Capítulo 13 — Empezando a arreglar la vida
POV Edward
El domingo lo pasé junto a Maddie y a Bella, mi madre la invitó para el almuerzo en familia, así que tuve un día muy agradable, Bella literalmente era una Cullen, se sentía a gusto con todos y mi hija, aunque la tuve la mayor parte del tiempo en mis brazos, fue el centro de la atención de todos, yendo de brazos en brazos sin reclamar.
Ya se aproximaba el final de la tarde, estaba en el cobertizo con mis hermanos y mi padre, las mujeres estaban en la sala, y desde donde estaba situado podía ver a Bella, que llevaba a nuestra hija en brazos, sentada en el sofá de dos plaza, Ethan estaba sentado a su lado, y acariciaba con extremo cuidado la cabecita de su prima, lo vi inclinarse y dejar un beso sobre su pelo, y después mirar a Bella regalándole una sonrisa dulce que marcaba los adorables hoyuelos de su rostro, ella le devolvió la sonrisa y después se inclinó para besar la mejilla regordeta de mi sobrino.
— Tierra llamando a Edward — oí decir la voz de Emmett, mientras pasaba su mano delante de mis ojos.
— ¿Qué? — Dije apartando su mano de mi rostro.
— Estás hechizado, hermano — respondió él, riéndose con ganas —, pensé que este día jamás llegaría — siguió él, pero después cambió a un tono serio —, no estropees las cosas con Bella, Edward, ella merece tener a su lado un hombre que la ame y que la valore por todo lo que ella es.
— No quiero estropear nada, Emmett, recién me doy cuenta de que me enamoré de ella — admití y vi a mis hermanos y mi padre intercambiaren miradas entre ellos.
— Esto ya era obvio para todos, hijo — puso de manifiesto mi padre —, bueno, casi todos, dudo que Bella se haya dado cuenta — completó cuando lo miré alarmado.
— No sé qué hacer, la quiero cómo jamás pensé que podría querer a una mujer — suspiré, llevando mis manos a mi pelo —, pero no sé bien cómo actuar ahora, jamás tuve que preocuparme por la manera cómo me aproximaría de una mujer, pero con ella es distinto, tengo que ser cuidadoso para no asustarla, no sé si creerá en mis sentimientos o si pensará que estoy intentado conquistarla por lo de Maddie.
— La perspectivas de las cosas cambian cuando estamos enamorados — señaló Jasper y enseguida se puso a analizarme como si yo fuera un paciente suyo —, es normal que sientas recelo, porque antes cuando te aproximabas a una mujer solamente la querías para pasar un buen rato, en realidad ella no te importaba para nada más que eso, y por eso ser rechazado o no te daba igual, sin embargo, ahora que deseas algo más que pasar buenos ratos sientes recelo en ser rechazado.
— ¿Cuánto te debo por la consulta? — Le pregunté cuando él finalizó su análisis.
— Lo siento, hermano, es un hábito — se excusó él.
— En general, cuando estamos enamorados deseamos poder estar con la persona de la manera romántica que ansiamos lo más pronto posible, pero en tu caso, hijo, te sugiero que seas paciente, tienes que demostrar a Bella que la quieres a ella no solamente por ser la madre de tu hija, sino porque es una hermosa mujer en todo el sentido de la palabra, tienes que enamorarla poquito a poco.
— Papá está en lo cierto, tienes que ir ganado espacio en su vida, en su corazón, ella tiene que conocerte, ustedes tienen que conocerse, en este sentido mi sobrina, aunque si saber, será el cupido, pues puedes utilizarla como disculpa, para salidas, para aparecer en su apartamento — dijo Emmett.
— Bella también siente algo por ti, es algo obvio para todos también — volvió a hablar Jasper, y sus palabras me causaron una extraña, pero buena sensación en mi estómago y en mi pecho —, pero probablemente desconfiará de ella misma y de tus intensiones, Maddie es su prioridad, sentirá miedo de poner en riesgo la buena relación que empieza a tener contigo si ustedes deciden intentar ser algo más que amigos, así que tendrás que tener paciencia, como te sugirió papá, y a través de pequeños detalles demostrar lo importante que ella es para ti.
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Mis preciosidades
Hayran KurguElla había adoptado a mi hija por un acaso del destino, lo que no imaginaba era que al ir en busca de mi niña también encontraría el amor verdadero. Ya era padre y de pronto me encontré deseando ser el marido de aquella mujer, y junto con ella y mi...