Sip.
Quiero todo, necesito todo.
Y quizá por eso llego a ser un poco detestable.
Aparte de que nunca hago mucho por apoyar, pero me tienen que hacer caso a mí por obligación.
No hay mucho que decir.
ESTÁS LEYENDO
Son los sentimientos de una fruta.
RandomPorque las frutas adorables, por dentro pueden estar muy podridas. Demasiado podridas, diría yo.