Capítulo 15: Cruel verdad.

2K 212 6
                                    

Me dirijo a la puerta preocupada, lo primero que se me pasa por la cabeza es que ocurrió algo con Alexia y su bebé.

Pero cuando abro me sorprendo viendo cómo Sebastián entra como un torbellino en mí casa sin pedir siquiera permiso.

Cierro la puerta observando su rostro lleno de furia.

- Cómo te atreves?- comienza.- Quién mierda te crees que sos!?- grita furioso.- Le llenaste la cabeza a Jimena y ahora ella está en mi contra, y no solo eso, sino que lograste poner a toda mi familia en mí contra.- me echa en cara.

Obviamente esa jamás fue mi intención, pero de qué vale que se lo diga? Sí total no me va a escuchar.

Hay Jimena, en que lío me has metido. Pienso para mí preocupada.

- Yo no le llene la cabeza a nadie.- respondo al fin.- Me crucé con tú hermana de casualidad, la reconocí por las fotos; igual que ella me reconoció a mí, y obviamente me preguntó qué pasó con nosotros...

- Y le dijiste mentiras para ponerla en mí contra!- me interrumpe gritando y haciendo gestos con las manos.

- Estás muy equivocado Sebastián, le conté la verdad. La verdad que vos no me dejaste decir por sacar tus propias conclusiones.- le echó en cara tratando de mantener la calma.

- Ah sí? Y que verdad es ésa? Digo si se puede saber.- pregunta con sarcasmo.

- La verdad es que esa noche yo me reuní con Jeremy para cederle el mando de los gastos de Verónica. Jeremy y yo nunca más volvimos a estar juntos de manera íntima desde que te conocí en Las Vegas. En realidad, nunca estuve con otro desde que te conocí Sebastián.- un sollozo se me escapa.

Él se echa a reír.

- Claro, y por eso te abrazó? O mejor dicho, por eso la parejita se abrazó con tanto cariño en el restaurante.- su tono es burlesco y enojado.

- Para tú información pedazo de asno, o debería decir completo asno, me estaba felicitando por mí embarazo.- le suelto de una.

- Embarazo?- pregunta confundido.

- Sí, estoy embarazada.- digo sonriendo.

- Ah, qué bien. Y quién es el padre?

Esa pregunta me duele en el alma, cómo carajos se atreve a preguntar eso? Acaso es capaz de negar que mí bebé es su bebé?

- Perdón,- dice sarcástico al ver que me dejó en shock.- seguramente ni tú te sabes quién es el padre de ese bebé. Pobre criatura le van a decir ahí está el bastardito.

Sus palabras hacen que la ira acumulada dentro de mí se libere y junto con ella saque todo lo que tenía guardado dentro.
En un impulso me tiró sobre el golpeándolo sin piedad, donde sea que alcancen mis manos.
Sonrió como una loca cuando una de mis manos resuena contra su mejilla, dejándola sonrojada.

- Maldito hijo de puta!- grito descontrolada mientras lo sigo golpeando y arañando, y el trata de controlarme.- Es tu hijo, cómo te atreves a llamarlo bastardo? Acaso no piensas lo que dices? Acaso no sientes?

- Ya basta Allison!!!- grita logrando sujetarme.- Acaso estás loca? Piensas que me voy a creer que ese bebé es mío? No seas estúpida.- me suelta y mi cuerpo ya sin fuerzas se desliza al piso.

- Te estoy diciendo la verdad!- grito desesperada.

- Que buena actriz sos!- aclama mientras aplaude.- Definitivamente sos multifacética; fotógrafa, modelo y actriz. Qué gran combinación!

De mis ojos fluye un río de lágrimas que no puedo controlar, de mí pecho escapan los sollozos.
Tanto daño le hice como para que ya ni siquiera crea en mis palabras?

No puedo maldecir el haberlo conocido porque eso sería maldecir la existencia de mí hijo, y él es inocente. Y yo lo voy a proteger como sea.

Con mis piernas temblando me pongo de pie sujetándome de la puerta de entrada de donde nunca me aleje.

- Haceme el favor de alejarte de mí y de mí familia Allison, porque te juro que voy a hacer qué lo lamentes.- camina hacia mí y me hace una seña para que me aparte de la puerta y yo con esfuerzo lo hago.- Vos para mí estás muerta, y lo siento por ese pobre bastardo que llevas en tú vientre.

Cuando dice esas palabras siento la puntada en mí vientre la cual me hace gemir de dolor. Me sujeto con una mano de la pared para no caer, y llevó la otra a mí vientre. El dolor me deja sin aliento.

- Deja de hacerte la tonta Allison.- dice abriendo la puerta.- Tus jueguitos ya no funcionan conmigo.- atraviesa el umbral y cierra tras de sí con un portazo.

Siento otra puntada, está me hace inclinar y allí es cuando veo el hilillo de sangre manchando mí pantalón y resbalando por mí piernas. Otro sollozo escapa de mis labios.

No mí bebé.
No mí dulce bebé.
Él es inocente.
Yo lo amo y no quiero perderlo.

Con estos pensamientos rondando en mí cabeza caminó lentamente por el temblor de mis piernas hasta el teléfono y marcó el número de emergencias.

- Hola. En qué puedo ayudarlo?- dice una voz femenina.

- Estoy embarazada y estoy sangrando, por favor vengan, me siento muy mal.- estoy desesperada.

- Tranquila, su llamada ya ah sido rastreada en tres minutos estará llegando la ambulancia a su residencia. No cuelgue señorita Stanley, siga conmigo. La puerta de la casa está abierta?

- Si.- respondo en un susurro, me siento cansada y débil. Mi cuerpo se desliza hasta el piso.- Estoy en el suelo, me siento mal.- digo a la mujer del teléfono.

- Siga despierta, ya están llegando.- ella suena preocupada.

En eso es cuando se escucha la sirena de la ambulancia.

- Ya están aquí.- susurro.

La puerta abriéndose y chocando contra la pared me lo confirma.

- Aquí está!- grita alguien.

- Rápido la camilla!- grita otro.

- Tranquila Allison.- el rostro de Fernando el novio de Max aparece frente de mí rostro.- Te prometo que vas estar bien.- me dice.- Allí está su bolso,- le dice a alguien.- tómalo, seguro lo necesitara luego.

Acaso a todos los que conocí por fotografías los voy a conocer personalmente y sin presentación? Me preguntó pensando que la primera fue Jimena. Ese pensamiento me produce otro sollozo.

Ellos me cargan en la camilla y me llevan rumbo a la ambulancia, sin dejar de hablar, aunque yo no logro captar nada, todo es inentendible para mí.

Después de que suben la camilla conmigo a la ambulancia todo se vuelve negro.

Malditas Vegas, Maldito Alcohol, les doy gracias por esté Amor (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora