XXVI

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El número que usted ha marcado se encuentra fuera del área de servicio, deje su mensaje después del tono: "Soy Jackson, en cuento escuché tu mensaje, regresaré la llamada".

Con algo de frustración, Jimin arrojó el aparato a uno de los sofás libres, y se sentó junto a Hyungwoon, su amigo imitó la acción de recostar su cabeza sobre el respaldo.

-¿Crees que se encuentren bien?.- La preocupación y frustración emanaban del rubio

-Tienen que estarlo...- Fue lo único que comentó aquel chico, para sacar también su celular e intentar contactarse con los chicos que se habían ido como si nada.

Se les unió Jungkook junto a Taehyung, el menor en un rincón vacío y el chico de párpados desiguales se sentó a un lado del rubio para posar su cabeza en uno de sus hombros.

-¿Siguen molestos?.- Preguntó sin rodeos Jimin.

-Nunca estuve del todo molesto.- Taehyung comentaba susurrando, aunque sabía que de todas maneras el chico lobo escucharía.- Me pidió que hablásemos, pero no era el momento, así que lo dejamos para después.

En parte tenía razón, la condición en la que se encontraba Jungkook no era la mejor para solucionar problemas. Un portazo fue lo que sacó de sus pensamientos a cada uno de los que se encontraban ahí, el primero en hacerse presente fue el pelinegro.

-¿Qué pasó, están bien?.-inspeccionaba a cada uno, hasta que dio con el cuerpo de uno de los menores.- ¿quién lo hizo?.

Yoongi estaba realmente molesto, el ambiente ya se estaba tornando más tenso de lo que era.

-Bambam...- Fue lo único que pronunció Jungkook.

Mark sin decir algo al respecto y con un semblante indescifrable subió, tampoco había necesidad de preguntar.

-Tía, yo sé que no le han movido de aquí por el dolor que siente, pero me veo en la necesidad de subirle a una de las habitaciones.- Jimin no espero respuesta y con bastante cuidado cargo el cuerpo del chico.- Jooheon, te esperó arriba.

Le dedicó una última mirada al grupo de chicos que se encontraba ahí y utilizó su extraño poder, de la nada ya se encontraba en la habitación de su hermano y con el pobre chico en brazos quejándose. Los restantes se quedaron impresionados con la naturalidad en la que Jimin estaba retomando sus poderes.

Namjoon iba tras el pelirrojo, pero Jin le tomó por sorpresa, poniéndose frente a él.

-¿A dónde tienes pensado ir?.- Los ojos color miel del chico le observaban fijamente.

-Puedo ayudarles, Jinnie.- Namjoon se acercó un poco más para quedar a un lado del mayor.- No te preocupes, ¿sí?, necesitarán algo de apoyo.

-¿Qué fue eso?.- Un Yoongi sorprendido exclamó ante los ruidos que se escuchaban.

-Debería ir.- Jungkook estaba por subir pero le detuvo Hyungwoon.

-No es buena idea, podrás controlar una parte de ti, pero tu lobo sigue sentido, así que lo menos que puedas ver a Bambam, es lo mejor.- Aclaró y volvió a su asunto del celular.

Aprovechando ese pequeño descuido, Namjoon  se había escabullido mientras todos prestaban atención a las palabras de Hyungwoon. Ya no hubo conversación alguna y se unieron para contactar a los que faltaban y a los que no tenían idea de a dónde diablos se habían metido.

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Un golpe tras otro era proyectado en la cara de Hoseok, no tenía noción de cuánto tiempo llevaba así pero era bastante. Ni hablar de sus otros compañeros, Jackson estaba inconsciente desde hace un buen rato y JaeBeom estaba a nada de estar en las mismas condiciones.

-¿En dónde mierda están esos malditos?.- Un hombre encapuchado habló mientras seguía con lo suyo.

-Ya te dije que no tengo ni la más puta idea.- Hoseok soltó y escupió con algo de sangre al sujeto.

-¡Ya basta, imbécil!, te dije que los hicieras hablar, no que casi los mates.- Aquella voz le puso los nervios al mil a Hoseok y tal parecía que también al idiota que le estaba golpeando.

No hubo necesidad de decir algo, el hombre encapuchado se alejó para después salir como todo un cobarde de la habitación.

-Mira muchacho, si no cooperan tú y tus malditos amigos, ¡los matare!, ¡necesitó a ese mocoso!.- Aquel tipo hervía de coraje.

-¿Mocoso?, por el amor de Dios, eres todo un imbécil, y ya te dije que no sé nada.- Hoseok apenas y podía hablar por el dolor pero mantenía una valentía que ni siquiera él mismo comprendía de donde le sacaba.

-Si así lo quieres, tarde o temprano me dirán, y yo me quedaré con un de esas cosas para tenerle de mascota.- Soltó una risa demasiado burlona para después largarse del lugar.

Era increíble como ese hijo de puta parecía llevar un paso adelante de ellos, estaban jodidos pues si bien habían dado con los desaparecidos, ahora, si era necesario tendrían que sacrificarse para llevarse el secreto de donde se encontraban a la tumba...

-Hobi... ¿qué va-mos a hacer?...- Pronunció con demasiado esfuerzo JaeBeom, mientras trataba de levantar su cabeza.

-Tranquilo, no te esfuerces, lo que haremos es como nos han enseñado a lo largo de este tiempo, callar aunque nuestra vida este en juego...- Le interrumpió 

-Proteger a nuestra familia aunque conlleve morir.- Su mirada ya estaba en Hoseok y de un momento a otro se derrumbó.

-Exactamente, proteger a nuestra familia...

No querían ser pesimistas, pero a como veían la situación, no muchos saldrían con vida de ese lugar y estaban dispuestos a morir con tal de que los otros si llegaran a casa...

«Outsiders» |YoonMin| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora