Mi esposo...el diablo. (Christopher Vélez y tú)

Capítulo 77. Maraton. (2/20)

Christopher está lavándose los dientes cuando me arrastro a la cama. Mañana tenemos que volver a la realidad: al trabajo, a los paparazzi y a Jack en custodia pero con la posibilidad de que tenga un cómplice. Hmm... Christopher fue poco claro al respecto. ¿Lo sabe? Y si fuera así, ¿me lo diría? Suspiro. Conseguir información de Chris es como sacar un diente y hemos tenido un fin de semana tan hermoso que no quiero arruinarlo. Nos vamos a mudar... estamos restaurando una casa en la costa. Los planos de Gia están completos y aprobados, y el equipo de Elliot comenzará a construirla la semana próxima. Río por lo bajo cuando recuerdo la sorprendida expresión de Gia cuando le dije que la había visto en Aspen. Resulta que sólo fue una coincidencia. Había acampado en su lugar de vacaciones para trabajar solamente en nuestros planos. Por un horrible momento había pesando que ella había tenido algo que ver en la elección del anillo, pero aparentemente no. Pero aún no confío en Gia, quiero oír la misma historia de Elliot. Al menos mantuvo la distancia con Christopher esta vez. Miro el cielo nocturno. Extrañaré esta vista. La vista panorámica... LA a nuestros pies, tan llena de posibilidades, sin embargo tan alejada. Quizás ese sea el problema de Christopher: ha estado demasiado aislado de la vida real por tanto tiempo, gracias a su exilio autoimpuesto. Sin embargo, con la familia alrededor, es menos controlador, está menos ansioso... más libre, más feliz. Chris entra a grandes pasos en la habitación, luciendo tan hermoso como siempre pero pensativo.

Tn: ¿Todo bien? —pregunto. Él asiente distraídamente mientras se mete a la cama. —No espero con ansias el regresar a la realidad —murmuro.

Christopher: ¿No?. — Sacudo la cabeza y extiendo la mano para acariciar su hermoso rostro.

Tn: Tuve un maravilloso fin de semana. Gracias. —Él sonríe suavemente.

Christopher: Tú eres mi realidad, Tn —murmura, se inclina hacia adelante y me besa.

Tn: ¿Lo extrañas?

Christopher: ¿Extrañar qué? —pregunta, perplejo.

Tn: Ya sabes. Seducir a mujeres por sus almas... y eso —susurro, avergonzada. Me mira, su mirada imperturbable. Luego la duda cruza su rostro, su mirada que dice "hacia dónde va esto".

Christopher: No Tn, no lo extraño. —Su voz es firme y queda. Acaricia mi mejilla—. El Dr. Flynn me dijo algo cuando te fuiste, algo que se ha quedado conmigo. Dijo que yo no podía ser de esa manera, si tú no estabas tan dispuesta. Fue una revelación. —Se detiene y frunce el ceño—. No conocía otra manera, Tn. Ahora sí. Ha sido educativo.

Tn: ¿Yo, educarte a ti? —me burlo. Sus ojos se suavizan.

Christopher: ¿Lo extrañas? —pregunta. ¡Oh!

Tn: No quiero que me lastimes, pero me gusta jugar, Christopher. Lo sabes. Si quieres hacer algo... —Me encojo de hombros, mirándolo.

Christopher: ¿Algo?

Tn: Ya sabes, castigos y esposas... —me detengo, ruborizándome. Él levanta su ceja, sorprendido.

Christopher: Bueno... veremos. Ahora mismo, me gustaría un poco del buen y anticuado vainilla. —Sus pulgares rozan mi labio inferior, y me besa una vez más.
...

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De: Tn Vélez.
Para: Christopher Vélez.

Sr. Vélez:
Sólo quería decirle que lo amo, es todo. Siempre tuya.
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De: Christopher Vélez.
Para: Tn Vélez.

Sra. Vélez:
Qué gratificantes palabras para oír de la esposa una mañana de lunes. Permítame asegurarle que me siento de la misma manera. Perdón por la cena de esta noche. Espero que no sea demasiado tediosa para ti.
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Pongo los ojos es blanco... más estirados. Christopher realmente me lleva a las funciones más fascinantes.

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De: Tn Vélez.
Para: Christopher Vélez.

Querido Sr. Vélez:
Estoy segura de que puede pensar en una manera de darle más sabor a la cena... Suya con anticipación. Sra. V. Besos.
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De: Christopher Vélez.
Para: Tn Vélez.

Sra. Vélez:
Tengo algunas ideas...
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Todos los músculos en mi vientre se contraen. Hmm... me pregunté qué ideará. Hannah golpea a la puerta, interrumpiendo mi ensueño.

Hannah: ¿Lista para revisar tu horario de la semana, Tn?

Tn: Seguro. Toma asiento. —Sonrío, recuperando mi equilibrio, y minimizo el programa de correo electrónico.

Hannah: He tenido que cambiar algunas citas. El Sr. Fox la semana que viene y el Dr... — Mi teléfono suena, interrumpiéndola. Es Roach. Me pide que suba a su oficina.

Tn: ¿Podemos retomarlo en veinte minutos?

Hannah: Seguro.