I'm not playing// Tae // Jungkook

Capítulo 14

—Espero que nunca más me vuelvas a asustar de ese modo, tonta —le hice mala cara a Suni —. Te golpearía, pero no quiero que tu mamá tenga una mala imagen de mí.

La mamá de Suni decidió quedarse una semana más con nosotras, así podría cuidar de su hija unos cuantos días más. Además, hace un par de días recibí la llamada de una pequeña y nueva compañía, el dueño estaba interesado en observar mi trabajo y entrevistarme. Si mañana todo sale bien, tendré trabajo después de un largo tiempo.

Hasta olvidé el nerviosismo y ansiedad que generaba el ser entrevistaba. Solo espero no cometer ninguna estupidez o decir algo completamente fuera de contexto, porque mi esperanza e intento de trabajar se irían a la mierda. Sí o sí tendré que mostrar la mejor parte de mí, bueno, lo poco decente que tal vez se encuentre en algún rincón de mí, porque me volví demasiado mal hablada y gruñona.

No eches todo a perder, So Hee. Esta probablemente sea tu única oportunidad de hacer algo bueno con tu vida. No me avergüences.

—Daré lo mejor de mí, Jin, lo prometo —suspiré.

Cada vez que intentaba hacer algo por mi propia cuenta, me terminaba decepcionando porque no me esforzaba lo suficiente, pero si se lo prometía a él, me sentía forzada a dar lo mejor para alegrarlo, aunque no tuviese la menor idea de en dónde se encontraba, cielo, infierno o simplemente en ningún sitio, solo dentro de mis recuerdos y corazón.

Sentía como que, si nadie fuese a llenar el enorme vacío en mi corazón que él dejó, porque dudaba que alguien me hiciera sentir exactamente lo mismo.

Pensaba más en él de lo que imaginaba, en cualquier sitio o situación, siempre lo tenía demasiado presente, tanto, que se volvió como un hábito.

Desde que él se fue, mi vida se volvió miserable y soy la única culpable de todo ello. Si no lo hubiese engañado estúpidamente con un desconocido, no en realidad si no hubiera salido a beber sola, no existiría tal engaño.

Fue quien lo hizo cambiar...

Estúpida, So Hee. Deberías hacer algo bueno con tu vida.

—¡Hee, que vengas a comer! —por dicha la voz de mi amiga me sacó de mis melancólicos pensamientos.

Ya no podía hacer nada, era demasiado tarde y él estaba muerto. Tendría que cargar la culpabilidad por siempre, por no haber sido sensata.

En cuanto terminé de comer, cepillé mis dientes y me coloqué la pijama para dormir. El dolor de cabeza me estaba torturando y mañana debía lucir bien en la entrevista de trabajo. Me envolví entre las cobijas como una oruga en su capullo, pero obviamente no me trasformaría en una preciosa mariposa, lo más probable era que me convirtiera en una horrible y desagradable cucaracha.

¡Vaya! Hasta mis pensamientos eran estúpidos.

Es curioso, porque últimamente no pensaba tanto en Taehyung como lo hacía en un inicio, bueno, mientras no me tocara, podía pensar con claridad, hasta era capaz de decirle las verdades en su cara.

¿Debería preguntarle el motivo? No, creo que es mejor si no se da cuenta. Después me lanza un maleficio encima para que vuelva a caer rendida a sus pies o algo así.

La sensación de que alguien estaba junto a mí, me despertó. Hice una pequeña abertura entre las sábanas para asomarme, aunque me sentía demasiado adormilada y veía bastante borroso; sin embargo, logré divisar una sombra junto a mi escritorio.

Me giré y volví a cubrirme por completo, pensé en simplemente encender la lámpara que estaba cerca, pero sin darme cuenta me quedé dormida nuevamente.