Una o mil estaciones.

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Solté al destino, y deje de aferrarme a la casualidad, deje ir a la coincidencia para decirle al tiempo: si tu quieres, lo aceptaré, pero no me dejes sin él.
Deje al viento revolver mi cabello y al calor secar mis lágrimas .

Que el tiempo te traiga de las maneras que al destino se le ocurra, que las casualidades te pongan en mi camino y que las coincidencias no te dejen ir más lejos de lo que ya te siento.

Que invierno se enamore de ti o que me diga mil veces que lo deje estar, que primavera me vea llover mientras tu brillas en el mar y verano te ponga la piel un poco más morena para que otoño pase de largo con sus canciones.

Que yo seguiré durmiendo con tus prendas a pesar de que el tiempo no quiera, que caminare por los lugares para que las coincidencias se cansen de jugar y las casualidades me pongan a la fuerza donde tu estés.

-A.