IV

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—No podré ir donde tus padres, Soo, tengo algo importante mañana —Chanyeol siguió dibujando imbecilidades en su cuaderno de apuntes, su actual novio y futuro esposo se encontraba al otro lado del teléfono, le había preguntado '¿cómo va el día?', '¿qué hay de nuevo?' y '¿cuánto me amas?'. La última pregunta no pudo responderla, porque Kyungsoo volvió a hablarle de lo emocionado que estaba porque al fin tendrían una cena con sus padres.

—¿Por qué? —se oía triste, pero nada podría hacer. Era él o el hijo que acababa de conocer, se iba a casar con Do y había disfrutado ya mucho tiempo junto a él durante esos cinco años, podría dedicarle al menos un día al pequeño.

—Tengo que ir a un lugar, te prometo que comeremos con ellos antes de la boda.

—¡Pero quedan tres días para eso!

—En tres días pueden pasar muchas cosas, Soo, dame el día de mañana y te lo recompensaré, ¿de acuerdo? Ahora debo cortar, tengo unas cosas que resolver, te quiero, nos vemos luego.

—Cuídate, ¿sí? Iré a verte pronto.

Chanyeol siguió garabateando por unos minutos más mientras se replanteaba el porqué de su existencia. Dejó su bolígrafo sobre la hoja de papel y salió de su estudio, comería algo rápido e iría al centro en busca de un regalo para Daehyun, ¿qué le gustaba a los niños hoy en día?

Los platos sucios quedaron en espera en el fregadero, Chanyeol se acomodó la sudadera y salió de su hogar decidido a visitar alguna tienda de juguetes. Entró al lugar ajustando su gorra, se sintió cohibido al sentir las miradas de los trabajadores sobre su cuerpo, todos estaban acomodando un nuevo set de juegos y no había otros clientes en el lugar.

Caminó por el pasillo tres, coches, figuras de acción y nada que le llamara la atención. Los siguientes cinco pasillos eran poco más de lo mismo, balones de todo tipo, juegos de mesa, videojuegos y más cosas que no le parecían interesantes.

Terminó en el pasillo de los peluches, ositos rosas, pingüinos de bolsillo, incluso un peluche de una cabeza de cerdo, exacto, solo la cabeza. Hasta que uno de ellos llamó su atención, un peluche larguirucho en la última repisa del estante, de tamaño grande y demasiado adorable. Nada más y nada menos que un hurón, perfecto, eso sí que le gustaba a Chanyeol.

Tenía el regalo ideal para el pequeño Daehyun, solo faltaba que le gustara y Chanyeol se volvería un hombre feliz automáticamente.

Solo hacía falta esperar a que llegara la noche y que el siguiente día hiciera su aparición.

Aunque ya había alguien que estaba arruinando su pequeño pedazo de felicidad.

Oh Sehun, como odiaba a ese tipo, ni siquiera por cortesía y por ser el mejor amigo de su exesposo lo había llamado hyung alguna vez. Sehun lo miraba en menos y Chanyeol detestaba a Oh Sehun con todo y entrañas.

No había cambiado en nada, seguía con el mismo tono rubio de siempre y sus cejas marrones de mierda, su mirada no era menos, siempre había mirado a Chanyeol de esa manera, hacia abajo incluso si era cinco centímetros más bajo que él, siempre mirándolo como si no fuera nada y es que eso era lo que más le molestaba, porque efectivamente no era nada.

—Chanyeol, ¡qué sorpresa! Pensé que vivías enganchado a Kyungsoo, ¿ya no te trata como a una mascota? —no le quedó más que reír falsa y amargamente, vaya que despreciaba a ese tipo, con cada segundo que pasaba su odioo crecía y crecía.

—Eres muy gracioso, Sehun, ¿todavía arrastrándote por mi hermano?

—No te preocupes más por eso, amigo, él y yo hemos tenido una cita excelente el otro día. Te hubieramos dicho, pero... solo personas que lo valen y que son importantes son dignas de saber lo que pasa en nuestras vidas.

—Al menos conseguiste a alguien, a ver si te toman en serio esta vez, porque tus exnovios dejan que desear.

—Digo lo mismo del exesposo de mi mejor amigo, era un bastardo. ¿Puedes creer que ese imbécil lo embarazó y no se hizo cargo? Ese sí que es un idiota, ¿no lo crees?

—Eres un... —Chanyeol se guardó sus insultos para otro día, hoy estaría con su hijo y disfrutaría de ese día todo lo que no pudo disfrutar en cinco años—. ¿Has visto a Baekhyun? No me importas tú ni tu superioridad o tus comentarios sin peso, he venido a acompañar a mi hijo.

—No es necesario que lo acompañes Chanyeol, fue tu hijo quien me pidió venir. Tienes la gran habilidad de hacer llorar a las personas, eres un asco.

—¿Dónde está mi hijo?

Estaba perdiendo la paciencia con cada segundo que pasaba, estar junto a Sehun no le hacía bien, si seguía ahí la bolsa de regalo terminaría arruinada de tanto que la estaba apretando.

—¿Tu hijo? Tú no tienes un hijo, Chanyeol, ni siquiera eres un padre, no fuiste capaz de educar al niño. No sabes cual es su color favorito, a qué le tiene miedo y mucho menos cuánto pedía día a día que su padre se diera el tiempo para visitarlo y conocerlo. Eres una escoria, Park Chanyeol. Eres un desastre, una mierda, lo peor de lo peor. No puedo creer que mi amigo estuviera enamorado tanto tiempo de ti, ni siquiera puedo creer que haya aceptado casarse contigo y que haya malgastado parte de su adolescencia y tres años en un matrimonio de pacotilla. ¿Quieres saber algo más? No sabes lo destrozado que estaba él, no sabes como mierda se sentía, no sabes lo mucho que sufrió y cómo tuve que ayudarlo a vivir nuevamente. Baekhyun es feliz ahora porque ayudé a construir su felicidad y no dejaré que una basura como tú vuelva a quitarle la vida a mi amigo, ¿nos estamos entendiendo, pedazo de mierda?

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Ya es domingo👀

¿Qué dicen ustedes Team Yeol o Team Hun? A ver, peleense xd
Ya veo ahí, todos Team Hun.

Bai bai, nos vemos el jueves♡

Bai bai, nos vemos el jueves♡

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Día de PadresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora