32 - Nada de despedidas

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JI AH


A pesar del hecho que estaba empujando a Tae Hyung lejos de mí, es solo empujado de vuelta y le dio la razón para quedarse. Ya deje de mencionar la palabra romper, pero ya le dije todo y le explique que le estoy dejando ir.


El plan falló y solo hizo que las cosas sean más complicadas de lo que ya estaban. Fue contraproducente. Se suponía que tenía que empujar al que yo amo para que no se lastime pero acabé empujándome a mi misma en alguien más y poniendo ambas corazones en peligro. 


Me siento como un monstruo.


Siempre me pregunté por qué Dios me dio esta enfermedad. Siempre me pregunté por qué estaba tan enferma, pero ahora puedo ver porque me dio este destino. Porque soy una persona terrible que hace decisiones terribles. Simplemente lo merezco.


—Amor, ¿de verdad quieres ir a clase? —preguntó enseguida Tae Hyung cuando salí. Han pasado dos días desde que salí del hospital, mis padres querían que descansara por un tiempo. No querían que fuera a clase porque no querían tomar el riesgo de que me pasara algo, pero les dije que la muerte es inevitable. Ya he aceptado que moriré tarde o temprano, solo son ellos quien no puede aceptarlo.


—Claro que sí. Puede que me esté muriendo pero sigo siendo una universitaria, sabes —contesté y a él no le hizo ni gracia. 


Cuando ya entré en el coche cerró la puerta y dio la vuelta para subirse en el asiento del piloto. 


—Lo siento —dije.


—No bromees sobre la muerte de nuevo.


—Solo estaba intentando aligerar el estado de animo. 


—Bueno, no es gracioso —dijo Tae Hyung serio y me quedé callada. Bajé la cabeza y mordí mi labio.


—Lo siento —dije y él soltó un suspiro. Él se movió y sentí el calor de su cuerpo cuando me puso el cinturón. 


Sé que Tae Hyung no le gusta que le haga esos bromas. Desde que supo la verdad, suelo bomear sobre aquello. Solo quiero que él lo acepté lentamente porque eso es algo que está destinado a pasar. Por lo menos así será más fácil para él superarme. 


Solo quiero asegurarme de que él estará bien una vez que desaparezca. Quiero que ellos vivan su propia vida. No quiero que me olviden pero tampoco quiero que estén dolidos porque ya no existiré. 


—Yo también lo siento. Es que no quiero que pienses que estoy feliz sobre esto. Incluso si me enojo contigo u te odio entre todos los seres humanos existentes en este planeta, nunca seré feliz viviendo en un mundo sin ti.


Sus palabras deberían haberme debilitado, sí, me hizo llorar pero no me afectó tanto como debería afectarme antes. Le amo, siempre le amaré pero estoy segura de que ya no estoy enamorada de él.

Rompecorazones | BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora