Capítulo 51

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Su cuerpo pesaba y comenzaba a dolerle la vista cuando la luz se encendió, todo era blanquecino en la habitación, se removió con dificultad, cada día su vientre era más grande y se le dificultaba moverse.

Había perdido la cuenta de cuantos días habrían pasado ya, sabía que muchos, al menos un mes, eso creía, no lo sabía realmente, su garganta seca y ojos hinchados le incomodaban, se intentaba sentar con dificultad sobre esa simple cama de sábanas blancas.

No estaba esposado, no era necesario, era inútil en ese estado, por más que quisiera explotar todo a su paso y matar a todo idiota que entrase a su habitación no podía, era lento y su cuerpo ya estaba adolorido por su embarazo de ya casi ocho meses.

Recuerda que ese es el mes crítico, cualquier brusquedad podría provocar un parto prematuro y eso sería peligroso para el nacimiento del bebe en su vientre.

Además, ese no era solo el motivo por el cual no podía pelear, el alfa que lo trajo ahí entro junto con un enfermero con su comida del día, no eran estúpidos, lo necesitaban sano después de todo.

—¿Dónde está?

—Ya se te informo Ground Zero que no se te permitirá verlo, pero el que te comportes será beneficioso para su bienestar.

Izumi era su mejor carta contra él, realmente no eran estúpidos, sabía que estaba en ese horrible lugar, el día que llego ahí y despertó el pequeño estaba frente a él lloriqueando mientras ese alfa lo tomaba de su pequeño brazo sin dejarlo huir a los brazos de su madre.

Lo llamo desesperado, pero simplemente lo alejaron de él, prometiendo que no lo dejarían verlo mientras no se comportara e hiciera todo lo indicado, que hasta ese punto solamente era acceder a todas las pruebas médicas referentes a su embarazo.

Sabía que significaba todo eso, las intenciones de esas personas eran claras, querían aprovecharse de sus dos cachorros, Izumi estaría ahí mientras necesiten tenerlo controlado, pero sabía que cuando él bebe en su vientre naciese todo estaba acabado para los tres.

Se lo arrebatarían como a su cachorro, solo debía esperar a Deku, a que su esposo lo encontrase como la última vez, confiaba en él, sabía que el vendría en su rescate y mataría a todos esos bastardos, el amor por su alfa era lo único que lo mantenía cuerdo para ese punto y no lo hacía resignarse a que esas personas lo harían pasar un infierno aun peor al actual.

—¿Cómo sé que está bien? ¡quiero verlo!

El alfa lo vio irritado mientras el omega alzaba la voz molesta, le era intrigante como Ground Zero tenía un carácter tan fuerte y altanero teniendo un alfa como el héroe Deku que se veía imponente y fuerte, pero eso lo volvía más cotizado, porque incluso si sus cachorros resultaran ser omegas, teniendo un carácter así serían muy útiles.

Lo pensó y tal vez sería conveniente, así podría aun mantenerlo a "raya" y seguiría comportándose, después de todo el cachorro no se encontraba tan lejos de la habitación del omega realmente.

—Está bien, pero será breve solo para que entiendas que debes permanecer sin dar problemas.

Se retiró junto al enfermero dejando al omega solo, estaba desesperado, sentía mucha ansiedad, las horas pasaron y ya no sabía qué hacer, apenas había probado bocado y comenzaba a desesperarse.

Escucho la puerta ser tocada y la voz del alfa llamándolo lo alerto, porque no fue un toque para indicar que pasaría, fue fuerte y brusco, más que nada para llamar su atención, abrió la puerta y se dirigió a él tomándolo del brazo para seguirlo, no dijo nada para cuestionarlo, hacerlo no servía de nada.

Recuérdame - Omegaverse (DekuKatsu) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora