.
- Tengo dardos, cuchillos y tengo Shurikens.
Todos miraron al hombre y él encogiéndose de hombros dijo.
- Ustedes usan varias cosas y yo debo ganarme unas monedas.
- Dame los Shurikens.
- ¿Cuentos necesitas?
- Dos.
- Dos van.
Todos miraban a Damian que sin demora lanzo ambos al mismo tiempo y al pasar cerca del blanco. Una de las estrellas choco con la otra cambiando su trayectoria dando una linea recta hacia el centro del blanco. De lejos Canario Negro sonreía al recordar a cierto encapuchado mientras que su compañero dijo en forma susurro.
- Que hijo de....
El encargado del local silbo y cómicamente dijo "Bueno... ponme un vestido y llamame Susan... GANADOR!!!" mientras traía el premio.
Cuando el muchacho se hizo con su objetivo, lo dirigio hacia su compañera que lo miraba sin entender lo que habia pasado.
- Es por lo de mis chakras... creo que es correcto darte un obsequio en muestra de agradecimiento.
- .... Gracias.... no era necesario que te esforsaras tanto.
- ¿Esfuerzo? Hago eso casi siempre que estoy con mi padre en sus misiones.
- Oh... aun asi es muy impresionante.
- ... Agradezco tu reconocimiento...
Se retiraron de la vista de los demas mientras Harper intentaba hacer el mismo tiro sin mayor éxito.
La tarde paso rápido con los juegos mecánicos y demas entretenciones. Ambos se hicieron notar entre las multitud de jóvenes cuando entraron a la casa embrujada y Raven salio riendo mientras que Damian se quejaba de lo triste que eran aquellos monstruos.
La casa de los espejos fue algo que los intrigo o por lo menos lo hizo para la chica. Que pidio entrar para ver de que se trataba.
Al entrar imagenes infinitas de ellos mismos trataban de perderlos pero ellos continuaron hasta espejos comcabos que los desfiguraban.
- Es raro verte con un trasero tan grande, Damian.
- Lo mismo digo de tu rostro... bastante desconcertador.
- ¿Muy feo?
-Asimétrico pero jamas feo.
El chico camino sin notar el sonrojo de su compañera.
-¿Damian?
- Si
- ... ¿Tu piensas que soy.... atractiva?...
Damian volteo para mirar a sus ojos violeta y sin demora respondio.
- Si.
El crujido de los cristales indico que era hora de retirarse de ese lugar.
- Lo mejor sera retirarnos.... no fue mi intención avergonzarte.
- N-no te preocupes... y gracias.
