Viernes (...)

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— Mi hermano me envió un mensaje hoy.

— ¿Cual de los cuatro, Ai?

— Riku —Ai habló antes de comer un poco del arroz de su plato—. Me preguntó si Yusaku, o nosotros, iríamos de visita a su casa, en Neo Domino, por el verano.

Ninguno de los adultos notó cómo el adolescente de ojos verdes se ponía algo nervioso ante aquello.

— Ah… ¿Qué le respondiste?

— Que no sabía. Porque si te soy sincero Sere, la idea de viajar casi seis horas en auto no me parece muy grata…

— La verdad si. Es una molestia, además aún no sé cuáles serán mis semanas de vacaciones y tu tampoco. Así que mejor dile-

— ¿Que promedio necesito para que dejen que me vaya unas semanas a Neo Domino? —Yusaku interrumpió a su madre.

Los adultos voltearon a ver sorprendidos a su hijo, que removía con una mueca de asco un trozo de zanahoria, la pregunta los tomó totalmente desprevenidos.

Era algo usual que el hermano de Ai, Riku* Ignis, invitará a sus sobrinos, y hermanos, a pasar al menos unos días de visita en Neo Domino en las vacaciones y también lo era el que Yusaku amenazara con tirarse del auto en movimiento de seguir en ese viaje que ni quería hacer; la relación del chico con toda su generación familiar era un asco de forma casi unilateral.

— Perdón… ¿Pero qué dijiste, Yusaku-chan?

— Pregunté el promedio que ustedes me exigen para mandarme a Neo Domino todo el verano…

— ¿Para que? —La mujer de cabellos azules afilo con furia su mirada mientras observaba a su hijo— ¿Para asegurarte de reprobar los exámenes suficientes y no ir por castigo? Ahorratelo, no iremos.

— En realidad… esta vez si quiero ir a Neo Domino…

— ¿Por qué quieres eso Yuku-chan?

— Tengo mis motivos… por eso, ¿que promedio necesito para poder irme allá todo el verano?

— Consigue estar en uno de los cincos mejores de tu clase. Entonces dejaré que te vayas por todas tus vacaciones de verano a donde se te dé en gana, aunque se que eso no pasará, después de todo nunca has conseguido buenas notas, ¡ni en primaria las tuviste! —La mujer de ojos verdes se levantó de su asiento con cierto enojo— Aún antes de que apareciera Takeru… a veces desearía que fueras un poco más como él.

Yusaku no respondió, sólo bajo su cabeza y escuchó a su madre tomar los platos vacíos y caminar en dirección a la cocina; su padre le imitó minutos después.

Aún picaba con desinterés la comida en su plato cuando un vaso de vidrio le rozó la cabeza, que terminó por romperse en el suelo por el impacto, su padre pasó por su lado bastante molesto.

Sabía que pasaba, siempre pasaba en algún momento del mes. Estaba tan acostumbrado que ya no era capaz de escucharlos, aunque eso no afectaba el hecho de que le dolieran igual los oídos.

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Me gustaría aclarar, para las/los que no sepan, esta historia es continuación de un one-shot que escribí mucho antes de saber el nombre de todos los Ignis (Más allá de Ai, Flame y Windy) por ende les puse a los otros tres faltantes los nombres de Mizu (Ignis de agua), Riku (Ignis de Tierra) y Akio (Ignis de luz). Eso, nos vemos (?)

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