XI

6.4K 699 141
                                    

Azotó la puerta tras de su espalda siendo inundado por la cólera. Su mejor amigo estaba tendido sobre el sofá tomando un descanso que fue interrumpido por sus fuertes pasos y su evidente enojo.

—¿Qué derecho tienes para meterte en mi puta relación, Oh Sehun?

El rubio levantó la cabeza sorprendido por aquella situación tan repentina, no tenía idea de lo que estaba ocurriendo y la razón principal era que su mejor amigo estaba igual de solo que él, así que no había relación en la que pudiera intervenir, por más que quisiera hacerlo.

—¿Este es otro de tus delirios?

Baekhyun suspiró completamente molesto, llevaba las manos sobre sus caderas y su expresión denotaba la rabia que había acumulado en el camino hasta su hogar, estaba hecho una furia y Sehun iba a ser su víctima por meterse en cosas que no le incumbían.

—¿Tanto me odias?

—¿Qué? Baekhyun, hemos sido amigos desde que tengo memoria, ¿qué te pasa? —restregó sus ojos con las palmas de sus manos, quitándose la manta que traía encima y cubriendo su espalda con ella antes de levantarse y quedar frente al cuerpo de su mejor amigo. A pesar de su postura desafiante lucía débil, siempre había tenido ese aspecto ante sus ojos.

Antes de recibir sus palabras, Baekhyun lo golpeó en el pecho, empujándolo sin fuerzas, enojado con la situación que estaba viviendo, por haber engañado a Chanyeol, por no terminar bien con él, por confiar en que nada malo pasaría y por tener un amigo que, según las palabras de su exesposo, había dicho cosas que no debía decir.

—Eres un maldito imbécil, hijo de puta, ¿quién te dio el derecho?

Terminó con los puños apretados contra el pecho del más alto que lo había abrazado para que dejase de actuar tan erráticamente.

—Porqué mejor no nos calmamos antes de hacer cualquier cosa de la que nos arrepintamos, ¿quieres agua con azúcar?

—Vete a la mierda.

—De acuerdo, será un té. Siéntate mientras lo hago —se vio arrastrado por la fuerza de Sehun, quien lo empujó por los hombros contra el sofá y le tiró la manta encima.

La soledad hizo presencia y se convirtió en su nueva mejor amiga, Baekhyun agarró la manta entre sus dedos mientras veía como Sehun esperaba a que el agua estuviese en su punto máximo. Tenía unas tremendas ganas de golpearlo, pero decidió aguantarse hasta escuchar su versión. Ya había comprobado que no escuchar llevaba muchas consecuencias.

Ya con la taza entre las manos y su mejor amigo a una distancia considerable, tomó un respiro antes de decir cualquier cosa. Dejó a medias una conversación con Chanyeol que era mejor terminar y llegaba a casa completamente cansado consigo mismo, con ganas de tirar todo a la mierda y desaparecer porque parecía ser la mejor idea para que todos estuviesen felices y sin problemas.

—Puedes hablar —musitó su amigo señalándolo con la cabeza, seguía un poco adormilado, pero la intriga lo estaba devorando por dentro.

No entendía a Baekhyun y su repentino ataque, podría ser por el sueño o porque no quería hacerlo.

—¿Qué mierda le dijiste a Chanyeol?

Sehun soltó un pequeño grito de frustración llevando sus manos tras de su cabeza, estaba aburrido de escuchar acerca del tema, no quería saber más sobre los problemas amorosos que esos dos tuvieron y tampoco estaba dispuesto a decir una sola cosa más.

—No le he dicho nada.

—¡Me estas mintiendo! Estoy seguro de que Chanyeol no caería tan bajo como para inventarse el cuento de que le has dicho cosas terribles, ¿me equivoco? Sé honesto conmigo, Sehun, tengo ganas de romper algo y puede ser ese horrible jarrón contra tu cabeza.

Día de PadresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora