Capítulo 20

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Ya habían pasado un par de días y la pelea entre Izumi y Kacchan se había vuelto una guerra, ambos luchaban en ver quien atrapaba y huía mejor, porque eran ya una hora y media donde Izumi se escabullía y huía de su madre, el cual estaba bastante molesto.

Deku solo escuchaba a Kacchan maldecir y a Izumi devolverle los insultos de manera infantil.

¿Por qué todo ese alboroto?

Fue en el momento en que Kacchan mencionó que lo debía dejar en casa de los Iida que todo ese ajetreo comenzó.

No le basto con decir que lo llevaría de compras para su regreso al preescolar — al cual Izumi no quería volver — además le dijo que lo dejaría en casa de sus tíos Tenya y Ochako.

No con su tío Todoroki o su tío Kirishima, o incluso sus enérgicas abuelas eran mejor opción, no, su madre decidió mandarlo a casa de los Iida.

Izuku no entendía él porque del alboroto, por más que trataba de interferir, no sabía cómo, su esposo e hijo eran igual de agresivos y enérgicos, sentía que se interferir sería un suicidio.

Pero sus instintos le decían que lo hiciera, Izumi había pasado por debajo de sus piernas, mientras huía de Kacchan, Deku aprovecho esto y cuando el rubio paso por su lado para tratar de atrapar al infante, lo tomo de la cintura y lo abrazo por detrás para no dejarlo huir.

—¡Deku bastardo, suéltame...!

El gritoneo bastante molesto porque estaba a punto de atrapar al chiquillo, pero su voz se cortó al percatarse de la posición en la que estaba, al girarse y encarar a su alto y fornido esposo, el cual lo abrazaba apegándolo con sus brazos, ¿Qué acaso Izuku no entendía lo mucho que le encantaba su grandulón marido?

—Kacchan ¿Por qué Izumi no quiere ir con Iida y Uraraka?

Izuku mencionó aquello tranquilo, se percató del rostro sonrojado del rubio y por fin entendió, lo soltó de manera rápida de igual forma sonrojándose por ello, no sabía porque paso, pero fue involuntario.

Kacchan se alejó un poco y trato de recobrar sus sentidos.

—No es por tus amigos, es por la mocosa que tienen.

—¿La pequeña Tora?

Interrumpiendo la conversación de ambos padres, el infante se asomó por detrás del sofá donde se había escondido.

—¡Si, está loca! ¡No quiero ir!

—¿Loca?

—La mocosa tiene un enamoramiento por el enano, y el aun esta en esa edad donde cree que las niñas tienen piojos, así que ayúdame o llegaremos tarde.

El pecoso rio ante el comentario del rubio, y le ayudo a atrapar al infante, así el pequeño se resignó a ser llevado de compras y por ultimo llevado a casa de los Iida, donde fue recibido por la chiquilla quien lo arrastro dentro dispuesta a obligarlo a jugar a lo que seguramente fuera con sus muñecas o si estaba en modo a los héroes.

Deku se rio por las expresiones del infante, no creía que su pequeño hubiera heredado esa personalidad de su madre, donde detestaba el socializar con otros.

Ya solos Izuku observaba como el rubio manejaba de manera bastante tranquila, parecía que iba camino al centro de la ciudad, no sabía a donde se suponía que se dirigían realmente.

Los últimos días fueron bastante extraños, conversaban solo lo necesario, se limitaban a convivir cuando el infante estaba como intermediario, las noches fueron aun difícil, Deku solo lograba permanecer dormido por un rato y después se levantaba, pero no dormía, solo caminaba entre los pasillos, bebía te, o a veces se limitaba en observar al Omega dormir.

Recuérdame - Omegaverse (DekuKatsu) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora