Una Mamá para mi Bebe (#3 Saga Bebé)

Pídeme que me detenga #11

Aurora:

No me molestó saber que Desmont James se había encargado de investigarme, ni que sabía lo básico de mi historia, al menos no como quizás el lo esperaba y no después de que me ofreciera su hombro para llorar.

Llegamos a un acuerdo donde no habría más investigaciones en el futuro y yo me quedaria en casa, en pocas palabras, me dejo quedarme con Sofie.

Y luego el besó.

El besó.

He tratado de mantener el tema alejado y hasta el momento me ha servido, sin embargo me aterra cuando lo meta de tema de conversación.

—¿En qué piensas?. —Me pregunta Lia mientras vemos la televisión.

—En nada.. —Respondo y cojo otra palomita. —Solo miraba la película.

— Vamos, no has estado presente los últimos 20 minutos.

—¿Cómo lo sabes? . — Me burlo. — Has estado viendo la película.

Señala sus ojos. —¿Ves esto?

Alzo una ceja.

— Se llama mirar de reojo, por un lado te miro a ti y por el otro.—Señala la televisión.

Me acomodo en el mueble luego de rodar mis ojos.

—Ya dime... o mejor no.

No entiendo a esta chica.

—Déjame adivinar .. ¿En Desmont, no?

Siento un repentino calor en las mejillas y me arrepiento de contarle lo sucedido a Lia, aunque no quería arriesgarme como la última vez cuando omití contarle mi discusión de Desmont y terminamos con una cena doble incomoda.

No quiero más sorpresitas.

—¿Qué sucede, Aurora?

— Solo ha sido un besó.

—Si hubiera sido solo un beso, estaríamos viendo la televisión, no hablando. —Coge el control y apaga el televisor, ahora toda su atención está en descifrar mis pensamientos. —Dime.. ¿Te gusta?

—¿Qué estás diciendo, Lia?

—Lo que parece, solo estoy atando cabos que no me ayudas cerrar.

Suspiro.

—No quiero hablar de eso, fue un beso y ya, no es como si él y yo..

—También te dio un hombro donde llorar. — Agrega. — Y es guapo.— Alza las cejas provocando mi enfado. —Y es soltero.

— Viudo. — Le corrijo. — Desmont es viudo, Lia.

— ¿Y eso no es lo mismo que estar soltero?

—Claro que no lo es.. — Me muerdo el labio. — Su esposa sigue estando presente y el todavía la ama.

—Eso crees tú.

No, lo he visto.

—Ni siquiera sé porque hablamos de Desmont James el único día donde estoy libre de él.

—Porque te gusta.

— Claro que no.

—Si no te gustara no lo hubieras besado, te gusta el "Congelado"

Me rio ante la última palabras. —Iceberg, su apodo es Iceberg.

Lia se encoje de hombros. — ¿Y eso qué?

Suspiro.

—¿Cuál es el problema? .—Mueve las manos a un lado y luego a otro. — Tu estas soltera, él está.. — Le doy una mirada acusadora y ella sola se corrige. —Y él es viudo... Además he visto cómo te mira, desde la cena.