EMPAPELADO
"No hay nada peor que la imagen nítida de un concepto difuso".
—Ansel Adams.
VIOLET
—¿Por qué no me lo dijiste? —amonesta Duncan. Está realmente enfadado—. ¡Estuviste a punto de morir por una sobredosis de escopolamina Violet!, ¡pasaste cinco días inconsciente!
Más otro día y medio en recuperación sabiendo que esta "plática" habría de llevarse a cabo tarde o temprano.
—Lo siento, pensé en decírtelo antes, pero...
—Pero ¿qué? —intercede, levantando la voz—. ¿Por qué evitaste contarme que el prestamista te vio semanas atrás? —me acusa. Sus ojos son una explosión de enfado puro. Tira de sus cabellos lisos y negros mientras voltea en señal de inquietud. Durante los últimos minutos no ha dejado de moverse de un lado a otro y por toda la habitación del hospital—. Es por ese sujeto ¿cierto?, el que vive contigo. —Se detiene abruptamente y me reprende con sus ojos abiertos a medio gas. Por más que quiera, jamás podrá abrirlos del todo.
—No —contesto, y sé que estoy mintiendo a medias. Estúpidamente creí que podría finalizar mi carrera sin ser descubierta por Brent y si tan solo me ocultaba en casa de Anton, porque como una niña inmadura seducida por palabras llegué a pensar que estaría a salvo en "su búnker", porque luego pasó todo eso entre nosotros y creí que todo estaría bien a partir de ahí, pero me equivoqué—. Fue mi decisión no contarles, él no tiene nada que ver.
Solo fue la influencia que me impulsó a posponer la realidad con respecto al peligro que corría quedándome en su apartamento.
De todos modos, Duncan está actuando como un hermano sobreprotector y exagerado, cuando él seguramente se ha acostado con más de la mitad de enfermeras del hospital sin ningún compromiso. Pero no intento hacérselo ver, sé de buena tinta que encontrará un pretexto para encolerizarse todavía más.
—Claro que tiene absolutamente todo que ver. —Avanza un paso hacia la camilla en la cual me encuentro sentada—. Sabía que los amenazó a ti y a mi tío, pero de todas formas no le importó ponerte en riesgo permitiéndote vivir con él, y lo que es peor, habiendo tenido a Brent de empleador. Y tú... —enfatiza una pausa—. Preferiste callar, intuyendo que al enterarme habría ido a sacarte de ese sitio, lo que habría resultado mejor.
Sí, fue muy estúpido de mi parte quedarme y ahora me doy cuenta.
—Duncan. —June intenta tranquilizarlo, tomándolo del brazo con sumo cuidado, como si fuera una bomba que amenaza con estallar—. Eso ya no importa. Es decir, han pasado siete días desde el incidente y Anton ni siquiera se ha pronunciado.
Sus palabras me duelen muchísimo, pero son la verdad. Desde lo ocurrido en el subterráneo ni siquiera he recibido un solo mensaje por su parte, pero sé que está bien, demasiado bien, a decir verdad.
Mientras permanecía en esta sala de hospital inconsciente, él aceptó casarse con Cailin, y esta vez no es ninguna mentira inventada por ella. June llegó con la noticia el día de ayer, mostrándome un video en el que se los ve muy juntos en el campus, ambos admitiendo lo de la boda.
Ver eso me llevó a cuestionarme si acaso lo que vivimos fue real o una completa farsa. ¿Solo jugó conmigo? Esa pregunta todavía da vueltas en mi cabeza, doliendo terriblemente.
Contemplo a mi amiga con súplica, sabiendo de antemano que Duncan no va a ceder.
—Y es mejor así —manifiesta—, porque si lo vuelvo a ver juro que esta vez no lo enviaré directo a emergencias, sino más bien a la morgue. Ten en cuenta que en el bar me contuve por ti, Violet, pero no habrá una segunda vez. —Hace mucho tiempo que no me llama por mi nombre.
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El enfoque perfecto ✓
RomanceVenus fotografía al campeón de natación sin permiso, pero cuando él la descubre, todo se vuelve más adictivo. *** Venus se dedica a sacar fotografías del ganador de las nacionales de natación sin su consentimiento y luego las vende a sus fans, convi...