Tonta Casualidad • [ Alex Høgh Andersen ] •

•• Capítulo 10: Noche en el club [PARTE III] ••

La noche fue transcurriendo con besos y roces cada vez más calientes con Alex.
Su estado de ebriedad era lo que lo conducía a ese comportamiento, pero, claramente, seguirle el juego fue lo que cada vez lo provocaba más.

Tampoco es que yo ayudaba.
Le seguí cada beso, y me moví de manera sexy contra él todo el tiempo que estuvimos en el club.

Había perdido totalmente a Kiara.
Bueno...al principio la había perdido, después un curioso mensaje de su parte apareció en mi celular.

¿Qué decía?

"Dulce Emma ojalá puedas disfrutar de la noche con tu sexy ángel
Yo encontré el mío, y si, ahora me estoy yendo a su apartamento.
Nos vemos mañana ;) "

¿¡LO CREEN!?
¡SE FUE CON MARCO!
¡SE FUE Y ME DEJÓ!

A veces me cuesta creer que sea mi mejor amiga. No sólo porque somos muy distintas, sino por éste tipo de actos.

— 3...2...1...¡Ya! — el rubio y grandote amigo de Alex, Alexander, dió la cuenta regresiva para que bebamos cada uno de su pequeño vaso de Vodka.

Un ardor asqueroso atravesaba mi garganta al beberlo, pero creo que el poco alcohol que había bebido hasta ahora estaba haciendo efecto en mi.

En mis años de secundario, con 17-18 y hasta mis 19, con mis pocos amigos nos reunimos con el único fin de emborracharnos.

Mi etapa de madurez llegó junto a Dylan, mi ex, y me sacó de ese mundo adolescente que estaba viviendo.

No puedo decir que era algo imprescindible en mi vida, pero solía pasarla bien y reírme un rato de las estupideces que hacíamos.

Al ponerme de novia, esas noches terminaron, así como mi relación con los compañeros de colegio.
Dylan solía desconfiar de ellos y de nuestras "borracheras" así que sólo dejé de ir.

Pero debo admitir que el estar acá, con estas personas tan agradables (y ebrias) me hacia revivir a esa inmadura y despreocupada Emma que creía dormida en mi.

— No...ya no más, por favor. — Sophie, la morocha novia de Jordan , suplicaba por ya terminar el juego.

— Vamos amor, sólo uno más — le contestó Jordan llenándole el pequeño vaso con la bebida.

— Yo también me rindo. — Kristy es quien habla ésta vez, negandose sonriente a seguir bebiendo.

Habíamos iniciado un pequeño juego de bebidas, y solo habría un ganador.

Katherine y Gustaf ya se habían marchado, al igual que Kiara y Marco.
Seguíamos concursando Alex, Alexander, Jordan y yo, ya que sus novias habían abandonado el juego.

— Creo que por ser la única mujer que concursa debería tener un reconocimiento — logré decir con dificultad, ya que mis sentidos comenzaban a fallar.

— ¡Opino igual! Pero no te daremos nada — dijo Jordan para luego sonreír alegremente. Poseía una hermosa sonrisa, ¿Todos aquí son atractivos o que?

— Sabes que lo que dices no tiene sentido, ¿verdad?

— ¡Si! Pero ahora...3...2...1... ¡VODKA! — Y todos volvimos a ver.

Alex terminó escupiendo el líquido de una  manera que nos hizo estallar de risas a todos.

— Ya, creo que el premio verdaderamente se lo merece Emma. — Dijo señalandome Alexander, tras secar la transpiración de su rostro.

Obviamente el alcohol, el clima, y el encierro del club estaban haciendo estragos en éste gigante.

— Vamos a bailar un rato — logró murmurarme Alex en el oido, pero con una dificultad al hablar que no entendía como había logrado entender lo que dijo.