Capítulo 12

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Kookie:

Heeeee, ¿Tienes algo que hacer? Estaba pensando que podríamos ir a comer juntos, ¿Se te apetece?

12: 05 pm.

Yo:

Sí, en realidad no he podido comer nada, apenas voy a salir del hospital.

12:06 pm.

Kookie:

Bueno, en unos minutos llegaré, te espero afuera.

12: 06 pm.

Yo:

Está bien, nos vemos 💖

12: 07 pm.

Comencé a guardar mis pocas pertenencias en el bolso, bajo la atenta y curiosa mirada de mi amiga.

—Saldré con Jungkook. Regresaré más tarde —indico, cerrando el zipper.

—¿Él sabe lo de ese tal Taehyung? —su voz suena a reproche.

—No, y es mejor si no lo hace.

Desde hace unos tres días atrás había comenzado a hablar nuevamente con mi amigo, pero no habíamos tenido la oportunidad de vernos, pero eso tampoco quería decir que le iba a mencionar al idiota, no valía la pena. En mi interior, tengo temor de arruinar nuestra amistad y que sus sentimientos por mí cambiaran, aunque ni siquiera sabía con certeza lo que él sentía.

—Espero que después no te arrepientas de tomar estúpidas decisiones, él es un buen chico y no lo merece.

—Nos vemos luego —tomo el bolso y salgo de la habitación.

No quiero escuchar lo que sea que me diga, porque sé que tiene la razón, pero no siempre escuchar la verdad es lo más agradable.

En realidad, no me sentía mal por dejarla sola, porque en un par de horas su mamá iría a hacerle compañía y era mejor de ese modo. Por otra parte, el ambiente a hospital ya me tenía un poco mal, no era la clase de persona a la que gustara concurrir a esa clase de sitios, necesitaba salir de allí y distraerme un poco.

Mis tenis blancos rechinan durante mi recorrido por el pasillo, en el cual predomina el color blanco y todo está perfectamente limpio. Casi puedo sentir que soy una enfermera o algo por el estilo, solamente me falta el gorrito y la bata blanca o celeste.

Al salir del hospital, el alivio me inundó, hasta sentí que podía respirar nuevamente. Me detuve en la acera y observé los alrededores del lugar, mientras que golpeaba una y otra vez la punta de mi zapato contra el pavimento, en un intento de matar el rato.

Una pareja paseaba a su perro, una niña iba con su mamá de la mano, mientras comía alegremente su helado. Si pudiera regresar y ser una niña, lo haría, así no tendría ninguna preocupación, solamente me limitaría a pensar en qué podría jugar el mañana o qué golosina se me antojaba.

Escuché la bocina de un auto frente a mí, lo que me hizo sobresaltar. En cuanto observé que por la ventana se asomaba Jungkook con una sonrisa de diversión logré tranquilizarme.

—No era mi intención asustarte —mencionó en cuanto me adentré en su auto.

—Solamente estaba bastante distraída.

—¿Cómo ha estado todo? —me vio de reojo, mientras conducía.

—Desastroso, estoy como en ese punto de no tener la más mínima idea de qué hacer con mi vida. Ayer dejé algunos currículums en algunas empresas, creo que trabajar me ayudará a aclararme.

I'm not playing// Tae // JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora