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Jungkook se encontraba pensativo, y eso Lisa lo había notado. Desde que él había llegado había sonreído con un poco menos de entusiasmo, como el solía hacerlo. Él estaba un tanto abrumado por lo que Gía había expresado la noche anterior, y maldecía una y un millón de veces mas a la madre de Gía por haberla dejado, aunque eso no la hubiera llevado a tenerla con él.

- ¿Estas bien? – le preguntó lisa preocupada. Se habían detenido a desayunar algo, y ahora ambos se encontraban sentados en una mesa esperando a que su pedido llegara.

Jungkook sonrió débil y negó. Sabia que no podía ocultarse de Lisa. – Gía ayer expresó algo que quería que no lo hiciera – Lisa no entendía lo que pasaba, así que permaneció en silencio para que él continuara – No quería que le tuviera odio a su madre por haberla dejado – Lisa no sabía como responder a eso.

- Jungkook te dije que esto no saldría bien – habló Lisa, estaba demasiado triste.

- No, no. Lo nuestro no esta aquí mal – expresó Jungkook rápidamente, no quería perderla – Creó que sólo eran las emociones del momento – trató de sonreír para hacerle saber que estaba bien, aunque eso no la convencía, le había sonreído también.

- Recuerda que no quiero que Gía salga lastimada.

(…)

- ¿Por donde comenzamos? – ambos se encontraban ya en la entrada de un gran centro comercial.

- Creó que será mejor comenzar en una juguetería – Jungkook asintió y ambos se adentraron.

Había demasiada gente comprando cosas desenfrenadamente, ¿y quien no? Si tan solo en tres días mas sería navidad. Jungkook estaba apunto de decirle a Lisa que regresaran, pero la mano de ella fue quien lo detuvo. Ella tomó la iniciativa y ambos comenzaron con su primera parada.

- ¿Qué crees que podría querer Gía? – preguntó Lisa mientras caminaban por un extenso pasillo donde había solamente cosas para niñas.

- Realmente no tengo idea, jamás me ha pedido algo o ha hecho una carta a santa – Lisa miró todo a su alrededor.

- Entonces esto será difícil.

Siguieron buscando algo que comprarle, y al final terminaron con un carrito lleno de diversos juguetes, desde muñecas hasta peluches. Vaya que Jungkook sabía como consentir a su hija. Cuando estaban en la larga fila para pagar Jungkook se había quedado solo, pues Lisa había ido secretamente a buscar algo para el regalo de Gía.

Un mensaje llegó a Jungkook. Su madre, en el mensaje había una foto adjunto a unas palabras “Esto es lo que quiere Gía, creo que me debes una explicación”. En la imagen había una carta que Gía había escrito para Santa, pues antes no había sabido que pedir, hasta esa navidad.

“Querido Santa: Siempre he sido buena niña, bueno algunas veces. Este año, lo que quiero es que Lisa sea mi mamá, ella es la mejor persona que conocí. PD: Sería mucho si también puedes traerme un hermano?.”

Jungkook no sabia que sentir, estaba impactado, pero al mismo tiempo le causaba gracia, en especial la última parte de la nota.
“Te lo diré en la cena de mañana, vas a conocerla, ella es increíble.”

Jungkook dejó de lado su teléfono y se quedó pensando en lo que su hija había pedido. Vaya que el sólo imaginar formar una familia con Lisa le causaba una felicidad enorme. Gía seria una gran hermana mayor; un bebé, se imaginaba como seria volver a cargar a un bebé en sus brazos; y lo mas importante, se imaginaba a Lisa cuidando a ese bebé con un amor increíble, al igual que trataría a Gía como su propia hija, mimándola siempre. Ese futuro vaya que era bueno para él.

- ¿En que piensas? – preguntó Lisa quien acababa de llegar.

Jungkook soltó una pequeña sonrisa – Sólo que Gía acaba de pedir algo.

- ¿Qué es? – preguntó feliz Lisa. Jungkook dudó un segundo en pensar si decirle o no.

- Solo prométeme que no te pondrás mal – aunque sabia que lo haría, Lisa se había preocupado, pero solo asintió.
Jungkook sacó su teléfono y le mostró la imagen. Lisa la leyó detenidamente y sus ojos se cristalizaron. Al final sus mejillas se pusieron rojas y rió de nervios.

- Y, ¿Qué piensas? ¿crees que podamos darle el segundo regalo? – ahora no solo fueron sus mejillas, si no su cara completa estaban de color carmesí. Jungkook rió ante la expresión y solo le causó unas ganas de abrazarla, y así lo hizo.

Buscando a Mamá (BAM#1) | LiskookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora