Cosa de magia (Dr. Extraño y tú)

Suave brisa

Nota de la autora:

Recomiendo leer este capítulo con la canción que os he dejado en Multimedia (Gone -Lucas King-).
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Narras tú

Thor corrió a mi lado cuando Tony me soltó y volvió a abrazarme con fuerza enlazando sus dedos en mi cabello mientras besaba con suavidad mi cráneo.

Mis brazos rodearon su cuerpo apretándolo con fuerza, no quería perder a nadie más en aquel momento pero por desgracia no fue así pues a los pocos minutos, Stark recibió una llamada de mi padre informándole de que Vincent también había desaparecido.
Mi corazón estaba destrozado por completo, pues había perdido a un hermano, al amor de vida y a mi hijo.

Las lágrimas no dejaban de caer por mis mejillas mientras escuchábamos al agente Ross.
Thanos había desaparecido y nadie sabía donde encontrarle pero todos debíamos estar alerta.

Ya era tarde y estaba muy cansada, además de enormemente triste.
-Ven- dijo mi hermano agarrándome en brazos -te llevaré a tu habitación-
-¿Por qué siempre nosotros?- sollocé -¿Por qué siempre somos nosotros los que perdemos a alguien?-
-Nos vengaremos pequeña- dijo acariciando mi cabello tras haberme acostado -y el sol volverá a brillar para todos nosotros-
-Tuve tanto miedo cuando Bruce me dijo que habíais muerto- dije secando mis lágrimas -creí que no os volvería a ver nunca-
-Eso no pasará- dijo volviendo a abrazarme con fuerza -siempre voy a protegerte ¿De acuerdo?-
-Vale- dije con una suave sonrisa.
-Cuando la cena esté lista te aviso- sonrió para salir de la habitación -ponte cómoda y trata de calmarte ¿Vale?-

Asentí con suavidad antes de que el rubiales abandonase mi habitación cerrando la puerta tras de sí.

Tomé una camiseta vieja, que había sido de Stephen, y me la puse a modo de camisón. Acerqué la tela a mi nariz y aspiré el aroma del perfume de Stephen una vez más mientras las lágrimas volvían a mis ojos.

La lluvia había comenzado a bañar toda la ciudad cubriéndola con un lúgubre y espeso manto gris. Tomé un álbum de fotografías donde tenía diversas fotos de Vincent y Stephen, demás de alguna de Loki y Thor conmigo y su sobrino para luego sentarme de nuevo en mi cama. Mis dedos se deslizaron por una fotografía donde Stephen tenía al pequeño sobre sus hombros con una enorme sonrisa y el niño no dejaba de reír a carcajadas. Acerqué la imagen a mis labios y deposité un suave beso en ella.

Cuando la puerta se abrió, Thor entró con dos bandejas de comida enormes.
-Stark nos da permiso- sonrió para sentarse a mi lado en la cama -¿Qué haces?-
-Recordar- dije con una suave sonrisa.
-Es una foto preciosa- rió con suavidad Thor con alguna lágrima empañando sus ojos -mira como reía el canijo-
-Le encantaba jugar con Stephen- reí -aunque siempre decía que no había un corcel mejor que tú-
-Que payaso- rió secándose una lágrima -pero es adorable, me recuerda a ti cuando eras pequeña-
-¿Te acuerdas de cómo chinchábamos a Loki?- reí con suavidad -como le despertábamos tirando de sus pies-
-Viejos tiempos- sonrió -que pena que no podamos volver a ellos-
-Si- suspiré para bostezar.
-Venga... vayamos a dormir- dijo para ir a mi baño y ponerse su pantalón de pijama.
-¿Te vas a quedar?- pregunté.
-Claro- sonrió -nunca abandonaría a mi hermana pequeña en una situación así-
-Gracias- dije metiéndome entre las sabanas antes de que él me abrazase.

Al poco rato, ambos nos quedamos profundamente dormidos como cuando éramos pequeños.

Después de haber dormido un par de horas, una suave brisa golpeaba mi cara y enredaba mi cabello.
Poco a poco mis ojos se fueron abriendo, miré el reloj y marcaba las 3:30 Am.
Froté mis ojos con suavidad y al darme la vuelta me sobresalté, pues Stephen estaba flotando delante de mí en su forma espiritual.
-Por fin despiertas- sonrió.
-¿Cómo es posible?- dije tapándome la boca -estás...-
-¿Muerto?- rió con suavidad -no, para nada-
-Eso quiere decir que...- dije poniéndome a pensar.
-Vincent, Parker, Falcon, Bucky, Challa...- enumeró -todos estamos vivos-
-¿Pero cómo es posible?- dije confusa -os desvanecisteis en forma de cenizas-
-Si y no- explicó -en realidad todos estamos atrapados dentro de la gema del alma-
-Eso quiere decir...- sonreí.
-Que si conseguimos arrebatársela a Thanos- habló el doctor -todo puede volver a ser como antes-
-Pero tenemos que quitarle ese guantelete- dije mientras Thor soltaba un ronquido al haberse sentado Stephen en la cama.
-Tienes que ser tú- dijo posando mi mano en su mejilla -lo he visto-
-Pero yo...- dije nerviosa -no creo ser lo bastante fuerte-
-No te subestimes- sonrió -ya has visto lo que has hecho en el campo de batalla ¿No?-
-Si pero...- respondí.
-No hay peros que valgan- dijo con seriedad -y te recomiendo que vayas a la biblioteca del maestro para recopilar información-
-Cuídales por favor- dije al verle desvanecerse.
-Lo haré- respondió antes de desaparecer.

Una sonrisa cubrió mi rostro antes de volver a quedarme dormida.

A la mañana siguiente, me reuní con mis compañeros en la cocina donde reinaba un silencio sepulcral.
Al verme con una sonrisa en el rostro, todos se extrañaron.
-¿Por qué sonries?- dijo Tony -¿Acaso te has olvidado de lo que ha pasado?-
-Están vivos- respondí -todos ellos. Bucky, Falcon, Parker, Wanda, Visión... ¡Todos!-
-No juegues con esas cosas (T/N)_____- habló Banner con pesadez.
-Stephen me lo ha dicho- dije seriamente -anoche vino a verme en su forma espiritual-
-¿Cómo no me di cuenta de eso?- dijo Thor confuso.
-Porque duermes como un auténtico alcornoque- dijo Viuda -¿Qué te ha contado?-
-Todos están dentro de la gema del alma- sonreí -el único problema es...-
-Quitarle a Thanos el guantelete- hablaron a coro.
-Si- suspiré -y debo ser yo quien lo haga-
-¡Claro!- gritó Tony emocionado -¡¿Pero cómo no se me había ocurrido antes?!-
-¿Qué pasa Tony?- preguntó Banner.
-No es necesario quitárselos- habló dando una palmada -podemos fundirlo-
-¿Fundirlo?- dijo el capitán América.
-Si se funde la estructura del guante- habló Banner con una sonrisa -las gemas ya no estarán unidas y por lo tanto...-
-Thanos ya no tendrá poderes- sonrió Thor -¡Es genial!-
-Solo tenemos que crear el plan adecuado- sonreí -pero necesitaremos también a Scott-