Capítulo 9: Mascota

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Me adentré en la mansión, "Papá Dino" Me llevaba de la mano,  había muchos cuadros de pinturas,  como las que Griffin veía en los libros,  pero no era el momento de turistear,  tenía que salvar a mis amigos,  ¡tenia que hacer algo!... Me armé de valor y le pregunté

—Mis amigos viven,  ¿verdad? — dije algo temeroso,  el se tocó la barbilla como inventando algo,  lo cual me fastidió

—te refieres a los niños que estaban contigo?,  si,  están vivos,  los verás esta noche— dijo con una enorme sonrisa,  yo sabía que algo andaba mal,  pero si lograba llevarme hasta ellos me hacia las cosas más fáciles

—Debes morirte de hambre,  ¿me acompañas a cenar? — dijo acariciandome el cabello,  no dije nada,  la verdad ni hambre tenía aunque tenía casi un día sin comer,  me llevó a un gran comedor y me sentó a su lado,  un hombre bien vestido me llevó un plato con varios Cortes de carne,  puré de papa  y verduras,  luego me sirvió un gran vaso de jugo de naranja,  ciertamente se me hacía agua la boca... Pero mi instinto me decía que no debía comer nada...

—Adelante,  Ash,  esta es mi carne favorita,  tierna y muy jugosa— me acercó el plato

—No se me antoja— empujé el plato de regreso,  el hizo un gesto de disgusto

—No seas malagradecido, debes comer cuando se te ofrece— su mirada me aterró, no tenía alternativa de todas formas,  asentí levemente con la cabeza,  tomé un tenedor y puse un trozo de carne en mi boca,  realmente era deliciosa,  Dino sonrió al verme comer como el ordenó,  terminamos de cenar en unos minutos,  ya que yo deboré todo rápidamente una vez mi deseo de comer aumentó,  el se limpió los bigotes con una servilleta,  temía lo que sucedería a partir de ahora.

Se levantó de su asiento y puso su mano en mi hombro
—Sabes,  Ash,  yo adoro a los niños— dijo poniendo un poco de fuerza en la mano,  me quedé quieto y en silencio

—Tu,  peculiarmente,  eres un niño precioso ¿lo sabías? Tus ojos color verde Jade, tu cabello,  y tu piel suave,  te hacen muy valioso para muchos— ahora mismo sentí como la sangre se me heló... Me tomó de brazo para que bajara de a silla,  luego me encaminó fuera del comedor,  sin soltar me,  caminamos por largos pasillos hasta que llegamos a una recámara,  inmediatamente supe lo que quería,  halcé mi brazo para soltarme y dar la vuelta,  pero me sujetó de la cintura levantándome con agresividad

—NO!!! NO POR FAVOR!!! DÉJAME!!! DÉJAME!!! — Grité dando patadas,  me arrojó a la cama y me ató con unas muñequeras de cuero que colgaban de la misma,  mi corazón se aceleró,  tenía miedo,  mucho miedo... Cuando comenzó a acercarse pude ver siluetas de otra persona,  el entrenador,  se acercaba... Estaba alucinado,  pero era escalofriante.. Mi cuerpo no dejaba de temblar... Me bajó los pantalones y la ropa interior,  pasó su regordeta mano por mis partes íntimas,  mientras con la otra tocaba las suyas,  era algo repulsivo

—Eres... Un niño hermoso... Y eres mío... Todo mío— se relamió los labios

Era un hombre mucho más fuerte que yo... No soy estúpido,  sabía que si me resistía sería peor... Cerré los ojos intentando alejar los recuerdos que me atormentaban,  pero era imposible,  lágrimas frías brotaron por mis mejillas mientras Dino pasaba sus manos por todo mi cuerpo... No es justo,  yo no podía defenderme! 

Finalmente se detuvo,  pero luego tomó mis piernas y las abrió despacio, el se desabotonó los pantalones, pude ver esa cosa... Ahora venía lo feo...

No se contuvo, se abrió paso dentro de mi, sentí que me ahogaba en mis propios gritos de dolor mientras él reía y gemía del placer,  entendí que entre más gritaba más se emocionaba,  así que cerré la boca,  conteniendo el llanto,  esto no le agradó...

—¿No te gusta,  cariño?... Pero si me estoy esforzando... — me dijo entre agitadas respiraciónes,  no contesté,  permanecí con la boca cerrada,  entonces el tomó de lado de la cama una varilla,  y me azotó el pecho

—¡¡CONTESTAME CUANDO TE HABLO,  PERRA!!! —

En verdad esa varilla me cortaba como si fuera una navaja,  creí que moriría... Solo pensaba ¿Que hice para merecer esto? ¿Como fue que acabé aquí? ¡SOY SOLO UN NIÑO DE 11 AÑOS! Quiero ir a casa!  Quiero ver a Griffin!  Quiero jugar Baseball! ¡Quiero una vida feliz! ¡¿Porque me pasa esto?! ¿¡PORQUE!?

Comencé a llorar,  él no se detuvo,  siguió y siguió... No se por cuanto tiempo... Hasta que empecé a sangrar... Dolía mucho... Demasiado... 

Al fin se alejó de mi... Se recostó a lado de la cama... Yo respiraba agitadamente por mi llanto... Había varias cortadas en mi pecho y piernas... Pero mi interior estaba desgarrado...

—G... Griff.. in.. Ayuda... Ayuda..me.. — dije con lo poco que me quedaba de aliento... En un ligero susurro... De verdad... Fue la primera vez en que de verdad creí que morir sería lo mejor ahora...

La muerte sonaba tan dulce e insoportablemente tentadora...

No se que sucedió luego... Creo que quedé inconciente... Cuando desperté estaba en la misma recámara,  afortunadamente Dino ya no estaba... No podía ni levantarme... Había sangre en la cama y un líquido blanquecino... Ambas cosas venían de mi interior... "Que maldito asco"...

Como no podía levantarme usé las sabanas para intentar limpiarme... Pero era extremadamente doloroso... Mejor me quedé Quieto... Sollozando en silencio...

" me quiero morir... Por favor... Ya Déjame morir... " Pensé.

Continuará...

Hola!  Gracias por leer el cap de hoy! Recuerden que si les gustó por favor déjenme una ⭐ la vida de mascota de Ash acaba de comenzar... ¿Que piensa hacer Dino? Esperen el próximo!!

Mientras Mi Ser Se RompeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora