// WHEN A CHILD LAUGHS FOR THE FIRST TIME A FAIRY IS BORN \\
«Delicada: Dicho de una persona u objeto que está dotado de elegancia y satisface un gusto sutil y refinado»
¬ season four
¬ liam dunbar x oc
¬ j...
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Makayla se encontraba en el hospital de Beacon Hills, se había acabado su día libre y tocaba regresar a la normalidad. Pero aquello no le desagradaba, no a menos que hubiera algún fallecimiento de por medio, si no era el caso, le agradaba trabajar allí.
Ayudar a la gente se convirtió en la meta de joven cuando sus padres murieron y eso era lo que hacía como enfermera. Además... trabajar junto a Melissa McCall era una de las cosas que más le agradaban.
- ¿Entonces te beso? - pregunto la madre de Scott dándole un sorbo a su café.
- Ojala. - suspiro la rubia preparándose el suyo en la sala de descanso. - Pero nos interrumpieron, sonó el teléfono y... después estaba demasiado afectada como para si quiera pensar en retomarlo donde lo habíamos dejado.
- Entiendo... - acepto la mayor dejando la taza sobre la mesa. - No quiero que pienses en eso, así que... sígueme contando. Entonces, él te gusta ¿cierto?
- No lo sé... ósea si el me gusta o eso creo. Quiero decir, cuando le veo mi corazón se acelera y siento que me voy a desmayar. Cuando hablo con él me siento una tonta y no puedo dejar de decir estupideces.
- ¿Más de lo usual? - pregunto Melissa perpleja.
- Muchísimo más de lo usual. - corroboro la rubia.
- Eso sí que es serio.
- ¡Lo sé! - exclamo Makayla dejándose caer en uno de los sillones de la sala. - Me gusta su sonrisa y tienes unos ojos muy bonitos, además tiene unos abdominales... ¡Yo quiero lamer sus abdominales!
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- Definitivamente estas colada hasta las trancas de él. - sonrió Melissa antes de cambiar su expresión a una más traviesa. - Además de desesperada. ¿Cuándo tiempo hace desde la última que...?
- ¡Melissa! - la interrumpió sintiendo su rostro enrojecer.
- Hace mucho ¿cierto? ¿Era aún navidad? - cuestiono la mayor. - No espera... creo que Scott aun iba en bicicleta... - se burlaba empezando a soltar carcajadas nada discretas. - no, no... espera... creo que ni si quiera había empezado el instituto...
