—Bueno, diré esto una vez… Saldrás de la cama e irás a la escuela —Le dije a David.
Lo había ido a visitar. Estaba igual o peor que el primer día. Tirado en su cama, aún en pijama y su madre me había dicho que no había salido de su habitación en todo el día.
—No iré a la escuela —Me respondió mientras se tapaba con la cobija.
—¿Y por qué no?
—No quiero ver a la chica me rechazó todos los días.
—Estás actuando muy inmaduro, ¿lo sabías?
No me respondió.
—Vamos —Dije— Saldrás de ahí e irás a la escuela mañana.
—Ni siquiera mi madre ha podido sacarme de aquí, ¿qué te hace pensar que tú lo harás?
Me levanté de la silla en la que estaba sentado y me masajeé las sienes. Me estaba empezando a doler la cabeza así que tuve que tomar medidas drásticas.
—Escucha… No quería decir esto pero… Fue sólo una chica… Hay miles en el mundo y tal vez encuentres a alguien mejor.
—Sólo lo dices porque tú tienes novia.
—No es mi novia.
—Pero a ti sí te hace caso. No te dijo la estúpida frase de “te quiero como amigos”, que es una pendejada, si las mujeres desean un hombre lindo y que les haga caso, ¿por qué carajos lo mandan a chingar a su madre cuando lo encuentran? Dime, me porté bien, le presté atención y nunca pensé en faltarle el respeto, ¡pero nada de eso sirvió!
Lo miré. En verdad estaba enojado y decepcionado a la vez. Esperaba conseguir algo más con Paulina y no lo logró. Tenía razón cuando dije que había puesto todas sus esperanzas en ella.
El silencio seguía y la tensión aumentaba cada vez más… Hasta que yo hablé.
—Te entiendo…
—No, no lo entiendes.
—Sí lo entiendo…
—¡No! A ti no te ha pasado esto… No sabes lo que siento.
—Bien… Te lo diré. Fue hace un año, cuando tuve mi primera novia —Se incorporó en cuanto dije eso y me prestó atención— ¿Sabes lo que sucedió? Estaba completamente enamorado y creí que ella lo estaba de mí.
—¿Y qué pasó? —Preguntó.
—Ella me dejó. Teníamos sólo seis días de relación cuando lo hizo. Quedé devastado. No sabía qué hacer, y decidí luchar para recuperarla. Luché durante un año entero por ella.
—¿La recuperaste?
—No —Dije en seco— Cuando me di cuenta ella había vuelto con su exnovio y yo quedé como un tonto con un año desperdiciado yendo tras alguien que no me amaba.
No respondió. Simplemente me veía sin saber qué decir.
—Sin embargo —Dije— Ahora estoy feliz de que me haya rechazado.
—¿Qué?
—Sí… Después conocí a Mariana, y encontré todo lo que buscaba.
—Pero el problema es que Paulina era todo lo que buscaba…
Me reí.
—¿De qué te ríes? —Cuestionó.
—Yo también pensaba lo mismo. No importa lo que te hayan hecho David, no importa si te rompen el corazón una, dos, tres o las veces que sean, lo que importa es que algún día va a llegar alguien… que cambiará tu vida para siempre, y ese alguien va a darte su corazón, para que sanar todas las heridas que tiene el tuyo. Y no importa lo que haya pasado antes, esa persona va a ser todo lo que necesites y tú serás todo lo que ella necesite.
ESTÁS LEYENDO
ENTRE LA NUBE Y LAS ESTRELLAS
Teen FictionSantiago Sachs es un simple adolescente tratando de cursar su primer año de bachillerato. Su vida no es la mejor que todas o, como él la describe, somos simples manchas más en el universo. Pero todo eso está a punto de cambiar cuando conozca a Maria...