Hermione Malfoy de soltera Granger no podía dejar de mirar la foto de su hija junto a su nuevo compañero y no poder seguir impresionada del parecido que tenía con Abraxas Malfoy de joven, lo cual sin duda era más que extraño.
—¿Qué pasa mami? —la castaña voltea hacia su hija menor que ingresa a la biblioteca con un libro en mano.
—Nada Cissy, ¿ya te encuentras mejor? —la pequeña rubia había faltado a clase debido a un pequeño resfriado que había agarrado y ya que su padre era un dramático de lo peor prefirió que faltara a clase, incluso cuando la pequeña se había negado debido a que era día de clase de arte.
—Todavía me pica aquí —responde señalando su garganta. —Pero me desperté y no estabas.
Hermione toma a su hija en brazos – aunque ya no es tan fácil como cuando tenía tres – y la lleva a su habitación.
—¿Papi vendrá a almorzar? —le pregunta cuando la arropa en la cama abrazando su pequeño hurón de peluche – regalo de Clary – que era la adoración de su hija.
—Sí, prometió traerte un pequeño pastel, pero debes sentirte mejor.
—Yo sí quería ir a clase.
—En eso eres igual a tu madre —la pequeña salta de emoción cuando escucha la voz de su tía en la puerta. —Hola preciosa.
—Hola tía —responde la rubia saltando a los brazos de Clary. —¿Viniste a verme?
—Un pajarito me dijo que estabas enferma, así que vine a ver a mi pequeña princesa —responde acariciándole el cabello.
—¿Y Vilu no es tu princesa?
—Vilu es mi gran princesa.
—¿Me lees una historia?
—¿Muggle o mágica?
—Eres buena inventando historias, sorpréndeme —la castaña solo bufa cuando la pequeña se porta como una digna Malfoy y con eso empieza a contarle una historia de dos piratas, uno del futuro que se enamora de una muggle que conoce en uno de sus viajes en el tiempo.
Hermione sabe que su hermana e hija se demoraran así que decide ir a su oficina a enviar un poco de trabajo por fax para compensar que no fue a trabajar.
—¿Te encuentras bien hermanita? —pregunta Clary una hora después cuando ve a su hermana sumergida en sus pensamientos más que en el documento que tiene enfrente, lo cual ya es una señal de que algo le pasa.
—Sí, solo hoy Themis subió una foto.
—No me digas que otra vez ese idiota le hizo algo, si es así voy a enseñarle unas cuantas cosas a lo muggle —Hermione detiene a su hermana indicándole la foto. Al verla la castaña abre los ojos como platos. —¿Quién es?
—Su nuevo compañero y amigo.
—Que guapo que está, en mis tiempos de Hogwarts los únicos guapos eran Orión y Teddy, pero son como mis hermanos así que iugh.
—Clary, ¿no se te hace raro que se parezca a Draco y Lucius? —la castaña toma en sus manos de nuevo la imagen y levanta repetidamente la mirada entre la foto de matrimonio que tiene Hermione en su escritorio.
—Un poquito —vuelve a mirar la foto. —Bueno, más que un poquito, ¿tendrá novia?
—¡Clarisa!
—¿Qué? Me vendría bien un novio y más uno así de guapo.
Hermione suelta un suspiro ya que su hermana es imposible. O tal vez ella solo está imaginando cosas donde no las hay, después de todo los Malfoy y Black tienen una larga historia familiar, el parecido solo debe ser una coincidencia.
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Historias y aventuras de una nueva generación
FanficUna travesura inocente, un viaje que cambió todo y un futuro que los espera con muchas sorpresas.