Ambos sujetos decidieron acudir de inmediato a la comisaría para reportar lo sucedido.
Uno envolvió al bebé en una manta, el otro aguardó un momento a que cesara su dolor y un tercero observaba todo hasta que todos se fueron a un encuentro que no sería muy ameno que se diga.
Will, quien recibió la carta y el medio corazón, llegó primero, o eso parecía.
Al entrar y dirigirse al escritorio de Elizabeth, esta estaba con un apuesto sujeto de cabello azabache, mirada brillante como zafiro pulido y cuerpo delgado pero de lineas elegantes, vestía una camisa azul, unos pantalones negros ajustados y unos relucientes zapatos negros.
Al parecer el sujeto estaba reportando la desaparición de su amiga mas la conversación se detuvo al llegar Will.
Este denotaba tristeza y dolor en el azul de su mirada, y más profundo en ella odio, rabia y deseos de vengarse de quien arruinó su vida y la de la familia que aún no había completado.
El sujeto lo veía de reojo mientras este estaba por hablar con Elizabeth quien antes de que empezaré lo saludó
—hola will, aún no tenemos noticias de tu esposa pero...
—no la sigan buscando —interrumpió en seco
—¿en serio? ¿la encontraste?¿cómo esta ella? —preguntó emocionada
—muerta —exclamó con dolor
Cuando acabó su intervención, Mike, quien recibió al bebé entró con él en brazos, y alcanzó a oír lo que dijo Will
—no puede ser —exclamó asombrado —diganme que no es cierto
—¿quien es usted? —preguntó Elizabeth — ¿y ese bebé?
—ahora todo tiene sentido —exclamó Mike al entender la situación
—¿aún no comprendo? ¿Quien eres tú? ¿Como sabes de quien estamos hablando? —cuestionó molesto
—este no es momento para hablar sobre esto —exclamó nervioso Mike
—no me importa y quiero saber la verdad, ese bebe...
—es mio —añadió sin cavilar —yo y tu esposa...
—no puede ser cierto, el corazón, la nota, ahora veo todo claramente —añadió viéndolo fijamente
—no es lo que...
—no me vengas con tu frase cliché a querer decirme que no es lo que parece cuando todo es lo que parece —gritó molesto —ella está muerta, y al parecer el bebé, y la otra mitad de su corazón, te pertenecen.
—¿cómo puede decir eso? —preguntó Elizabeth a Will
—sospechaba que ella me era infiel, y cuando quedó embarazada lo comprobé, era imposible que fuera el papá, porque, SOY ESTÉRIL —exclamó con rabia e impotencia —pero al menos sé que esa criatura no quedará sola, ella a muerto para mi, ahora toma —exclamó poniendo la caja en el escritorio —esto te pertenece.
Luego, Will salió del lugar, y ante la mirada atónita de los presentes Mike había enmudecido del asombro.
Mike se acercó al escritorio con el bebé en brazos mientras Elizabeth abría lentamente la caja, y por su experiencia, ya podría imaginarse que era.
Su intuición acertó en que era algo macabro mas no en lo que contenía.
UN MEDIO CORAZÓN y una carta escrita en tinta azúl, que al leer lo que decía, los dejaría impactados:
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El asesino de ojos azules
Misterio / Suspenso"Los ojos son las ventanas del alma, y los de John son las puertas del infierno" El odio encendió su corazón y solo la sangre puede apagarlo. No te confundas con el azul de sus ojos porque la maldad se oculta detrás de ellos. Jugaron con su corazón...
