𝖈𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝟑𝟑

2K 217 40
                                    


CUANDO TIENES MIEDO, CUANDO TIENES QUE JUGARTE LA VIDA, ES AHÍ CUANDO DEMUESTRAS QUIEN ERES.

El corazón le latía a toda prisa y casi le producía dolor al golpear con fuerzas contra las costillas. El pitido que ensordeció sus oídos al mismo tiempo que su vista se nublaba por causa de esa neblina de humo, el pequeño dolor que cruzó toda su espalda y las manos de Armin que la levantaba y le gritaba quien sabe que cosa.

Todo había sucedido tan rápido. Los cuerpos de sus compañeros estaban destrozados debajo de los escombros; la sangre manchó las paredes y el suelo, una leve luz iluminaba la obra de arte que ocasionó el titán femenino.

Su mirada se desvió de la mitad de la cara faltante del grupo b que trató de ayudarlos cuando el titán se transformó. Ahora miraba como Armin la sacudía de un lado a otro, pero por más que trataba de volverla a sí, el insoportable pitido era lo único que podía escuchar.

El golpe que recibió cuando el techo cayó con destreza contra los soldados fue suficiente para atontarla.

— ¡Cas, reacciona! ¡Tenemos que correr!—gritó Armin al mismo tiempo que otro pedazo de techo caía a unos metros de ellos, sacudiéndolos por breves segundos— ¡Moriremos si seguimos acá!

—No hay tiempo, Armin—murmuró Mikasa y sujetó con firmeza la mano de un Eren que tenía los ojos desorbitados, conmocionado por la escena que ocasionó el titán—. Ponla en tu hombro. Hay que salir de acá.

Sintió como la levantaban y como todo su cuerpo empezó a sacudirse a medida que se alejaban del lugar. Quiso decir algo, pero su voz de pronto desapareció y la escena cambió. Por unos instantes... tan solo... el rostro del soldado era la de su padre y los escombros eran la de su casa. Armin era Hannes con esa misma expresión de desesperación y incertidumbre mientras trataba de no voltear a sus compañeros muertos y Mikasa la observaba de reojo como ese día. En silencio, como no queriéndola despertar de ese mal sueño.

Pero fue diferente.

— ¡Cassandra...! ¡Te golpearé si no reaccionas!—el grito de su amiga estremeció su cuerpo, no por la amenaza, sino por el temblor en su voz y esa mirada decidida a no volver a cometer el mismo error

Pestañeó y la sensación la abrumó. No podía creer como es que habían llegado a ese punto. No, claro que sabía. El responsable de todo eso era...

Unas horas antes.

— ¿Annie es el titán? ¿Por qué? ¿Por qué dices eso, Armin? —preguntó Eren

Estaban reunidos en la antigua sede de la legión. El comandante Erwin los había reunidos a la mayoría para hablar sobre un tema que Armin y él conversaron. Solo muy pocos de la legión estaban ahí, pues claro, era un tema confidencial y solo los cercanos debían saber de eso.

El tema era delicado y debían agarrarlo con pinzas.

—Ella conocía tu rostro desde el principio—contestó el rubio con la mirada fija en sus manos. Estaba muy claro que para él tampoco era un tema fácil. Todo ese tiempo que llevó junto a la otra rubia, las conversaciones, las miradas... todo parecía algo irreal—. Sin mencionar que reaccionó cuando dije que te lanzaste a tu muerte. Nadie que no fuera del entrenamiento 104 lo entendería... sobre todo porque estoy bastante seguro de que ella mató a Sawney y Bean, los sujetos de prueba.

La albina observó de reojo las reacciones de Armin. Le dolía, aunque no quisiera demostrarlo. Y entendió como se sintió. Ella misma se sentía traicionada por sus amigos cuando no les dijo la situación en shinganshina, pero eso ya era otro tema. Expulsó el aire que contuvo desde que el comandante reveló esa información y se concentró en recordar algo en el titán femenino que era similar a Annie.

survivor━eren jaeger.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora