Dylan jugaba básquetbol con sus amigos hasta que accidentalmente el balón sale de sus manos dirigiéndose a una chica provocando que sus ojos se agrandan. Joder. Piensa hasta que ve como atrapa el balon y lo lanza de vuelta. Joder por mil. Piensa al ver que era su novia.
—Esa chica me gusta—dice Tyler tras suyo.
—Lo siento hermano, Dylan ya se enamoró—responde Daniel mientras voltea y lo mira mal.
—Hablale idiota.
—¿Ahora?
—No, cuando pase de la mano con su novio. Pues si idiota ahora.
—Si le gustó ¿Cierto?
—Si, está más idiota de lo normal.
—Los estoy escuchando—voltea hacia ellos—Idiotas es Camí.
—Lo sabemos, pero amamos la cara de idiota que pones al verla.
Se dirige al salón para ver cómo ella salía nuevamente, sonríe al verlo y se detiene.
—¿Vas a pasar?—niega—Bueno, te sugiero que te vayas, a Matt no le gusta que interrumpan su clase.—sonrie mientras lo mira dejando a la vista sus ojos cafés—¿No sé supone que estás en clase O'Brien?—pregunta mientras su novio rodea su cintura y deja un beso en su cuello.
—Tengo hora libre.
—Bueno dile a Risitos de oro que deje de tomarnos fotos—ambos ríen, y al voltear Daniel intentaba cubrir el teléfono con su bufanda.
—Dejalo muere por tener una novia como tú.—ella ríe.—Mañana es mi primer partido. ¿Irás a verme?
—Obviamente, tengo que asegurarme que ninguna rubia oxigenada te sobrepase contigo—rie abrazándola más.
—¿Hablas de Victoria?
—Si
—Tranquila preciosa. Solo me interesa que estes ahí.
—¡O'Brien deja de estar de calenturiento y ven a entrenar!—grita el entrenador se separan rápidamente.
—¡Un segundo!
—¡Nada de un segundo hormonal tienes que que entrenar si querés sorprender a tu novia, claro si es que tienes!.
—¡Soy yo!—grita Camila mientras todos ríen.
—¡Lo siento, Callense hijos de Devlin!
—Ire a entrenar—su novia ríe y Asiente para besarlo.
—Te veré en la gradas—asiente y observa como jalan de las orejas a Tyler y Daniel llevándolos a la cancha.
