16 | the plan

2.4K 251 171
                                    

Tras los sucesos del día anterior la manada estaba algo dividida, al parecer Malia Tate, era en realidad Malia Hale, hija de un tal Peter Hale, el malvado alfa que había convertido a Scott y Lydia, para luego morir y más tarde ser revivido por est...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Tras los sucesos del día anterior la manada estaba algo dividida, al parecer Malia Tate, era en realidad Malia Hale, hija de un tal Peter Hale, el malvado alfa que había convertido a Scott y Lydia, para luego morir y más tarde ser revivido por esta última. Además todos lo sabían, todos menos Malia - Faye y Liam - por lo que la chica coyote se había alejado de sus amigos en busca de respuestas y calmar su malestar.

Faye la había llamado aquella mañana para saber cómo estaba y aunque al principio se había mostrado reacia a hablar con ella finalmente accedió ante la frase de "me lo debes, intentaste comerme, tres veces" del hada. Secretamente Malia aprecio el gesto de la pequeña, supuso que era algo relacionado con su especie, pero estar en su presencia se sentía tranquilo y confiable.

Horas después Faye caminaba decidida en dirección a la casa de los Stilinski. No entendía demasiado las emociones humanas, pero había escuchado una conversación de Malia y Scott, en la que el último le decía cuan triste estaba Stiles, así que se propuso visitarlo e intentar animarlo.

- Buenos días. - saludo al padre de Stiles en cuanto este abrió la puerta. - Lamento profundamente la molestia, pero estoy aquí con la firme intención de consolar a su hijo por su ruptura con Malia. ¿Sería posible hablar con él?

- Eh... - luciendo una expresión confusa ante el vocabulario escogido por la chica tardo un par de segundos en reaccionar. - Si... él... él se encuentra en casa, puedes hablar con él.

- Se lo agradezco, señor. - asintió ella con una pequeña sonrisa, sin embargo, no se movió de la puerta, ante esto el sheriff se la quedó mirando aún más extrañado, hasta que finalmente entendió lo que sucedía.

- ¿No entraras?

- No si usted no quiere.

- ¡Oh! - comprendió. - Claro, sí, claro. Adelante, siéntete como en tu casa.

- Muchas gracias, señor.

- ¡Stiles! ¡Tienes visita! - grito el hombre adentrándose en su hogar tras haber cerrado la puerta. Desde la planta superior se escuchó un "ya bajo" de parte del muchacho. - No tardara en bajar.

- Se lo agradezco. - sonrió la chica de forma afable.

- Bien... yo voy a marcharme a trabajar, portaros bien. - añadió el sheriff. - Que extrañas son estas hadas. - murmuro para sí mismo mientras desaparecía tras la puerta de la cocina.

- Que tenga un buen día.

- ¿Faye? - escucho que la llamaban a su espalda, al voltearse pudo ver a Stiles de pie justo a la mitad de las escaleras. - ¿Qué haces aquí?

- Quiero cobrarme ese favor. - anuncio la chica. - Lo que me prometisteis a cambio de llevar a Liam a la casa del lago. - explico al ver el ceño fruncido del chico. Ella admitía ser algo ingenua en cuanto a los humanos, pero intuyo que a Stiles no le agradaría saber la verdadera razón por la que había ido a verle.

DELICATE | teen wolf ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora